El documento discute el estado actual del arte. Señala que el arte ya no puede entenderse de manera aislada y que está influenciado por fuerzas externas como los cambios tecnológicos. También indica que el arte es más diverso que nunca, abarcando una variedad de géneros, medios y estilos, y que ha trascendido las limitaciones del tiempo y el espacio. Concluye que el arte moderno es complejo y dinámico, reflejando la complejidad del mundo.