Declaracion jurada de la ex vicepresidenta Cristina Fernández de Kirchner
Carencia de etica
1. Carencia de ética
Juan Manuel Arias Castro
Cuando renunció el tirano y lo sucedió la actual Presidente Jeanine Añez Chávez, la
ciudadanía y la gran mayoría de este país respiró aliviado y todos recuperamos la esperanza.
No pasaron 8 meses de este gobierno y se puede concluir de manera inequívoca que los
políticos bolivianos (oficialistas y oposición) a la cabeza de la Presidente del Estado, están
muy lejanos de la práctica de la ética en sus funciones públicas. Todos ellos, carecen de
honestidad, integridad, responsabilidad y Justicia.
Veamos, la ética es la parte de la filosofía que estudia los valores de la conducta humana, lo
que es bueno y lo que es malo, lo que es correcto o lo que es equivocado y los motivos que
llevan a una acción humana a ser moral. Cuando la ética es comprendida en su sentido real,
las leyes y directrices refuerzan la actitud correcta de los dirigentes o de los dirigidos. La ética
acompañada del voluntarismo y compromiso, previene y detecta anticipadamente las
violaciones a las leyes, reduce los castigos y multas, pero fundamentalmente asegura altos
niveles de conducta moral. La ética se puede convertir en la más importante defensa contra
las actividades ilegales.
La disciplina en el lugar de trabajo es fruto de un entrenamiento y capacitación que moldea,
corrige, refuerza y perfecciona el comportamiento. La autodisciplina, se consigue cuando
cada miembro del equipo o sociedad, conoce las reglas, comprende su objetivo y entiende
perfectamente que vale la pena cumplirlas. Se facilita esta disciplina, cuando existen
supervisores y fiscales hábiles que, en vez de castigar, enseñan y educan, señalando con
claridad, cuáles son los límites que tenemos dentro de una sociedad, que persigue la sana
convivencia entre sus miembros.
¿De qué sirve el Ministerio de Transparencia? Si éste ni siquiera se asoma a la ventana de la
ética. Sin duda esta repartición podría en teoría, comandar la implementación de programas
educacionales, definiendo objetivos, implementando códigos, comités, contratando
profesionales especializados y hacer todo lo que promueva la construcción de un clima de
ética.
Pero andamos muy mal en este asunto. Está mal que la Presidente, habiendo recibido el
mandato presidencial para pacificar y convocar a elecciones, sea candidata. Está mal que la
Presidente esté rodeada de políticos que están denunciados por acciones ilegales, que no
encare con firmeza la investigación del fraude electoral impulsado por el gobierno del Tirano.
Está mal que la Presidente haya elegido al Presidente del Órgano Electoral, Salvador Romero,
quien de manera sospechosa ha impulsado y está defendiendo la celebración de las
elecciones, cuando las condiciones sanitarias por causa de la pandemia no están dadas y
demuestra su cercanía al Movimiento al Socialismo. Está mal que la Presidente mantenga al
frente al Fiscal General de la Nación Juan Lanchipa, hombre de confianza del anterior
2. régimen, que hoy hace sus mayores esfuerzos para que las denuncias contra de Evo Morales
Ayma sean boicoteadas.
Pensamos en que iban a ser diferentes, pero como siempre la falta de ética, el oportunismo y
el prebendalismo de la Presidente y sus políticos, nos vuelve a la triste realidad. Los políticos
se esmeran en hacernos infelices.
Escrito el 01 de julio de 2020