Este documento presenta el tema de la virtud de la caridad. Explica que existen las virtudes teologales, que son la fe, la esperanza y la caridad, y las virtudes cardinales. Señala que los cristianos tienen la obligación de ejercitar estas virtudes a través de sus obras y especialmente a través de la oración frecuente y devota. Además, proporciona ejemplos de cómo practicar estas virtudes como visitar a Jesús Sacramentado, ayudar al prójimo y rezar las oraciones de la Iglesia.