Las nuevas tecnologías, incluidos ordenadores, Internet, tablets y smartphones, se han incorporado a las aulas para mejorar la educación. Las redes sociales pueden usarse para fomentar el diálogo entre profesores, padres y alumnos, y para que los profesores compartan recursos adicionales con los estudiantes. Aunque deben usarse con cautela en las escuelas, las universidades utilizan ampliamente las redes sociales como Facebook y Twitter para comunicarse con los estudiantes y atraer nuevos alumnos.