El documento discute la contribución de la educación física a la sociedad y la necesidad de adoptar un enfoque basado en la diversidad de cuerpos y movimientos. Argumenta que la educación física debe intervenir desde esta diversidad en lugar de promover un único "cuerpo molde", reconociendo que la diferencia no es sinónimo de desigualdad. También sugiere que el estudio de la educación física especial puede brindar información valiosa sobre cómo abordar la diversidad de cuerpos en todos los contextos escolares.