El documento explica que la fe es un mandato divino por varias razones: 1) asegura el éxito, 2) es un deber, 3) es un arma defensiva, y 4) es indispensable en la oración, la salvación y para recibir las bendiciones de Dios. La fe también establece una relación personal con Cristo y es un nuevo modo de vivir vinculado con la gracia de Dios.