El documento describe las funciones del tutor reguladas por decretos y normativas de Castilla-La Mancha. Entre las funciones principales se encuentran desarrollar programas para mejorar la convivencia, facilitar la comunicación entre la escuela y las familias, coordinar al profesorado de un grupo, y realizar al menos tres reuniones con las familias por curso. También se especifican funciones como informar a los estudiantes sobre normas y evaluaciones, controlar la asistencia, y orientar en técnicas de estudio.