Varias familias desplazadas por la violencia llegaron a una gran ciudad y se ubicaron en las partes altas de una montaña sin plan de ordenamiento territorial, con suelos húmedos e inseguros expuestos a crecientes en épocas de invierno. Construyeron ranchos vulnerables a enfermedades, y el gobierno presta poca atención a su situación precaria en un lugar peligroso.