Venezuela está experimentando la peor crisis económica de su historia, con una caída del PIB de casi el 40% en los últimos 4 años y altos niveles de inflación e hiperinflación. La economía se ha quedado sin reservas internacionales ni mercado cambiario funcional, lo que ha llevado al colapso del sector productivo y a altos niveles de pobreza. A menos que se implemente un programa económico integral para abordar los desequilibrios macroeconómicos, la economía venezolana continuará en declive.