La criminología se originó a partir de las palabras latinas y griegas para "crimen" y "tratado". Rafael Garófalo acuñó el término y junto con Cesar Lombroso y Enrico Ferri establecieron los fundamentos de la criminología como una ciencia. La criminología se considera una ciencia porque tiene un objeto de estudio bien definido, el método de investigación y ordena los conocimientos de manera sistemática.