Este documento discute el aumento del crimen y la violencia en la sociedad y argumenta que se debe a la falta de una norma moral objetiva. Explora las enseñanzas bíblicas sobre la Ley de Dios y cómo, aunque somos salvos por gracia a través de la fe, los verdaderos creyentes desean obedecer a Dios y guardar sus mandamientos. Concluye que Dios tiene un pueblo en los últimos días que dará testimonio de alegría en la obediencia a través del poder de la gracia.