La inflamación es una respuesta defensiva del organismo ante un agente irritante o infectivo. Puede ser aguda o crónica, y se manifiesta mediante hinchazón, enrojecimiento, calor, dolor y alteración en el funcionamiento del área u órgano afectados.
Cuando un tejido es dañado, por un golpe, por ejemplo, sus células liberan una
sustancia llamada histamina, que produce la dilatación de los vasos sanguíneos y, por consiguiente, el aporte de grandes cantidades de sangre hacia el área afectada.
Además, los tejidos inflamados liberan líquido intracelular, conocido como exudado inflamatorio, que puede acumularse infiltrando los tejidos y dificultando o imposibilitando el funcionamiento del órgano o de la región afectada.
Las inflamaciones pueden ser agudas o crónicas. Son agudas cuando presentan un período de hinchazón, dolor e incapacidad crecientes, que luego disminuyen en poco tiempo; se denominan crónicas cuando se prolongan durante meses o años, presentando períodos de mayor o menor intensidad, de acuerdo con factores como la humedad, la dieta o el estado del propio sistema inmunitario.
La gravedad, la duración y las características peculiares de cada respuesta
inflamatoria dependen del área afectada, de su estado previo y de la causa que la provoca.
LOS TEJIDOS
Las células que componen los organismos de animales y vegetales no son exactamente iguales. Esto se
debe a que ciertas células están especializadas en realizar determinadas funciones necesarias para la
vida del organismo por lo que se dividen cada tipo de trabajo entre sí.
El tejido se define como un grupo o capa de células que están especializadas en una misma función.
Por esta razón existen tantos tipos de tejidos como tipos de células especializadas puedan existir.
A continuación presentaremos los tipos de tejidos animal existentes.
Tejido Epiteliar
El tejido epiteliar se caracteriza por estar distribuido en capas continuas conformadas por células muy
pequeñas que se encuentran estrechamente unidas. El tejido epiteliar recubre toda la superficie del
cuerpo de los animales, también recubre los órganos o las cavidades internas del cuerpo. Las
principales funciones del tejido epiteliar son las de protección, absorción, secreción y sensación.
Podemos dividir el tejido epiteliar en los siguientes grupos:
Tejido Epiteliar Plano: Este tipo de tejido epiteliar está constituido por células de forma aplanada al
estilo de una losa o de una torta. El tejido epiteliar plano suele encontrarse en la superficie de la piel,
en las mucosas bucales, en el esófago y en la vagina. Al tejido que se encuentra conformado por varias
capas de células aplanadas superpuestas se le denomina epitelio plano estratificado.
Tejido Epiteliar Cuboide: Este tipo de tejido epiteliar suele estar constituido por células en forma de
cubo, como la que tiene un dado cualquiera. El tejido epiteliar cuboide se ubica en los túbulos renales.
Tejido Epiteliar Cilíndrico: Las células que conforman el tejido epiteliar cilíndrico son alargadas con
cierta forma de columna o tubo sólido, también presentan un núcleo que se encuentra en la base de la
célula. En la superficie de estas células se encuentran cierta cantidad de cilios que les permiten mover
sustancias en una dirección. El tejido epiteliar cilíndrico se encuentra localizado en el estómago, los
intestinos y el sistema respiratorio.
Tejido Epiteliar Sensitivo: El tejido epiteliar sensitivo se encuentra ubicado en regiones como las fosas
nasales. Su función es la de percibir estímulos.
Tejido Epiteliar Glandular: Las células que conforman el tejido epiteliar glandular pueden tener forma
cilíndrica o cuboide. Este tipo de tejido epiteliar tiene como función secretar sustancias como sudor,
leche o cerumen.
Tejido Conjuntivo o Conectivo
El tejido conjuntivo se encuentra presente en una extensa gama de estructuras de los organismos
animales. Este tipo de tejido puede ser localizado en la sangre, los huesos, cartílagos, tendones,
ligamentos y otros. Las funciones del tejido conjuntivo son diversas, entre estas está la de sostener y
unir las células del organismo. El tejido conjuntivo se divide en los siguientes grupos:
Tejido Conjuntivo Sanguíneo: El
IMÁGENES SUBLIMINALES EN LAS PUBLICACIONES DE LOS TESTIGOS DE JEHOVÁClaude LaCombe
Recuerdo perfectamente la primera vez que oí hablar de las imágenes subliminales de los Testigos de Jehová. Fue en los primeros años del foro de religión “Yahoo respuestas” (que, por cierto, desapareció definitivamente el 30 de junio de 2021). El tema del debate era el “arte religioso”. Todos compartíamos nuestros puntos de vista sobre cuadros como “La Mona Lisa” o el arte apocalíptico de los adventistas, cuando repentinamente uno de los participantes dijo que en las publicaciones de los Testigos de Jehová se ocultaban imágenes subliminales demoniacas.
Lo que pasó después se halla plasmado en la presente obra.
La Unidad Eudista de Espiritualidad se complace en poner a su disposición el siguiente Triduo Eudista, que tiene como propósito ofrecer tres breves meditaciones sobre Jesucristo Sumo y Eterno Sacerdote, el Sagrado Corazón de Jesús y el Inmaculado Corazón de María. En cada día encuentran una oración inicial, una meditación y una oración final.
2. SISTEMA NERVIOSO CENTRAL
El SNC está formado por el encéfalo y la médula espinal:
El encéfalo es la parte del sistema nervioso central contenida en el
cráneo y el cuál comprende el cerebro, el cerebelo y el tronco del
encéfalo o encefálico.
La médula espinal es la parte del sistema nervioso central situado en
el interior del canal vertebral y se conecta con el encéfalo a través
del agujero occipital del cráneo.
El SNC es también la fuente de nuestros pensamientos, emociones
y recuerdos. Tras integrar la información, a través de funciones
motoras que viajan por nervios del SNP ejecuta una respuesta
adecuada.
3.
4. BULBO RAQUÍDEO
El bulbo raquídeo es la parte del encéfalo que se une a la medula
espinal y constituye la parte inferior del tronco encefálico. En el
bulbo se localizan fascículos ascendentes y descendentes que
comunican la médula espinal con el .El bulbo también contiene
núcleos que reciben información sensorial o generan impulsos
motores relacionados con cinco pares craneales:
nervio vestíbulococlear (VIII)
nervio glosofaríngeo (IX)
nervio vago (X)
nervio espinal (XI) y nervio hipogloso (XII)
5. PROTUBERANCIA
La protuberancia está situada inmediatamente por encima del
bulbo y, al igual que el bulbo, está compuesta por núcleos y
fascículos ascendentes (sensoriales) y descendentes
(motores). Contiene núcleos que participan, junto al bulbo,
en la regulación de la respiración así como núcleos
relacionados con cuatro pares craneales: Nervio trigémino
(V), nervio motor ocular externo (VI), nervio facial (VII) y
nervio vestíbulococlear (VIII)
6. EL MESENCÉFALO
se extiende desde la protuberancia hasta el
diencéfalo, y al igual que el bulbo y la
protuberancia contiene núcleos y fascículos. En su
parte posterior y medial se sitúa el acueducto de
Silvio, un conducto que comunica el III y el IV
ventrículo y que contiene líquido cefaloraquídeo.
7. EL CEREBELO
El cerebelo ocupa la porción posteroinferior de la
cavidad craneal detrás del bulbo raquídeo y
protuberancia. Lo separan del cerebro la tienda del
cerebelo, una prolongación de la dura madre, la
cual proporciona sostén a la parte posterior del
cerebro..
8. EL DIENCÉFALO
El diencéfalo se sitúa entre el tronco del encéfalo y
el cerebro, y consta de dos partes principales: el
tálamo y el hipotálamo.
9. EL TÁLAMO
El tálamo consiste en dos masas simétricas de
sustancia gris organizadas en diversos núcleos,
con fascículos de sustancia blanca entre los
núcleos. Están situados a ambos lados del III
ventrículo. El tálamo es la principal estación para
los impulsos sensoriales.
10. EL HIPOTÁLAMO
El hipotálamo está situado en un plano inferior al
tálamo y consta de más de doce núcleos con
funciones distintas. El hipotálamo controla muchas
actividades corporales y es uno de los principales
reguladores de la homeostasis.
11. REFERENCIAS
Fuente: Thibodeau GA, Patton KT. Anatomía y
Fisiología 6a Ed. Madrid. Editorial Elsevier España,
S.A 2007.. p. 483