Chicago experimentó un rápido crecimiento poblacional en el siglo XIX debido a la inmigración y el desarrollo del comercio de granos. Se convirtió en la segunda ciudad más grande del país en 1870, aunque gran parte de ella fue destruida en el Gran Incendio de 1871. La Exposición Mundial Colombina de 1893 impulsó la construcción de rascacielos y estableció a Chicago como líder en arquitectura moderna. Después de la Segunda Guerra Mundial, proyectos como el Promontory Apartments