La empresa española Inés Rosales desea internacionalizar su producto estrella, la torta de aceite, en el mercado peruano. Su objetivo es vender 250,000 unidades en Lima y Callao en el primer año apuntando a los segmentos socioeconómicos A, B y C. Para ello, utilizará una estrategia de diferenciación por calidad debido a los ingredientes naturales y artesanales del producto. La empresa proyecta obtener una utilidad de €47,500 en el primer año de ventas en Perú.