El documento describe dos tipos de empresas en términos de su enfoque hacia el rol de Community Manager. Las "Empresas Comprometidas" integran plenamente al Community Manager en su equipo y estrategia digital, reconociendo las contribuciones que puede hacer en términos de empatía, información, contactos, contenidos, visibilidad y feedback. Por otro lado, las "Empresas Implicadas" ven las redes sociales como un requisito menor y no valoran adecuadamente el trabajo del Community Manager.