El documento proporciona orientaciones para el diseño e implementación de programas de educación sexual dirigidos a familias. Sugiere considerar la posición institucional, conformar un equipo capacitado, y diseñar la intervención teniendo en cuenta diferentes formas de llegar a las familias. También recomienda abordar temas como la sexualidad, el género, los mitos y creencias, así como tratar inquietudes comunes de los padres. Propone realizar talleres con padres, madres y niños utilizando diversas técnicas participativas.