La autoexploración mamaria es importante porque el 95% de los casos de cáncer de mama pueden curarse si se detectan en etapas tempranas. La autoexploración debe hacerse cada mes familiarizándose con el aspecto y tacto normal de los senos para notar cualquier cambio como la aparición de un bulto, secreciones anormales, inflamación o cambios en los pezones.