El poema critica a una mujer negra por haber cambiado su estilo tradicional por uno más occidentalizado, imitando a su patrona blanca. Ahora usa zapatos de tacón, peinetas, reloj, fuma y se pinta la cara con polvos, en vez de usar su traje tradicional de percala. El poema sugiere que deje ese estilo "bellaco" y vuelva con su pareja negra que todavía la ama, o de lo contrario la policía la arrestará por comportarse de forma coqueta.