El documento presenta tres párrafos sobre el debate en torno al papel de Internet. En el primer párrafo, el autor está de acuerdo con que Internet es importante pero no cree que salve al cine español. En el segundo párrafo, argumenta que cada nuevo medio como la imprenta o la televisión no ha acabado con los anteriores. En el tercer párrafo, concluye que Internet no salvará ni destruirá al cine español, sino que dependerá de su calidad.