El documento describe varias obras arquitectónicas y elementos decorativos del periodo bizantino, con especial atención a la basílica de Santa Sofía de Constantinopla y a iglesias de Rávena como San Vital y San Apolinar Nuevo, que presentan plantas centralizadas y decoración con mosaicos. También se mencionan otras iglesias como San Marcos de Venecia y objetos como la cátedra de Maximiano y dípticos con elaborada decoración.