Este documento presenta los resultados de una investigación sobre las características de la narrativa fantástica juvenil publicada después del éxito de la saga Harry Potter entre 2001 y 2006. El estudio analizó 40 libros de este género y concluyó que proponen ficciones complejas y bien elaboradas que combinan humor e ironía, reescriben géneros clásicos y plantean conflictos para fomentar la diversidad y el pluralismo.