La Constitución de 1886 estableció la definición de la propiedad por su función social, legalizó el derecho de huelga excepto en servicios públicos, y estableció la mayoría de edad a los 21 años. Fue reformada para suprimir las condiciones que permitieron la exclusión de la oposición entre 1886-1909. Soportó 23 presidentes y 70 reformas antes de ser reemplazada.