La ley de tierras en Bolivia ha tenido una historia controvertida. José Ballivian dictó la Ley de Enfiteusis en 1842 que negó la propiedad comunal y adjudicó a las comunidades solo el uso de la tierra. Sin embargo, esta ley fue rápidamente anulada porque eliminaba el tributo indígena que sostenía al estado. Posteriormente, otros presidentes como Melgarejo y Frías decretaron leyes que declararon la propiedad estatal de las tierras comunales y obligaron a los indígenas a comprar títulos