Este documento discute las relaciones históricas entre la ciencia y la religión. En particular, destaca cómo la religión se ha opuesto a los descubrimientos científicos a lo largo de la historia, encarcelando y ejecutando a científicos como Galileo y Giordano Bruno. Sin embargo, también explora posibles soluciones de compromiso como la separación entre la iglesia y el estado y la construcción de una sociedad más justa e igualitaria. Finalmente, advierte sobre los peligros del acomodacionismo y afirma que la ciencia