1. Autoexamen para tumores mamarios
El cáncer de mama es más fácil de tratar cuanto más temprano se descubre. Es por esta
razón que muchos expertos recomiendan que todas las mujeres mayores de 20 años se
realicen mensualmente un autoexamen de mamas para buscar protuberancias nuevas u
otros cambios. Sin embargo, el autoexamen tiene limitaciones y NO es un substituto de
los exámenes realizados por el médico regularmente ni de las mamografías.
La persona debe hablar con el médico acerca de los pros y los contras de realizar el
autoexamen. Si la persona lleva a cabo exámenes mensuales, debe realizarlos de 3 a 5
días después del período menstrual, cuando las mamas están menos sensibles y con
menos protuberancias.
Primero, se acuesta boca arriba y se coloca la mano derecha por detrás de la cabeza.
Con los tres dedos del medio de la mano izquierda, se presiona suave pero con firmeza
haciendo movimientos pequeños para examinar toda la mama derecha. Luego, estando
sentada o de pie, se examina la axila (que se suele pasarse por alto) ya que el tejido
mamario se extiende hasta esta área. Se presionan suavemente los pezones, verificando
si hay secreciones. Se repite el proceso en la mama izquierda.
Se utiliza uno de los patrones del diagrama para constatar que está cubriendo todo el
tejido mamario. Se palpa en búsqueda de cualquier protuberancia o endurecimiento que
sobresalga o se sienta nuevo.
Aunque para algunas mujeres es más fácil realizarse el examen en la ducha, cuando la
piel está suave y mojada, es más probable examinar todo el tejido mamario estando
acostada.
Después, debe pararse frente a un espejo con los brazos a los lados, mirar las mamas
directamente y en el espejo para ver si hay cambios en la textura (piel que luce como
cáscara de naranja, hoyuelos, arrugas, abolladuras), forma y contorno de la piel o el
pezón hundido. Se hace lo mismo con los brazos elevados por encima de la cabeza.
La persona debe hablar de inmediato con el médico acerca de cualquier cambio que
encuentre. Ayuda el hecho de saber que todas las mujeres tienen algunas protuberancias.
Si la persona se realiza los exámenes mensualmente, es importante hacerlos en el mismo
momento en su ciclo mensual. Se debe saber además que el valor de los exámenes
mensuales es motivo de controversia.
Examen de mamas
Pasos para el examen
1. Con buena iluminación y frente a un espejo coloque sus manos detrás de la cabeza y
eleve los codos. Observe ambos senos, su forma, tamaño, si hay masas (bulto) o
depresiones (hundimientos), cambios en la textura y coloración de la piel y posición del
pezón.
2. Para examinar su mama derecha, coloque su mano derecha detrás de la cabeza elevando el
codo.
2. 3. Con su mano izquierda, con la yema de los dedos, presione suavemente con movimientos
circulares.
4. Continúe dando vuelta a la mama como las agujas del reloj. Palpe toda la superficie en
completando toda la mama, determine la presencia de masas o dolor.
5.Examine el pezón, siempre igual posición con su dedo pulgar e índice, presiónelo
suavemente, observe si hay salida de secreción o sangrado.
6. Ahora examine su mama izquierda, siguiendo los pasos anteriores. Examine la axila con la
yema de los dedos y movimientos circulares tratando de determinar la presencia de masas.
7. Para examinar su mama izquierda, coloque su mano izquierda detrás de la cabeza elevando
el codo, siga los pasos anteriores.
8. Acuéstese y coloque una almohada o un trapo grueso doblado, bajo su hombro derecho.
Para examinar su mama derecha, coloque su mano derecha detrás de la cabeza elevando el
codo.
9. Con la mano izquierda, con la yema de los dedos, presione suavemente con movimientos
circulares.
10. Continúe dando la vuelta a la mama. Palpe toda la superficie en busca de una masa o zona
hundida.
11. Para examinar su mama izquierda, coloque su mano izquierda detrás de la cabeza
elevando el codo, siga los pasos anteriores.
Recomendaciones:
• Realice el examen una vez al mes.
• Una semana después del inicio de su mentruación, si no menstrúa (menopausia), elija
un día fijo de cada mes para realizárselo.
• Este examen le permite conocerse mejor, detectar cualquier cambio.
• Si encuentra cambios en la forma, tamaño de las mamas, masas, hundimientos, pezón
hundido o torcido, salida de sangre o alguna secreción del pezón, consulte a su médico
inmediatamente.
Es muy importante que las personas se hagan el examen y mamografías, si están dentro
de las siguientes categorías:
• Mujeres mayores de 50 años
• Mujeres mayores de 40 cuyas madres o hermanas han tenido cáncer de los pechos.
• Mujeres que no han tenido hijos o que empiezan su familia después de los 30 años.
• Mujeres que han tenido cáncer en un pecho.
• Mujeres que han aumentado su peso
El examen de mamas en tu revisión ginecológica
Generalmente, será tu ginecólogo quien se hará cargo de tu examen de mamas.
Entre los 40 y 50 años es cuando más cuidado debes tener y no debes saltarte ninguna
3. revisión, ya que es en esta franja de edad cuando más posibilidades se tiene de que
aparezca algún bulto sospechoso y por eso es tan importante su seguimiento anual.
Examen manual y visual
Tu médico te pedirá que te tumbes en la camilla y que pongas en brazo de la mama
que va a revisar detrás de la nuca. Primero realizará una inspección visual,
comprobando que no existe ninguna anomalía que se aprecia a la vista, como manchas
en la piel, bultos que deformen la mama, etc.
Después realizará un examen palmando la mama. Normalmente, se divide
(imaginariamente) el pecho en cuatro partes y presionará con los dedos estas secciones
para comprobar que no tienes ningún bulto.
Pruebas suplementarias para la mama
Este examen mamario manual es lo primero que realizará el médico, pero es muy
probable que también te pida alguna mamografía o, si tus mamas son muy fibrosas,
puede ser que te recomiende una ecografía mamaria.
¿Cuándo un bulto es benigno o maligno?
Generalmente, los quistes benignos (que son los más frecuentes) tienen los bordes
definidos, son firmes y aparecen en solitario. En cambio, los bultos malignos tienen los
bordes imprecisos, además de que son duros al tacto.
Una de las buenas costumbres es autoexplorarse mensualmente tus mamas. Si estás
decidida a ello, debes de saber que, la mejor época es entre los 5 y 10 días después de
haber tenido la regla, pues es en esos días cuando la mama está más blanda y te será
menos difícil hacerlo.
Exploración de mamas y cirugía de pecho
Generalmente, no existe una incompatibilidad entre la cirugía de pechos y la
exploración de la mama, pues la prótesis anatómica se suele colocar por detrás del
músculo pectoral, a la cual no se accede en la palpación.
Menopausia y embarazo
El tener una edad más avanzada o el hecho de estar embarazada no es excusa para
no realizarse un autoexamen de mamas. En estos casos, es recomendable hacerse el
examen una vez por mes y en las mismas fechas. Por ejemplo, puedes tomar la
determinación de autoexaminarte el día 1 de cada mes. Es recomendable que tomes esta
costumbre, pues como sabéis, un diagnóstico y tratamiento precoz es fundamental
para evitar males mayores.
EXAMEN DE LAS MAMAS
4. El examen de las mamas es muy importante en las mujeres, especialmente para detectar
precozmente la presencia de un cáncer. Se efectúa mediante la inspección y la
palpación. El examen debe ser prolijo, respetando siempre el pudor de la paciente.
En la mama existe tejido glandular y fibroso, grasa subcutánea y retromamaria. El tejido
glandular se organiza en lóbulos y lobulillos que drenan a los conductos galactóforos,
los que a su vez desembocan en el pezón. Con la edad el componente glandular se
atrofia y es reemplazado por grasa. Para localizar las lesiones en las mamas, se divide
virtualmente en cuatro cuadrantes. Casi todo el tejido glandular se encuentra en el
cuadrante superior externo, el cual se prolonga hacia la axila formando una cola. El
drenaje linfático se efectúa principalmente hacia la axila, pero también a regiones
claviculares y estructuras profundas del tórax.
Inspección
En la inspección se observan ambas mamas tratando de descubrir asimetrías,
abultamientos, deformaciones, retracciones, etc. El examen se efectúa estando la
paciente acostada, sentada o de pié (hay que recordar que es una parte más del examen
físico). Para distinguir asimetrías entre una y otra mama puede ser conveniente pedir a
la persona que se siente y que ponga sus brazos a los lados en forma de jarra y empuje
con sus manos contra las caderas. Después, se examina solicitándole que levante los
brazos hacia arriba.
En las aréolas mamarias es posible distinguir unas prominencias pequeñas que
corresponden a glándulas sebáceas (tubérculos de Montgomery) y algunos folículos
pilosos.
Algunas mujeres presentan más debajo de las mamas, siguiendo la dirección de una
supuesta línea mamaria embrionaria, unas formaciones solevantadas que corresponden a
pezones, y eventualmente, mamas supernumerarias (recordar que esta condición es
normal en animales mamíferos).
Si el pezón de una mama está aplanado o retraído (umbilicado) y esto ha ocurrido en el
último tiempo, conviene tener presente la posibilidad de una lesión cancerosa que haya
retraído el pezón. Si esta condición es antigua, probablemente no indique una condición
de cuidado como la anterior.
Palpación
La palpación se efectúa habitualmente estando la paciente acostada de espalda. Se le
pide que levante el brazo del lado que se va a examinar y coloque la mano detrás de la
cabeza. Toda la glándula debe ser examinada, incluyendo los cuatro cuadrantes, el
tejido bajo del pezón y la cola de las mamas. Además, se deben examinar las axilas.
El examen se efectúa presionando con los dedos contra la pared torácica. El recorrido
puede ser en forma radial (desde el pezón a la periferia hasta completar todo el círculo)
o por cuadrantes.
Si se tiene la sensación de palpar un nódulo, es necesario precisar:
5. • la ubicación
• el tamaño
• la forma y si se logra delimitar con facilidad (bordes)
• la consistencia
• si es sensible
• si es posible desplazar o está adherido a los tejidos vecinos.
• si la piel está comprometida (ej: enrojecida o con aspecto de “piel de naranja”)
Al tener la sensación de palpar un nódulo puede ser de ayuda palpar a continuación con
las dos manos, para precisar mejor las características de la lesión.
Las mamas grandes son más difíciles de examinar y existe mayor riesgo que no sea
posible palpar algunos nódulos.
En mujeres en edad fértil, es frecuente que en el período justo antes de su menstruación
las mamas aumenten un poco de volumen, se hagan más sensibles y se palpen
numerosos nodulitos del tamaño de granos de arroz. que no tienen mayor cuidado.
Las mamografías y ecografías complementan el examen de las mamas para precisar
mejor la naturaleza de lesiones que se palpan o descubrir otras que no fue posible
detectar.
Indudablemente la palpación y la inspección son acciones conjuntas y mediante ellas se
va recogiendo información.
Factores de riesgo para desarrollar cáncer de mama:
• tener familiares cercanos que hayan tenido cáncer de mama
• haber tenido cáncer de mama
• la edad (entre 40 años y por lo menos hasta los 65 a 70 años, dependiendo también de
los antecedentes familiares)
• una menarquia precoz (antes de los 12 años)
• el primer parto después de los 30 años
• no haber tenido hijos
• una menopausia después de los 55 años
Es conveniente que las mujeres tengan el hábito de autoexaminarse (ojalá una vez al
mes). Para esto levantan el brazo y se examinan la mama de ese lado con la otra mano.
Una buena oportunidad es hacerlo al ducharse o al acostarse. Si están acostumbradas a
examinarse, notarán precozmente una lesión que esté apareciendo.
Algunas alteraciones:
Entre las lesiones palpables destacan:
6. • nódulos que corresponden a una enfermedad fibroquística de las mamas
• lesiones de bordes nítidos que corresponden a fibroadenomas (son más frecuentes en
mujeres jóvenes)
• lesiones que corresponden a un cáncer de mamas.
Si se palpa algo anormal, como un nódulo, va a ser necesario efectuar un estudio de
imágenes (una mamografía, que eventualmente se complementa con una ecografía
para distinguir entre nódulos sólidos y quistes).
Salida de líquido por un pezón:
Puede salir en forma espontánea o al exprimir la glándula o el pezón mismo.
Este líquido puede ser:
• galactorrea: es la salida de leche en condiciones en que la mujer no está lactando
después de un embarazo. Entre las principales causas destacan trastornos
endocrinológicos y ciertos medicamentos.
• ser una secreción serosa, hemática o serohemática: en estos casos cabe plantear la
posibilidad de una lesión intraductal (habrá que identificar por cuál conducto
galactóforo sale el líquido).
• secreción purulenta en relación a un proceso infeccioso
Examen de las axilas:
La palpación de las axilas tiene especial importancia por la posibilidad de encontrar
ganglios comprometidos. Separando un poco el brazo, el examinador palpa la axila
presionando contra la pared torácica. Con su mano derecha, palpa la axila izquierda, y
con la mano izquierda, la axila derecha.
Las mamas en el hombre:
• ginecomastia: es el desarrollo de las mamas en el hombre, más allá de lo normal. Es
frecuente de observar en algunos jóvenes en la edad de la pubertad. En los adultos se
observa ocasionalmente por trastornos hormonales, por la ingesta de algunos
medicamentos o en enfermedades como la cirrosis hepática.
• los hombres también pueden tener un cáncer de mamas, pero es poco frecuente.
Glosario: galactorrea, ginecomastia, enfermedad fibroquística de las mamas,
fibroadenoma, cáncer mamario, papiloma intraductal, secreción serohemática.