La estimulación temprana en los primeros años de vida es fundamental para el desarrollo integral del niño. Existen diferentes tipos de estimulación como la cognitiva, motriz, del lenguaje, social y emocional. Estimular adecuadamente al bebé ayuda a su cerebro a desarrollarse y a transitar saludablemente la primera infancia. La estimulación temprana debe incorporar el afecto y estar acorde a la respuesta del niño para maximizar sus beneficios como mejor desarrollo, confianza, atención y aprendizaje.