El documento discute la importancia de las tecnologías de la información y la comunicación (TIC) para el desarrollo de Ecuador. Resalta que a pesar de que Ecuador declaró una agenda nacional de conectividad en 2002, se ha hecho poco progreso y el país está rezagado en comparación con otros en la región. Argumenta que el gobierno ecuatoriano debe invertir más en las TIC, especialmente en áreas rurales y para los más marginados, para mejorar la calidad de vida y promover el desarrollo integral.