Los cataplasmas son tratamientos tópicos compuestos por elementos vegetales, tubérculos u hortalizas que se aplican directamente sobre la piel para calmar dolencias y sanar afecciones. Pueden usarse para reducir inflamaciones, aliviar dolores musculares, estimular la circulación y acelerar la cicatrización. Sus beneficios incluyen calmar dolores, actuar como antiinflamatorios, acelerar la cicatrización de heridas, fomentar la regeneración celular y en algunos casos funcionar como antibacteriales.