Este documento trata sobre la comunicación, lenguas y poder. Brevemente discute que las lenguas se crean social e individualmente, cambian a través del tiempo (diacronía) y espacio (sincronía), y pueden entrar en peligro de extinción si menos del 30% de los niños las hablan. También describe que el inglés tiene un gran poder global como lengua hipercentral en un sistema lingüístico jerárquico, a pesar de que el mandarín es hablado por más personas.