La filosofía de Fichte buscó terminar de construir la filosofía kantiana y desarrollar una teoría de la ciencia. Fichte propuso que el yo puro o yo absoluto, una actividad pura que se autocrea, es el fundamento incondicionado de toda conciencia y crea toda la realidad, estableciendo así un idealismo basado en la intuición intelectual y los principios del yo absoluto.