1. INTELIGENCIA EMOCIONAL
Comencemos definiendo el concepto de inteligencia, la cual se define como la
capacidad de entender, asimilar, elaborar información y utilizarla para resolver
problemas. Por su parte fisiológicamente, las emociones organizan rápidamente
las respuestas de distintos sistemas biológicos, incluidas las expresiones faciales,
los músculos, la voz, entre otros, para un comportamiento efectivo.
Se puede decir que la inteligencia emocional es la capacidad que tiene la persona
para manejar sus emociones no solo en el campo laboral, si no en cualquier
situación en la cual necesite de esta.
La inteligencia emocional nos permite tomar conciencia de nuestras emociones y
actitudes, comprender los sentimientos de los demás, tolerar las presiones y
frustraciones que soportamos en el trabajo y en la vida diaria, realzar nuestra
capacidad de trabajar en equipo y adoptar una actitud empática y social, que nos
brindará mayores posibilidades de desarrollo personal.
Realizando un buen manejo de esta trae consigo muchas ventajas, entre las
cuales podemos mencionar esta la capacidad de poder auto-motivarnos, regular
nuestros estados de ánimo, evitar en un alto porcentaje que los sentimientos
negativos influyan en nuestro desempeño laboral, puede lograr aumentar la
empatía con nuestros clientes, compañeros, familiares y prójimo en general.
Se puede considerar la Inteligencia Emocional como una habilidad del ser
humano, ya que no es fácil en un momento determinado, bien sea de angustia, ira,
depresión, tristeza, euforia, etc. Actuar una manera correcta, es entonces cuando
debemos auto-controlarnos colocando en práctica la inteligencia emocional.
Son muchos los estudios, investigaciones que han realizado a este tema por
ejemplo el libro “Emotional Intelligence” del autor Daniel Goleman el cual detalla
que la inteligencia emocional se puede organizar en base a cinco capacidades:
conocer las emociones y sentimientos propios, manejarlos, reconocerlos, crear la
propia motivación, y gestionar las relaciones.
Además explica también que esta puede dividirse en dos áreas:

2. Inteligencia intrapersonal: Capacidad de formar un modelo realista y preciso de
uno mismo, teniendo acceso a los propios sentimientos, y usarlos como guías en
la conducta.
Inteligencia interpersonal: Capacidad de comprender a los demás; qué los motiva,
cómo operan, cómo relacionarse adecuadamente. Capacidad de reconocer y
reaccionar ante el humor, el temperamento y las emociones de los otros.
En conclusión, a partir de todas estas definiciones, reflexiones estudios, libros, se
ha desarrollado un paradigma que dice que la Inteligencia Emocional ayuda a
armonizar cabeza y corazón (entiéndase por cabeza el intelecto, y por corazón los
sentimientos) en determinadas situaciones de la vida cotidiana.