La hiperinflación se define como una inflación mensual superior al 50%. En Perú durante el gobierno de Alan García, la inflación aumentó desde más de 100% en 1990 hasta 7600% ese mismo año. Esto provocó desabastecimiento y largas colas para conseguir productos básicos. El gobierno agravó la situación mediante el financiamiento del gasto con emisión de dinero sin control, lo que llevó al PBI peruano a contraerse casi 30% y reducir el ingreso per cápita a los niveles de 1960.