El Neoclasicismo surgió en Francia en el siglo XVII y se extendió por Europa. Se caracterizó por un retorno a las normas literarias clásicas griegas y romanas, con énfasis en lo racional. Algunos de sus principales representantes fueron Molière, Jean de la Fontaine y Daniel Defoe, quienes se destacaron en los géneros de la comedia, la fábula y la narrativa, respectivamente.