El documento describe cómo las personas se acostumbran a una vida rutinaria sin vivir plenamente. Se acostumbran a no mirar hacia afuera, a no abrir las cortinas, a encender la luz temprano y olvidan el sol, el aire y la amplitud. Se acostumbran a apresurarse sin disfrutar el día. Se acostumbran a esperar el fin de semana para descansar en vez de vivir el presente. La vida pasa rápido y al ahorrarla nos perdemos de vivirla plenamente. Hay que aprovechar cada