2. El desarrollo embrionario es el período desde la fecundación hasta el nacimiento del nuevo ser, aunque no
exista fecundación, como sucede en los casos de partenogénesis.
Consta de las fases de: fecundación, segmentación, gastrulación y organogénesis.
•Fecundación: Es la unión de las dos células reproductoras, de sexos contrarios, los gametos, hasta
que se funden en uno solo los respectivos núcleos y parte del citoplasma. Es un proceso complicado
que conduce a la formación de una célula, el cigoto o huevo y que comienza con la penetración de un
espermatozoide en un óvulo. En la fecundación no participa todo el espermatozoide, sino sólo el
núcleo y el centrosoma; ambos corpúsculos se dirigen al núcleo femenino y el primero acaba por
fusionarse con él, mientras el centrosoma se divide en dos, originándose las esferas atractivas, que se
colocan en los polos del cigoto para la primera división del desarrollo embrionario, que comienza con
la segmentación.
•Segmentación: Es la repetida división por mitosis del óvulo fecundado hasta llegar al estado de
blástula, dando lugar a numerosos blastómeros. Puede ser, según la participación de todo el vitelo o la
distinción en formativo y nutritivo, total o parcial; la primera puede ser igual o desigual, y la segunda
discoidal o superficial. En esta fase de distinguen las siguientes formaciones:
•Blastómeros: Son cada una de las células en que se divide el huevo o cigoto para dar lugar a las primeras
fases embrionarias.
•Mórula: Es el estado temprano del desarrollo de un huevo fecundado, durante el período de segmentación, en
el que el conjunto de células, en número reducido todavía, se semeja a una mora. Los blastómeros emigran
hacia la periferia para formar una única capa.
3. •Blástula: Es una de las primeras fases del desarrollo embrionario de los animales metazoos; la
que sique a la mórula. Los blastómeros se disponen en una capa celular continua que circunda
una cavidad interior, el blastocele, también llamada cavidad de segmentación. Sus paredes luego
estarán cerradas por el blastodermo, que son los blastómeros que, dispuestos en una sola capa,
forman la pared de la blástula y maracan el final de la segmentación. El blastocele está lleno de un
líquido, el blastoquilo.
La estructura de la blástula Es pues mododérmica, y su forma, muy variada, depende de la
cantidad de vitelo contenida en el huevo. Por un proceso de invaginación se transforma en
gástrula. El vitelo es el protoplasma del óvelo de los animales y, por extensión, del óvulo
fecundado. Se distingue un vitelo germinativo, también llamado formativo o activo, que es el
que experimenta la división se segmentación embrionaria, y un vitelo nutritivo o pasivo,
constituido por substancias de reserva, para nutrir al embrión en las primeras fases de su
desarrollo.
En los óvulos de los mamíferos vivíparos, como en los de numerosos invertebrados, predomina el
vitelo germinativo en los óvulos alecitos y heterolecitos; en los de los artrópodos es variable la
cantidad de vitelo nutritivo en los óvulos centrolecitos; mientras que éste ocupa la casi totalidad
de la yema en los óvulos telolecitos de aves y reptiles. Algunos biólogos dan el nombre de vitelo al
nutritivo o deutoplasma.
4. •Gastrulación: Es el proceso de formación de la gástrula. Comprende la invaginación o embolia,
que es la forma ordinaria de la grastrulación de la blástula, consistente en que una parte de la
misma se introduce en la otra, como sucede cuando se comprime una pelota de goma pinchada
hasta formar con ella un casquete hemisférico: la parte que queda fuera viene a ser el ectodermo de
la gástrula, y la parte invaginada el endodermo.
La gástrula es una fase del desarrollo embrionario de los metazoos, que sucede a la de blástula, y
que produce en general por invaginación de ésta, con formación de un saco de pared doble, cuya
cavidad, el intestino primitivo, arquenterón, celenterón o gastrocele, comunica con el exterior por
un orificio, el blastoporo, que actúa de boca y ano. Las dos capas parietales o blastodérmicas son el
extodermo, la externa y el endodermo, la interna, aquél procedente de las células del polo animal de
la blástula y éste de las del polo vegetativo.
Algunos animales, como los celentéreos, terminan su desarrollo en esta fase, carecen, por tanto, de
cavidad general o celoma, que es una cavidad o cavidades mesodérmicas, y son los acelomados
diploblásticos, con sólo dos capas blastodérmicas.
5. •En otros aparece una tercera capa o mesodermo, producida por el ectodermo y el endodermo, en los metazoos
triploblásticos, y en la mayoría de éstos, desde los briozoos a los cordados, después de haber aparecido unos
esbozos mesodérmicos, se forma una cavidad general o celoma, después de haberse escindido en dos capas, la
esplácnica, que junto con el endodermo de los metazoarios superiores forma el tubo digestivo, y la somática,
que, unida al ectodermo, constituye la pared del cuerpo, dejando entre ambas dicha cavidad, el celoma. En los
anélidos, equinodermos y cordados, el celoma es la cavidad donde se halla el tubo digestivo, mientras que en
los artrópodos y moluscos se halla reducido a las cavidades de las gónadas y del aparato excretor.
A partir del ectodermo se forman la epidermis y formaciones tegumentarias, como pelos, plumas, glándulas
sebáceas y glándulas sudoríparas, recubrimiento de aberturas, como boca, nariz y ano, los dos extremos del
tubo digestivo, el sistema nervioso central y nervios periféricos, los tegumentos (que son la epidermis y sus
derivados), el sistema nervioso, determinadas partes de los órganos sensoriales y las porciones extremas del
tubo digestivo; el mesodermo da origen al notocordio o cuerda dorsal y a los somites y éstos, a su vez, originan
la dermis, los tejidos muscular estriado, óseo, cartilaginoso, conjuntivo y adiposo, los aparatos circulatorio, el
excretor y gonadal y las pleuras; el endodermo origina el tubo digestivo, excepto sus extremos, con sus
glándulas derivadas o las glándulas anejas, y el revestimiento interior de los pulmones. El blastoporo gastrular
se convierte en ano en los celomados llamados deuteróstomos, equinodermos y cordados; y pasa a ser boca en
los próstomos, que son todos los demás filos.
6. En el extremo opuesto al blastoporo, según el grupo zoológico al que pertenezca, aparece
otra abertura, que actuará como boca en los deuteróstomos y como boca en los próstomos.
Organogénesis: Es la formación de los esbozos organógenos y diferenciación de los mismos.
Terminado el desarrollo embrionario, el animal surge al exterior, bien por la eclosión del
huevo, como en los reptiles y aves, bien en el acto del parto, como en la inmensa mayoría de
los mamíferos. En numerosos peces y anfibios, como en muchos invertebrados, parte del
desarrollo embrionario se realiza en la vida libre, y se continua insensiblemente, con las
metamorfosis que conducen al estado adulto.
Hay dos hechos embriogénicos de gran interés:
Que la segmentación del huevo y procesos posteriores varían según la constitución de aquél.
Que en los estados embrionarios de grupos de origen común, se acentúa la semejanza de los
mismos en relación con los que ofrecen los adultos; así por ejemplo, todos los embriones de
los vertebrados presentan branquias, que desaparecen durante el proceso embrionario,
excepto en los peces y en algunos anfibios.
7. Desarrollo Embrionario Humano:
El desarrollo embrionario es el periodo que se produce entre la fecundación y el parto.
Dura normalmente nueve meses, y en cada uno de los trimestres en los que se divide se
desarrollan diferentes partes del cuerpo.
•Primer trimestre
Se considera la tercera semana de embarazo como la primera efectiva, pues en las dos
primeras semanas se produce la ovulación y desprendimiento del óvulo que será fecundado.
Esta fecundación tiene lugar ya en la tercera semana: el óvulo y el espermatozoide se unen
formando el cigoto mientras bajan a través de una de las trompas de Falopio.
El cigoto continúa dividiéndose formando las nuevas células, a las que pronto les aparecerá un
recubrimiento, denominando a todo el conjunto como blastocisto. La división de células
continúa ocurriendo mientras tanto, hasta que en un cierto punto del desarrollo este blastocito
se transforma en embrión.
En la cuarta semana, el embrión, que ya mide cerca de cinco milímetros, se introduce en la
pared uterina y comienza a nutrirse a través de esta. En la quinta semana ya comienza a
desarrollar los principales sistemas del embrión como el cerebro, la médula espinal, el corazón
o el tracto gastrointestinal.
8. Las células comienzan a adquirir funciones específicas durante esta semana, y entre las que se
desarrollan se pueden encontrar las células sanguíneas, las del riñón y las neuronas. Esta quinta
semana es una de las que cuenta con mayores riesgos para el correcto desarrollo del bebé, pues hay
un riesgo mayor de que se puedan producir anomalías genéticas por la ingesta de medicamentos,
alcohol, drogas o por infecciones como la rubeola.
Durante la sexta y séptima semana se continúan desarrollando rasgos que permiten identificar
partes del embrión como los ojos, los oídos o el corazón, así como las manos y los pies durante
la octava semana. El cerebro del embrión también continúa su desarrollo y se forma el tejido de
los distintos huesos. En la novena semana también se pueden empezar a ver los brazos, los codos,
y comienzan a crecer sus órganos esenciales.
A partir de la décima semana ya no se considera embrión, sino feto. El feto ya mide cerca de 7
centímetros. Durante esta semana también se comienzan a ver los párpados, las orejas y la cara, y
la placenta comienza a nutrir al feto a través del cordón umbilical.
9. •Segundo trimestre
Al principio de este trimestre lo más apreciable del feto es su cabeza, que ocupa cerca de la
mitad de su tamaño total. Se continúan desarrollando durante estas semanas aspectos como las
uñas o los genitales, y la cara ya está formada. Los párpados cierran los ojos del bebé, y hasta la
28 semana permanecerán así.
El feto empieza a hacer sus primeros movimientos entre las semanas 15 y 18. A estas alturas, el
feto ya tiene una medida cercana a los 18 centímetros y pesa cerca de 200 gramos. Los huesos
se vuelven más duros y comienza a aparecer el primer pelo, denominado lanugo. Entre
las semanas 19 y 21 el bebé comienza a oír, y además se mueve de forma más activa, de modo
que la madre puede llegar a sentir sus movimientos.
En la semana 22 el lanugo ya se ha extendido a todo el cuerpo del feto, apareciendo también las
cejas y las pestañas. El bebé también hace su primera deposición, llamada meconio, la cual
expulsa por el tracto intestinal. El movimiento también sigue siendo activo, desarrollando
ahora los músculos y pudiendo escuchar los latidos de su corazón.
Al final de esta etapa, se desarrollan las vías respiratorias del bebé y la médula ósea comienza a
producir células sanguíneas. El feto también comienza a almacenar grasa.
10. •Tercer trimestre
El bebé comienza a terminar de desarrollar diferentes partes de su cuerpo: todo lo relacionado con los ojos y las huellas de
los pies ya son bien perceptibles. Los pulmones también alcanzan un alto grado de funcionamiento, aunque no el necesario
para sobrevivir fuera del útero. El feto además es capaz de oír ruidos fuertes del exterior.
Entre las semanas 27 y 30 el bebé vuelve a abrir los párpados, y el sistema nervioso se desarrolla mucho, sobre todo en el
cerebro y para las órdenes de diferentes funciones del cuerpo. El sistema respiratorio comienza a producir agente
tensioactivo, que hace que los alveolos puedan llenarse de aire cuando nazca. El tamaño del feto para la semana 28 ya
ocupa la mayor parte del útero, y se suele posicionar de forma invertida, de forma que tenga más facilidad para mover las
rodillas y los pies.
A partir de la semana 31 el bebé comienza a retener hierro, calcio y fósforo en su organismo, lo que impulsa aún más el
desarrollo del cuerpo. Los huesos ya están completamente formados, aunque aún blandos. El sistema respiratorio también
continúa su desarrollo, pero los pulmones aún no son lo suficientemente maduros.
Para la semana 35 el bebé ya pesa cerca de 2,5 kilos, y su corazón y vasos sanguíneos ya se han formado por completo,
como también lo están los músculos y los huesos. El bebé además adquiere patrones de sueño.
En las últimas semanas, entre la 38 y la 40, desaparece el lanugo excepto de hombros y brazos, siendo el cabello
desarrollado en la cabeza además más grueso y resistente. Aparecen también los brotes mamarios.
A partir de la semana 40 se considera que el embrión está desarrollado por completo y listo para nacer, variando la fecha en
que ocurre.