La carta propone no retirar las horas dedicadas al arte en la institución educativa, ya que el arte ayuda a los estudiantes a ampliar su vocabulario, aprender a interpretar y expresar habilidades que les servirán para el resto de su vida. Además, el arte les puede enseñar actividades para ocupar su tiempo libre y evitar caer en problemas como la drogadicción o las pandillas que son comunes en la zona. La carta también sugiere dedicar tiempo a otras materias como matemáticas y ciencias, pero sin descuidar el arte,