SlideShare una empresa de Scribd logo
Los municipios castellanos en el siglo XVIII



UNIVERSIDAD NACIONAL DE EDUCACIÖN A DISTANCIA (MADRID)

DEPARTAMENTO DE HISTORIA MEDIAEVAL, MODERNA Y CC. Y TT.
HISTORIOGRÁFICAS

CURSO DOCTORADO




    LOS MUNICIPIOS
  CASTELLANOS EN EL
      SIGLO XVIII

Trabajo Monográfico presentado por Don Aitor Pagalday Muñoz.

Y dirigido por la profesora Doctora Laura Santolaya Heredero.




La profesora                                                    El autor




Eskoriatza, a 30 de Abril de 2005




                                                                                 2
Los municipios castellanos en el siglo XVIII



INTRODUCCIÓN ..................................................................................................... 4
1.     TÉRMINO Y COMPONENTE HUMANO ................................................ 5
1.1. Estado seglar y eclesiástico............................................................................ 6
1.1.1.  Estado seglar............................................................................................... 6
1.1.2.  Estado eclesiástico...................................................................................... 7
1.2. Población activa ............................................................................................. 8
2. LA RIQUEZA .................................................................................................. 10
2.1. Riqueza inmobiliaria ................................................................................... 10
2.1.1.  Las tierras ................................................................................................. 10
2.1.2   Las casas ................................................................................................... 11
2.2. Riqueza mobiliaria....................................................................................... 11
3. LAS INSTITUCIONES ................................................................................... 13
3.1. Los gremios................................................................................................... 13
3.2. Hospitales y beneficencia............................................................................. 14
3.3. Los colegios ................................................................................................... 15
4. EL GOBIERNO MUNICIPAL....................................................................... 16
4.1. Composición del mismo............................................................................... 16
4.2. Competencias................................................................................................ 17
4.2.1.  Autoridades derivadas del poder regio .................................................. 17
4.2.2.  Los cabildos .............................................................................................. 18
4.2.3.  Resto de oficios ......................................................................................... 19
CONCLUSIÓN ........................................................................................................ 20
BIBLIOGRAFIA...................................................................................................... 21
FUENTES DOCUMENTALES.............................................................................. 23




                                                                                                                      3
Los municipios castellanos en el siglo XVIII



INTRODUCCIÓN

       “... que acaece que quando los dichos fieles han de nombrar y escoxer a los
dichos offiçiales que los dichos bandos y la mayor parte de la comunidad de bos el
dicho conçejo que bos armades...”

       Es así como, este escrito del archivo municipal de Eskoriatza (Guizpúzcoa),
nos da información al respecto de cómo se efectuaba el proceso de nombramiento de
los miembros del gobierno municipal.

        Este trabajo, no pretende ser una exhaustiva investigación sobre los
municipios castellanos durante el siglo XVIII, por un lado por la premura de tiempo
y por otro por la amplitud del tema a investigar (temporal y espacialmente). Por ello,
realizaremos una breve síntesis de cómo estaban estructurados las localidades
castellanas durante el citado siglo.

       El trabajo se compone de cuatro grandes partes. En la primera de ellas nos
centramos en los aspectos sociales y demográficos de los municipios. En la segunda
de ellas, son los aspectos económicos los que se tratan, tomando las riquezas
inmobiliarias y mobiliarias como base. En la tercera parte, las instituciones más
importantes son las que centran nuestra atención. Y en la cuarta y última parte, es el
gobierno municipal y su funcionamiento donde nos centramos.

        Para realizar esta síntesis, nos basaremos en dos tipos de fuente de
información. Por un lado consultaremos las fuentes y la información que nos ofrezca
el catastro de la ensenada y por otro lado, consultaremos la bibliografía ya existente
sobre nuestro tema de estudio.




                                                                                    4
Los municipios castellanos en el siglo XVIII




1.         TÉRMINO Y COMPONENTE HUMANO

       Para comenzar con el estudio sobre los municipios castellanos durante el siglo
XVIII, sería conveniente señalar el carácter socio jurídico desigual que solían tener
algunos municipios y otros durante toda la Edad Moderna como herencia del
Medievo.

        Así las cosas, podemos señalar que estos, podían dividirse entre municipios
de realengo y de señorío. Entre los primeros, solía ser el Rey la autoridad máxima y
entre los segundos, era un noble (señor), quien gobernaba en nombre del monarca.
De todos modos, a lo largo del siglo XVIII, los municipios de señorío fueron
desapareciendo en favor de los de realengos.

       Por otro lado hay que señalar que los municipios solían catalogarse de
diferente manera. Podían estar agrupados en ciudades, villas o aldeas. A lo largo de
la Edad Moderna, fueron las dos primeras condiciones jurídicas las que más
rápidamente se fueron multiplicando.

        La razón principal de esto, lo explica muy bien Jose Angel Achón Insausti en
su estudio sobre la villa de Mondragón, al señalar que la condición jurídica que
otorgaba el título de villa, suponía que la autoridad hasta entonces dominante sobre
ese municipio dejaba de tener vigencia pasando así al dominio real. Hay que señalar
que en la mayoría de las ocasiones, los municipios se alegraban de su nueva
condición de villa o ciudad porque su primera y más inmediata consecuencia solía
ser el descenso de la presión fiscal sobre sus vecinos.

        En lo que al componente humano se refiere, tanto seglar como eclesiástico de
los municipios castellanos durante el siglo XVIII, sería conveniente hacer una
distinción entre los municipios cercanos a la costa y los del interior.

        De todos modos, hay que señalar que a nivel global, podría decirse que el
siglo XVIII, fue un siglo de incremento poblacional. Sin embargo, hubo municipios
del interior de Castilla, donde este incremento no fue tal, hablando en algunos casos
incluso de descenso más que de incremento poblacional.

        Una clara muestra de ello tenemos el estudio realizado por Vicente Pérez
Moreda y David Sven Reher1, donde se hace hincapié en mostrar mediante diferentes
tablas poblacionales como las regiones del interior peninsular, principalmente las
ubicadas en ambas mesetas Como Castilla, León y Extremadura, arrojan un saldo
poblacional negativo. En lo que a las regiones periféricas hace referencia, según se
desprende de este mismo estudio, queda bien a las claras que son principalmente
Asturias, Murcia, Cataluña y Galicia las que mayor incremente poblacional
registraron a lo largo del siglo XVIII.

        Para explicar el porqué de esta situación, hay que remontarse al siglo anterior,
al siglo XVII concretamente. En la España del interior, la depresión demográfica del
siglo XVII, duró más de lo normal y sus efectos negativos perduraron durante los dos
primeros tercios del siglo XVIII. Sin embargo la mortalidad catastrófica por

1
    Pérez Moreda, Vicente y Sven Reher, David: Demografía histórica de España. Madrid, 1988.
                                                                                               5
Los municipios castellanos en el siglo XVIII

epidemias, pestes, etc. no fue sino un factor mas que influyó en el estancamiento
demográfico. El elemento que mejor explica esta coyuntura, es que ambas mesetas
fueron presas, durante el reinado de los Austrias menores, de una crisis moral y
material, mucho peor que cualquier otra crisis epidémica.

         Por todo esto que estamos comentando, podemos señalar que el siglo XVIII
fue la trágica prolongación del terrible siglo XVII que agotó el interior peninsular.

      Otra de las razones que explica el estancamiento demográfico, del que
venimos comentando, es la situación de la actividad económica.

       La falta de calidad y el distanciamiento entre los precios hispanos y los
europeos, arruinaron la producción artesana y manufacturera de Castilla del siglo
XVIII. Este declive, tuvo como inmediata consecuencia, que la economía de
ciudades castellanas como Salamanca, Cuenca, Burgos, Toledo y algunas otras,
cayera en picado a partir del reinado de Felipe II.

        A esta quiebra industrial, artesanal y manufacturera, le siguió la comercial y
al final, también la de los servicios, por lo que los ingresos del fisco se vieron
comprometidos muy seriamente. Como consecuencia de ello, se buscó en la
agricultura, de productividad sostenida, la tabla de salvación del sistema
socioeconómico.

        No pasaron muchos años hasta que la presión fiscal y señorial sobre los
trabajadores de la tierra, resultaron ser insoportables, a lo cual se le unió una excesiva
inversión especulativa, como lo fueron los prestamos a usuarios de tipo hipotecario.
Por ello, cabe deducir que la situación de los agricultores, también empeoró en muy
pocos años de manera muy considerable.

        Podemos señalar por lo tanto, que el declive rural, partió de la “ruina de las
actividades secundarias del mundo urbano”. Las dos mesetas se despoblaron debido a
que los campesinos se vieron obligados a emigrar: los destinos fueron varios entre
los que se destacaron América, las posesiones europeas y la periferia peninsular.

1.1.   Estado seglar y eclesiástico

1.1.1. Estado seglar

        A la hora de cuantificar el número de habitantes con los que contaban los
municipios castellanos durante el siglo XVIII, hay que señalar que las fuentes mas
fiables son los censos municipales. Sin embargo, los censos de esta época no resultan
muy fiables, debido sobretodo a la mentalidad tradicional de la época, por la cual
trataban de ocultar la realidad a las autoridades por miedo a las actuaciones o
intervenciones fiscales.

        Otro pero que se les pone tradicionalmente al uso de los censos como fuente
de información, es la dificultad que presentan para poder hacer análisis comparativos
entre ellos.

       La razón principal que explica esta crítica, es la falta de un mismo criterio
para todos los censos. Así por ejemplo, a la hora de componer agrupaciones sociales,

                                                                                        6
Los municipios castellanos en el siglo XVIII

a los historiadores se nos presentan múltiples dificultades para poder hacer un
análisis fiable.

       A pesar de todo ello, si que podemos hacer una clasificación de los
principales grupos sociales de los que solía componerse un municipio en esta época:
    • Cargos y oficinas reales.
    • Comerciantes.
    • Médicos.
    • Dependientes seglares de la Iglesia.
    • Oficios y artesanos.
    • Labradores.
    • Jornales.
    • Viudas.
    • Pobres.

      Esta clasificación puede resultarnos útil, para la realización de estudios
demográficos sobre ciudades de cierto tamaño y población.

        Tal y como se ha señalado con anterioridad, la población castellana durante
el siglo XVIII, a pesar de la pequeña recuperación que hubo, era considerablemente
baja para la amplia extensión que ocupaba el reino castellano.

        Una de las razones que explica esta situación, es la baja natalidad de la época.
La media de hijos por matrimonio era relativamente baja, exactamente de tan solo
1,26 hijos por matrimonio. Una de las causas de este índice tan bajo, era la edad
media de los matrimonios. Resultaba común que las parejas contrajeran matrimonio
entre los 35 y los 40 años, por lo que les quedaba muy poco tiempo de edad fértil.

        A este respecto, hay que señalar que este bajo promedio de hijos por
matrimonio no estaba directamente relacionado con el nivel de renta per capita de las
familias. Así por ejemplo, las familias con unos niveles de renta más bajos, oscilaban
entre los 1,1 hijos por matrimonio de las familias de labradores y los 1,2 hijos de las
familias dependientes de la Iglesia y jornaleros. Por otro lado, las familias con
niveles de renta más altos, tan solo llegaban a los 1,7 hijos por matrimonio.

        De todos estos datos, podemos deducir, que cuando se habla durante la Edad
Moderna de la gran extensión de las familias, no se hablaba contabilizando tan solo a
los miembros de las familias nucleares, sino que también se contabilizaban, abuelos,
tíos, cuñados, suegros, sobrinos y nietos.

1.1.2. Estado eclesiástico

        A la hora de hablar del estado eclesiástico en los municipios castellanos, hay
que señalar antes de nada, que existían notables diferencias entre unos municipios y
otros según el carácter más o menos eclesiástico de estos. Así por ejemplo la
proporción del estado eclesiástico con relación a la población total en un municipio
que no lo era, cambiaba significativamente en función del carácter mas o menos
religioso del mismo.




                                                                                      7
Los municipios castellanos en el siglo XVIII

        Por otro lado, en lo que al estado eclesiástico propiamente dicho hace
referencia, este se dividía en dos grupos, por un lado el estado eclesiástico secular y
por el otro el estado eclesiástico regular.

        Habitualmente, el número de componentes del estado eclesiástico regular,
solía ser mayor que el del estado eclesiástico secular. Y en cuanto a la distinción por
sexos hace referencia, en el clero secular, la comunidad femenina solía ser más
numerosa que la masculina, mientras que ocurría lo contrario en el clero regular.

        A pesar de todo esto, la composición exacta y con cifras exactas del censo
eclesiástico es complicada de cuantificar e investigar. La principal causa de esta
complicación, radica en que muchos vecinos de los municipios solían estar censados
tanto en el censo regular como en el censo secular, por lo que se daba una duplicado
de nombres. Por ello y para no incurrir en este error, se debería hacer una meticulosa
y exhaustiva investigación de nombres tanto masculinos como femeninos de ambos
censos.

1.2.   Población activa

        Denominamos población activa, a aquella parte de la población que se
encontraba ocupada en una actividad laboral remunerada. Por ello, no es tarea
sencilla cuantificar de forma precisa la población activa real de los municipios
castellanos durante el siglo XVIII.

       Dentro de este grupo, entrarían desde labradores y tenderos, hasta artesanos
junto con sus aprendices y los trabajadores de la administración.

       Sin embargo, resulta obvio que en esta relación de empleos u oficios, no está
incluida, otra fuerza de trabajo, que aunque de forma oficial no aparecía registrada, si
que realizaban una inestimable labor en el quehacer diario de las familias. Hablamos
de las mujeres, de los niños y de los adolescentes que no trabajaban como aprendices
de un oficio.

       En las zonas rurales, la mayor parte de la población activa, se dedicaba a las
labores de labranza de la tierra. En un segundo lugar, podríamos situar a aquellos
trabajadores que se dedicaban a la artesanía y en tercer y último lugar en cuanto a
número hace referencia, situaríamos a los trabajadores de la administración.

       En las zonas urbanas por el contrario, eran los oficios artesanos los que
cobraban un mayor protagonismo en detrimento de los labradores, mientras que los
trabajadores de la administración quedaban en término medio entre los dos grupos de
trabajadores anteriores.

        A la hora de hacer una clasificación de la población activa de las ciudades
dedicada a los oficios, es conveniente hacerla tomando como indicador el grado de
necesidad que resultaba el trabajo que ellos desarrollaban para el resto de la
población. Así las cosas, podríamos clasificar la población activa de un municipio
castellano en tres grandes grupos.

        En un primer grupo, se encontrarían aquellos trabajadores cuyo trabajo
resultaba de primera necesidad para los ciudadanos. Por ello, denominaremos a estos

                                                                                      8
Los municipios castellanos en el siglo XVIII

oficios como primarios. Entre estos, podríamos destacar los oficios de herrero,
albañil, carpintero, etc.

        En un segundo grupo, se encontrarían los que denominaremos oficios
secundarios o de segundas necesidades. Estos oficios, consistían básicamente en el
perfeccionamiento de la labor que hacían los trabajadores de los oficios primarios.
Este segundo gran grupo, podríamos subdividirlo en diferentes ámbitos de actuación:
Los relacionados con la viviendo, como lo eran el cantero o el yesero; los
relacionados con la vestimenta, como el tintorero o el peinador; y los relacionados
con la producción del menaje para la casa, como el alfarero, tinajero, etc.

        En un tercer grupo se encontraban los oficios que dependían de la situación
económica del resto de personas. Así por ejemplo si la situación era económicamente
buena, y la gente gozaba de excedente para poder tener otra fuente de ingreso, los
trabajadores que incluimos en este grupo se veían rápidamente beneficiados de esa
buena coyuntura económica. Entre estos oficios destacamos los de pastelero,
confitero, relojero, cordonero, etc.

      Más adelante se analizara con mayor detenimiento el tema de los oficios,
gremios, etc. y todo los que esto suponía para un municipio de la época.




                                                                                 9
Los municipios castellanos en el siglo XVIII


2.      LA RIQUEZA

2.1.    Riqueza inmobiliaria

       La riqueza inmobiliaria con la que solían contar los municipios castellanos
durante el siglo XVIII, se centraba principalmente en los campos, las tierras y las
casas.

2.1.1. Las tierras

       Si comenzamos por analizar la tierra como riqueza inmobiliaria, hay que
señalar que su valor era clave debido a que los sectores productivos existentes en los
municipios estaban configurados y condicionados en gran medida por ella.

        Sin embargo, resulta complicado metodológicamente, calcular la riqueza real
que creaba la tierra para un municipio, para ello, habría que delimitar y situar la
distribución de las propiedades terrestres y sus rentas.

        La propiedad de la tierra de los municipios, solía estar dividida en dos
grandes grupos. Por un lado las tierras pertenecientes al clero y por otro lado, las
tierras pertenecientes al estado seglar.

        Las tierras del clero, a su vez se dividían entre las del clero secular y las del
clero regular.

       En lo que a las propiedades del clero secular hace referencia, hay que señalar
que se componían por las tierras cuya función era la de servir de mantenimiento a las
personas que componían la institución por un lado, y por el otro, por las tierras
destinadas al mantenimiento material.

      Las propiedades del clero regular por su parte, solía servir para la
manutención tanto material como humana de la institución.

        En cuanto a la titularidad de las tierras, las del clero secular, podían ser
indistintamente tanto individual como colectiva, no ocurría lo mismo con la del clero
regular debido a que la titularidad mayoritaria, solía ser la colectiva.

       Las propiedades del estado seglar, estaba dividida en cuatro grandes grupos:
Titulados, dones2, labradores y los bienes de los pueblos.

        En lo que a la titularidad de la propiedad se refiere, se dividía en dos grupos.
Los titulares individuales por un lado, los cuales podían disponer libremente de la
utilización de los bienes; y los titulares colectivos, que solían identificarse tanto con
el colectivo propiamente dicho (era este el que disponía de ella), como con un
individuo que era designado por el dicho colectivo.

2
  Se denominaba como dones, a aquellas personas que sin formar una clase social identificada dentro
del municipio, poseían un rango social distinto del pueblo llano en cada localidad. Este rango superior,
se identificaba con la voz “don”, que precedía al nombre del dicho individuo. A nivel general
podríamos decir que se trataba de un colectivo situado entre la nobleza urbana y el pueblo llano.
Dentro de este grupo se encontraban colectivos tan heterogéneos como hidalgos rurales, algunos hijos
segundones de familias nobles, profesionales liberales y labradores y comerciantes enriquecidos.
                                                                                                    10
Los municipios castellanos en el siglo XVIII

2.1.2 Las casas

       Como ocurría con la mayoría de las propiedades, las casas también estaban
divididas entre las pertenecientes al estado seglar y las del estado eclesiástico.

        Al igual que con la propiedad de la tierra del estado seglar, las casas estaban
repartidas entre las pertenecientes a los titulados, las de los dones y las de los no-
dones.

       Los titulados, habitualmente solían ser los dueños de las casas más grandes de
los municipios, pero en pocas ocasiones residían ellas. La razón de esta ausencia era
básicamente su preferencia por residir más cerca de la Corte.

       Las casas pertenecientes a los dones por su parte, solían ser mayoría en los
municipios, mientras que en un término medio quedaban, en cuanto al número de
propiedades totales hacía referencia, los propietarios que ni eran titulados ni tampoco
dones.

       Al igual que ocurre hoy en día, ser propietario de una casa o vivienda,
brindaba la posibilidad a dichas personas disponer de una fuente de ingresos más.

        Los alquileres de las viviendas, solían oscilar en función de tres variables. Por
un lado, el municipio en el que se encontraban; Por otro lado, la localización que
poseían estas viviendas dentro del propio municipio; y por último, las características
de la casa o vivienda. Así por ejemplo, tal y como señala Laura Santolaya en su
estudio realizado sobre la ciudad de Toledo durante el siglo XVIII, la cuantía del
alquiler de una vivienda solía rondar el 10% del valor de la vivienda3.

       Había situaciones, con el objetivo de abaratar el alquiler por ejemplo, en el
que no se alquilaba una casa o vivienda al completo, sino que tan solo se alquilaba
una habitación o una parte concreta de la casa.

        Las casas cuya propiedad era de los diferentes colectivos del estado
eclesiástico, solía variar en numero total en función del cariz más o menos religioso
del municipio.

        De este modo se explica, que en los municipios donde se encontraba la sede
episcopal, solían tener una cariz mucho más religioso que los que no eran sede, lo
cual se traducía en el número de viviendas más elevado pertenecientes al estado
eclesiástico.

2.2.    Riqueza mobiliaria

        Como eje de la propiedad mobiliaria, se encontraban las “rentas”.

        Denominamos renta, a la utilidad o beneficio que rendía una cosa, o de lo que
ella se cobraba.

        Durante la época moderna en Castilla existían tres tipos de rentas principales:

3
  SANTOLAYA, L.: Una ciudad del Antiguo Régimen: Toledo en el siglo XVIII (personas, propiedad
y administración). Cuadernos de la UNED: Madrid, 1991.
                                                                                           11
Los municipios castellanos en el siglo XVIII

Censos, juros y tributos.

       Los tributos eran los “pagos de una pensión anual por un capital recibido en
dinero, pero que estaba fijado sobre un determinado bien inmueble para asegurar su
cobro; en este sentido, eran las tierras o las casas las que solían estar grabadas4.

       Los censos y los juros eran dos tipos de renta básicamente idénticas. Su
diferencia radicaba en que mientras los censos se daban como consecuencia de los
contratos efectuados entre particulares, los juros eran un tipo de renta en el que los
contratos se efectuaban entre la Corona y los particulares. Por ello a los juros
también se les denominaba censos reservativos, los cuales eran un “compromiso
perpetuo para el que recibía la cantidad total, por el que se obligaba a pagar al
oferente un dinero anual”5.

       Además de los censos reservativos o juros, también había censos
consignativos, en los cuales el pago anual se encontraba ligado a un porcentaje sobre
un capital.

        Con el tiempo, tal y como señala Santolaya comentando una cita de Donezar,
la continua necesidad de dinero de la Corona castellana, llevo a esta a pedir dinero a
particulares teniéndoles que pagar como reconocimiento por haber prestado este
servicio, una cantidad anual.

       Estos pagos anuales, a pesar de que en un principio fuera vitalicio, con el
tiempo se convirtieron en hereditarios.

        Sin embargo, los particulares para asegurarse el cobro de estos
reconocimientos6, por ejemplo en el caso en el que en algún momento desde la
tesorería real se dijese que no había dinero, situaban el “pago sobre la renta de un
determinado sitio7.

       Además de estos tres tipo de rentas, existían otras que no eran tan frecuentes:
Prestamos, derechos, arriendos de oficio, etc.




4
  Op. Cit. Pag 172.
5
  Op. Cit. Pag 172.
6
  El juro, como censo reservativo que no era un interés sobre el capital, cesaba cuando el estado
quería.
7
  Op. Cit. Pag 172.
                                                                                                    12
Los municipios castellanos en el siglo XVIII


3.     LAS INSTITUCIONES

       La sociedad castellana durante el siglo XVIII, con el objetivo de mejorar su
funcionamiento, se estructuraba en base a unas instituciones. Estas, gestionaban los
ámbitos más importantes de la sociedad de la época. Salvo la política, todas las
demás, la economía, la sanidad y la educación.

3.1.   Los gremios

       Los gremios eran asociaciones de personas con el mismo oficio o profesión.

       Sus orígenes se remontan a la Edad Media y solían estar compuestos por
aprendices, oficiales y maestros.

        Los gremios se agrupaban en dos grandes bloques, por un lado los gremios
comerciales y por el otro los gremios artesanales. Su principal diferencia era la
distinta concepción que tenían de la realidad económica.

       Los gremios artesanales, trataban de buscar la mayor especialización de sus
componentes mediante pruebas. Los gremios comerciales por su parte, defendían que
la mejor técnica para el desarrollo, era la observación de la técnica comercial del
propietario del negocio8.

        Otra de las diferencias que existía entre ambos tipos de gremio, era que
mientras los gremios artesanales estaban necesitados de seguridad y por lo tanto
podríamos considerarlos como conservadores, los comerciales, apostaban por
arriesgar su dinero con el objetivo de obtener mayores beneficios.

       Otra de las cosas reseñables, era que mientras los asociados de los gremios
artesanales no percibían a los otros asociados como competidores, los miembros de
los gremios comerciales si lo hacían y como consecuencia de ello, trataban de actuar
de forma independiente, en la medida de lo posible, para la obtención de la mayor
cuantía de beneficio posible.

        Con todo ello, podemos señalar que los gremios perduraron en el tiempo
durante tantos años, porque también repercutían positivamente en la sociedad como
en el estado en general.

        Uno de los beneficios, y quizás el más importante, era que garantizaban la
estabilidad social. Esto se explica porque la religiosidad de la institución, su sistema
asistencial y la conservación moral de sus componentes, cortaban cualquier tipo de
reivindicación de libertad9.

       Otro de los beneficios, era directamente para el estado. Con los gremios, el
estado además de conseguir diversos datos estadísticos para políticas económicas y
sociales posteriores, conseguía poseer una vía para que las reclamaciones de los
trabajadores estuviesen perfectamente canalizadas. Es decir, que mediante los

8
 VILLAS, S.: Los gremios malagueños, 1700-1746. Malaga, 1983.
9
 CAPELLA, M. y MATILLA TASCÓN, A.: Los cinco gremios mayores de Madrid. Cámara de
Comercio: Madrid, 1957.
                                                                                     13
Los municipios castellanos en el siglo XVIII

gremios, el estado conseguía disponer de una herramienta que actuaba como policía
del sistema económico.

        Como tercer beneficio principal, y unido al anteriormente mencionado del
sistema económico, los gremios actuaban como garantía del citado sistema.
Aseguraban unos productos y servicios de calidad y con costos estables pero también
podían ayudar materialmente a los habitantes en casos de extrema necesidad como
catástrofes, hambrunas, epidemias, etc.10.

        Durante el siglo XVIII y con la aparición del movimiento ilustrado, la
situación de estas asociaciones de trabajadores del mismo oficio, sufrió algunos
cambios considerables.

        Para algunos investigadores, los gremios eran unos estímulos para la
producción11, por el contrario para otros, resultaban ser un excesivo control de la
libertad de producción12.

        Los ilustrados, principalmente a partir de mediados del siglo XVIII, veían a la
institución gremial como un agente de control de la producción.

       La postura ilustrada, podemos considerarla como antigremial en toda regla.
Veían a los gremios como herramientas o útiles tradicionales para consolidar las
oligarquías hereditarias. Basaban su opinión en que los dirigentes gremiales trataban
de limitar las libertades, tanto de producción como de toma de decisión, con el
objetivo de imposibilitar el ascenso de nuevas personas a los puestos dirigentes y de
poder.

        Los conflictos entre los ilustrados y los tradicionales, entorno a los gremios,
no se hicieron esperar y mientras los primeros trataban de introducir nuevas normas
para la organización de los gremios, los segundos trataban de mantener las
estructuras tal cual estaban.

3.2.    Hospitales y beneficencia

        Los hospitales en los municipios castellanos durante la Edad Moderna, eran
instituciones eclesiásticas, debido a que eran los dirigentes eclesiásticos quienes
debían dar los permisos correspondientes para la creación de un hospital, como
respuesta a las peticiones realizadas por los interesados.

       En general, podríamos señalar que los hospitales tenían como objetivo
principal, mirar por la piedad y la caridad del pueblo. Por ello, el concepto de
beneficencia y el de hospital, estaban estrechamente ligados.

        A grandes rasgos, los hospitales además de servir para la cura de enfermos,
servía también como asilo a desvalidos, albergue para pobres, de hospedaje para los
peregrinos sin grandes medios económicos, etc.



10
   MOLAS RIBALTA, P.: Los gremios barceloneses del siglo XVIII. Madrid, 1970.
11
   Op. Cit.
12
   DÍEZ, J. L. : Los gremios en la España imperial. Aldecoa S.A.: Madrid.
                                                                                      14
Los municipios castellanos en el siglo XVIII

        Algunos hospitales, los más pequeños casi siempre, solían especializarse en
una labor concreta, debido a que no contaban con medios suficientes para poder
responder a todas las necesidades de piedad y caridad que solían tener los habitantes
de los pueblos y los peregrinos.

        En lo que a la gestión de los hospitales hace referencia, hay que señalar que
los fundadores del hospital nombraban un “equipo directivo” que se encargaba del
gobierno del hospital y que debían de dar cuenta periódicamente a sus superiores
sobre los pormenores de su gestión.

        Las rentas que se obtenían de los bienes del hospital, debían servir para pagar
los salarios de los trabajadores que desempeñaban su labor en él y el resto para los
gastos hospitalarios. Resulta curioso comprobar como en muchas cartas
fundacionales de hospitales, se prohibía expresamente la posibilidad de sacar ningún
objeto de culto del hospital con el fin de alquilarlo o venderlo.

3.3.   Los colegios

       Cuando nos referimos a los colegios, hacemos referencia a todos aquellos
centros dedicados a la enseñanza o docencia.

        Durante la Época Moderna, la ecuación estaba dividida, al igual que también
lo esta hoy en día, dividida en diferentes etapas.

       Por un lado se encontraban los colegios de educación básica, conocidos como
colegios de primeras letras y gramática. Por otro lado se encontraban los colegios de
humanidades y por último y como tercer nivel, los colegios universitarios.

      Durante el siglo XVIII, la educación al no ser obligatoria, nos hacemos una
pequeña idea de quienes podían disfrutar de recibir docencia colegial.

       La procedencia de los grupos estudiantiles, mayoritariamente eran hijos de
familias acomodadas o estudiantes becados. Había también un importante tercer
grupo de estudiantes denominados, fámulos, que realizaban pequeños trabajos a la
vez que estudiaban para mejorar su situación económica.

        Los centros educativos, se localizaban principalmente en las urbes
castellanas, básicamente porque era en las ciudades donde se encontraban la mayoría
de clientes potenciales de estos centros.




                                                                                    15
Los municipios castellanos en el siglo XVIII


4.      EL GOBIERNO MUNICIPAL

        Existe disparidad de opiniones entre diferentes historiadores al respecto de la
aparición de los primeros Ayuntamientos. Mientras que para algunos, los primeros
ayuntamientos se crearon durante el siglo XIII mediante la figura del Regimiento de
regidores y procuradores por designación real13, para otros como es el caso de Jose
Luis Orella14, la aparición del concejo cerrado15 data de la segunda mitad del siglo
XIV, convocándose desde entonces la asamblea una vez al año para la elección de
los cargos concejiles y procuradores a Juntas.

       Con la aparición de los concejos cerrados o ayuntamientos16 cerrados, y por
lo tanto para la reunión restringida de la “más sana parte”, no se precisaban ya
grandes espacios al aire libre o toda una iglesia. Bastaba una habitación par poder
deliberar en ella.

       Tanto es así, que las Cortes de Toledo de 1480 sancionan la obligación de
acondicionar en el plazo de dos años “ casa de ayuntamiento e cabildo en que se
ayunten”, a fin de que la vida municipal se desarrollara conforme a la realidad que
los Reyes Católicos deseaban para sus municipios. El texto dice así17:

        “Porque paresce cosa desaguisada e de mala gobernación que las ciudades e
villas de nuestra corona real no tengan cada una de ellas su casa pública de
ayuntamiento e cabildeen que se ayuntar, las justicias e regidores a entender en las
cosas complideras a la república que han de governar. Mandamos a la justicia e
regidores de las ciudades e villas e lugares de nuestra corona real que no tienen casa
pública de cabildo e ayuntamiento para se ayuntar, que dentro de dos años primeros
siguientes, contados desde el día en que estas nuestras leyes fueren pregonadas e
publicada, fagan cada una ciudad e villa su casa de ayuntamiento e cabildo en que se
ayunten so pena de que en la ciudad e villa que no se finiere dentro del dicho
término, que dende en adelante los tales oficiales hayan perdido e pierdan los oficios
de justicias o regimientos que tienen”.

4.1.    Composición del mismo

        Los gobiernos municipales durante la Edad Moderna, eran un órgano de
gobierno realmente importante. Como consecuencia de ello, durante el siglo XVIII la
institución que en este momento nos compite, resultó ser un órgano decisorio en la
sociedad castellana de la época.




13
   AGUIRRE SORONDO, A.: La casa consistorial de Bergara. Diputación Foral de Gipuzkoa,
                                 Donosita, 1995.
14
   ORELLA UNZUE, J.L.: Derecho e instituciones de los territorios históricos. En: “Euskal Herria.
                            Historia y Sociedad”. Caja Laboral Popular. 1985. pag. 321.
15
   Previamente al concejo cerrado, existía el concejo abierto, en el cual los habitantes de una villa se
reunían periódicamente en un lugar por todos conocido (habitualmente solían ser los soportales de las
iglesias) para escoger a sus representante y o para la toma de decisiones de índole comunitaria.
16
   El término ayuntamiento, nos da pie a pensar que proviene de la acción de juntarse, “ajuntarse”,
varias personas.
17
   ARIZAGA BOLUMBURU, B.: Urbanística Medieval (Guipúzcoa). Kriselu, Diputación Foral de
Gipuzkoa. Donosita, 1990. pag. 18.
                                                                                                    16
Los municipios castellanos en el siglo XVIII

       A nivel general, podríamos dividir la composición del Ayuntamiento de los
municipios castellanos18durante el siglo XVIII, en tres grandes bloques: las
autoridades derivadas del poder real; las autoridades derivadas propiamente de los
cabildos; y el resto de oficios que existía en los ayuntamientos.

        Entre las autoridades derivadas del poder regio, se encontraban el corregidor,
el alcalde mayor, el alcalde de alzadas, el alguacil mayor y el alférez mayor.

        Entre los cabildos, se encontraban el de regidores y el de jurados.

        Por último, el resto de los cargos existentes en los Ayuntamientos eran, los
alcaldes ordinarios, los alcaldes, los alguaciles, los contadores, el fiscal de la justicia
real, los escribanos, los notarios y los procuradores.

4.2.    Competencias

4.2.1. Autoridades derivadas del poder regio

       Las autoridades derivadas del poder real, estaban encabezadas por el
corregidor. Este cargo, podríamos señalarlo como el representante del rey en el
municipio y era considerada como la autoridad máxima en el municipio.

        El corregidor era elegido y nombrado por el rey mediante el Consejo de
Castilla en un primer momento y por la Cámara de Castilla con posterioridad.

       Por lo general, los corregidores no estaban muy bien valorados en los
Ayuntamientos, debido a que, además de que solían ser, prácticamente siempre, las
arcas municipales las que debían mantener su salario y sus gastos, las oligarquías
municipales no podían hacer y deshacer a sus anchas.

        Entre las competencias de los corregidores, se encontraban por un lado, la de
ejercer jurisdicción civil y criminal en primera y segunda instancia en todas las
causas que superaran los 600 maravedis; Y por otro lado, ordenar la actividad
concejil, presidiendo el Ayuntamiento, controlando los propios, etc.

       Sin embargo, no eran todo derechos, también tenía una serie de deberes con
los que cumplir. Así las cosas, debía presentarse en el ayuntamiento y jurar su cargo;
Debía hacer ayuntamiento entre las casas pertenecientes al Ayuntamiento; tenía que
controlar los precios de las principales vías de abastecimiento de la ciudad; tenía que
gestionar la mayoría de los servicios municipales; debía vigilar los caminos y los
campos municipales; tenía que hacer que se cumplieran una serie de ordenanzas
municipales y también los decidido en el Concilio de Trento.

       La última de las funciones que tenía que desempeñar el corregidor, era la de
nombrar una serie de cargos u oficios como el de alcalde mayor, alcalde alzadas,
alguacil mayor y alférez mayor.

       La principal función del alcalde mayor era la de sustituir al corregidor en las
reuniones del concejo.

18
  Se trataría de municipios con un número de habitantes considerable, donde los cargos municipales
serían variados y estarían claramente identificados.
                                                                                                 17
Los municipios castellanos en el siglo XVIII



         En cuanto al alcalde de alzadas hace referencia, hay que decir que tenía que
estar al corriente de todos los pleitos civiles o criminales en los que tenía que tomar
parte el corregidor o en su defecto el alcalde mayor.

       Con respecto al alguacil mayor, hay que señalar que solían existir dos
alguaciles mayores. Uno de ellos se limitaba a los asuntos que estrictamente acaecían
en el Ayuntamiento, y el otro actuaba en los asuntos de índole municipal,
limitándose a tener voz y voto en los asuntos referentes al Ayuntamiento.

        Por último se encontraba, tal y como hemos señalado previamente, la figura
del alférez mayor. Se trataba de un cargo creado por el rey de Castilla en 1567, como
cargo honorífico y para ser vendido, puesto que al parecer no tenía ninguna función
específica en la vida concejil. Sin embargo, esta inexistencia de una función clara,
hacia que frecuentemente se entrometiera en tareas de otros cargos, por lo que eran
frecuentes las controversias entre los diferentes trabajadores.

4.2.2. Los cabildos

       Tal y como hemos señalado previamente el cabildo estaba dividido en dos: El
cabildo de regidores y el de jurados.

      Por lo general, los miembros de los cabildos, solían repartirse los cargos
administrativos y gobernativos del municipio. En ocasiones incluso, solían compartir
un mismo cargo un regidor y un jurado.

        Entre las funciones que compartían los miembros de ambos cabildos, estaban:
Por un lado la de designar los procuradores a Cortes. Por otro lado, el de ser jueces
de apelaciones. En un tercer lugar el de desempeñar la labor de veedores y
visitadores19. Por último, la labor de contadores de la unidad20.

       El cabildo de regidores, podríamos considerarlo como el eje central del
Ayuntamiento. A pesar de que podría considerarse a este grupo como el órgano de
representación de los ciudadanos del municipio, en realidad era otro órgano
municipal más controlado por el poder real21 y que utilizaba el monarca para que
toda aquella votación que le interesara ganar, se decantara de su lado.

        Los componentes del cabildo de regidores, debían ser hidalgos o por lo menos
cristianos viejos que no hubiesen desempeñado ningún oficio vil ni mecánico.

       Hay que señalar que no todos los regidores del cabildo tenían la misma
importancia. Así por ejemplo, los regidores nobles solían preceder en el asiento y en
el voto a los regidores pertenecientes al estado llano. Cuando coincidían dos
regidores de la misma condición, era la antigüedad de cada uno de ellos la que
marcaba el orden.



19
   Se encargaba de visitar las plazas y tiendas, y de vigilar las medidas y los pesos.
20
   Debían elegirse por votación y nunca por más de cuatro años: Se encargaban, junto al mayordomo,
de llevar la contaduría general del municipio; De controlar las ventas de la ciudad; DE intervenir y dar
validez mediante su firma a los tributos y traspasos que se daban.
21
   Sus miembros eran nombrados por la Cámara de Castilla.
                                                                                                     18
Los municipios castellanos en el siglo XVIII

      El cabildo de regidores solía encargarse de la hacienda municipal, de los
nombramientos, de las comisiones de gobierno, del abastecimiento público, de la
administración de la justicia, de las obras que eran necesarias llevar a cabo en el
municipio, etc.

        Con el tiempo, los cargos de regidores, como consecuencia de su puesta en
venta, se fueron patrimonializando. Con ello, una persona al haber incorporado este
cargo a su patrimonio personal, y tras haberlo ejercido durante toda su vida, era
heredado por su descendiente. Esto trajo como consecuencia que este oficio que
comenzó como abierto, con el tiempo terminara cerrándose, creándose en los
Ayuntamientos, cabildos de regidores cerrados.

        El cabildo de jurados, tenía como función principal la de defender los
intereses comunes de los ciudadanos del municipio en el Ayuntamiento, haciendo
especial hincapié en los intereses económicos.

       Por lo general, no solían disponer de voto alguno en los asuntos que se
trataban en el gobierno municipal, pero si que podían opinar al respecto y mostrarse
desfavorables en caso de que creyeran que lo que se decidía no fuese positivo para el
pueblo.

       En lo que a su sueldo hace referencia, hay que señalar que no cobraban de
forma individual, sino colectiva. Este dinero provenía de las multas que ponían
mientras desempeñaban sus oficios y de la asignación anual que les otorgaba el
Ayuntamiento.

4.2.3. Resto de oficios

       El tercero de los tres grandes grupos de oficios estaba encabezado por los
alcaldes ordinarios. Estos alcaldes, solían ser nombrados de forma anual por el
corregidor y debían ser cuatro miembros.

        Otro de los oficios era el de alcaide, el cual solía tener como función principal
la de vigilar las puertas de la ciudad.

       El oficio de alguacil, podía ser comprado y por lo tanto al igual que otros, se
podía heredar una vez había sido incorporado al patrimonio personal de algún
individuo.

       Al respecto de los escribanos, hay que señalar, que este era un oficio
exclusivo del Ayuntamiento y que por lo tanto no podía ser patrimonializado.

       Los notarios se encargaban de dar constancia legal de lo ocurrido.

       Por ultimo, el oficio de procuradores de la ciudad que constantemente solían
ser comprados y vendidos, representaban a los interesados ante los tribunales y a los
municipios en las cortes que se celebraban periódicamente.




                                                                                      19
Los municipios castellanos en el siglo XVIII


CONCLUSIÓN

       El siglo XVIII, comenzando como comenzó, con un cambio de dinastía, nos
puede dar pie a entender también los cambios que se produjeron a nivel municipal.

       A nivel social, la situación demográfica del siglo anterior siguió incidiendo de
forma decisiva en el devenir del siglo XVIII. Con ello, se explica la grave situación
socioeconómica de muchos municipio, pudiendo incluso considerarla como crisis
crónica que no permitía el despegue económico de las familias ni de los municipios
durante todo este tiempo.

       Por ello, y a pesar de las riquezas con las que contaban los municipios, estas
no estaban equitativamente repartidas por lo que la situación resultaba difícilmente
soportable para la inmensa mayoría de la población.

       En cuanto a las principales instituciones hace referencia, hay que señalar la
gran importancia que tenían los hospitales en la vida diaria de las urbes. Además de
servir como hospitales, servían también como hospicios para indigentes, pobres,
peregrinos, por lo que las calles parecían mas “civilizadas” de lo que en realidad lo
eran. Los gremios por su parte, se encontraban en un progresiva decadencia, por la
presión que ejercía la incipiente ilustración sobre ellos.

        Por último, el gobierno municipal destacaba por la gran cantidad de cargos y
oficios existentes en el ayuntamiento, y como consecuencia de ello en muchos casos
se pisaban los unos a los otros con los consecuentes conflictos competenciales
internos. Otro de las consecuencias de este excesivo numero de cargos, era el
económico. Debido a que resultaba muy costoso el excesivo aparato burocrático de
los Ayuntamientos de la época.




                                                                                    20
Los municipios castellanos en el siglo XVIII


BIBLIOGRAFIA

ACHÓN INSAUSTI, J. A.: A voz de concejo (linaje y corporación urbana en la
                constitución de la Provincia de Gipuzkoa). Donosita, 1995.

AGUIRRE SORONDO, A.: La casa consistorial de Bergara. Diputación Foral de
              Gipuzkoa, Donosita, 1995.

ALBI, F.: El corregidor en el municipio español bajo la monarquía absoluta.
                    Madrid, 1943.
ARIZAGA BOLUMBURU, B.: Urbanística Medieval (Guipúzcoa). Kriselu,
                    Diputación Foral de Gipuzkoa. Donosita, 1990. pag. 18.

BILBAO, L. Mª.: Protoindustrialización y cambio social en el País Vasco (1500-
                   1830)., con la influencia de la Guerra Carlista, en Letras de
                   Deusto, vol. 14, nº 29, mayo-agosto 1984, p. 41-60.

     •Haciendas Forales y Hacienda de la Monarquía. El caso Vasco, siglos
                 XIV-XVIII, en V.V.A.A.: Historia de la Hacienda en España
                 (siglos XVI-XX): Homenaje a Don Felipe Ruiz Martín.
                 Hacienda Pública Española. Monografías, nº 1, 1991, p. 43-58.
CLAVERO, B.: Mayorazgo. Propiedad feudal en Castilla (1369-1836). Madrid,
                 1974.

DOMINGUEZ ORTIZ, A.: Sociedad y Estado en el siglo XVIII español. Barcelona,
                   1984.
  •   Las clases privilegiadas en el antiguo Régimen. Madrid, 1979.

GONZALEZ ALONSO, B.: El corregidor castellano (1348-1808). Madrid, 1970.

GURRUCHAGA, l.: La hidalguía y los Fueros de Guipúzcoa, en Euskalerriaren
                Alde. XXI, 1931, marzo, nº327, p. 87-101.

FERNÁNDEZ DE PINEDO, E.: Crecimiento económico y transformaciones
             sociales en el País Vasco. (1100-1850). Madrid, 1974.

MOLAS RIBALTA, P.: Los gremios barceloneses en el siglo XVIII. Barcelona,
               1978.

ORELLA UNZUE, J.L.: Derecho e instituciones de los territorios históricos. En:
                “Euskal Herria. Historia y Sociedad”. Caja Laboral Popular.
                1985. pag. 321.

SANTOLAYA HEREDERO, L.: Una ciudad del Antiguo Régimen: Toledo en el
              siglo XVIII. (Personas, Propiedades Administración). Madrid,
              1991.



 •       Hemos consultado el Catastro de Ensenada de forma indirecta consultando
         diferentes paginas WEB donde aparece información obtenida del catastro:
                                                                                 21
Los municipios castellanos en el siglo XVIII

http://enlaermita.tripod.com/ensenada.htm

http://inicia.es/de/gonz3/ensenada.htm

http://perso.wanadoo.es/amolobo01/esmat04.htm

http://villadealcocer.com/ensenada/ensenada.htm




                                                                          22
Los municipios castellanos en el siglo XVIII


FUENTES DOCUMENTALES

Archivo Municipal de Eskoriatza

    •   Carpeta “siglos XIV-XV”.
    •   Carpeta “siglos XVI-XVII”.




                                                                              23
Los municipios castellanos en el siglo XVIII




                                         24

Más contenido relacionado

La actualidad más candente

Visiones historiograficas del absolutismo
Visiones historiograficas del absolutismoVisiones historiograficas del absolutismo
Visiones historiograficas del absolutismo
Fernando de los Ángeles
 
02 fund-econm
02 fund-econm02 fund-econm
02 fund-econm
Leidylanda
 
Descripcion del contexto historico mio cid
Descripcion del contexto historico mio cidDescripcion del contexto historico mio cid
Descripcion del contexto historico mio cid
Edu Dur
 
Historia del Reino de Valencia. Cultura
Historia del Reino de Valencia. CulturaHistoria del Reino de Valencia. Cultura
Historia del Reino de Valencia. Cultura
Antonio Carrasco
 
Baja edad_media_ sociales
 Baja edad_media_ sociales Baja edad_media_ sociales
Baja edad_media_ socialessofia ardila
 
La sociedad española del renacimiento
La sociedad española del renacimientoLa sociedad española del renacimiento
La sociedad española del renacimientoKary Sma
 
Literatur aedad media
Literatur aedad mediaLiteratur aedad media
Literatur aedad media
Julia Cabrera Hernández
 
Literatura española medieval
Literatura española medievalLiteratura española medieval
Literatura española medieval
AMALIA SANCHEZ
 
Tema 3 historia social de la edad moderna. GRADO HISTORIA DEL ARTE. UNED
Tema 3 historia social de la edad moderna. GRADO HISTORIA DEL ARTE. UNEDTema 3 historia social de la edad moderna. GRADO HISTORIA DEL ARTE. UNED
Tema 3 historia social de la edad moderna. GRADO HISTORIA DEL ARTE. UNED--- ---
 
Recordando Hª antigua y medieval
Recordando Hª antigua y medievalRecordando Hª antigua y medieval
Recordando Hª antigua y medieval
Carmen Pagán
 
04. la sierra sur
04. la sierra sur04. la sierra sur
04. la sierra sur
Pedro Cordero Noboa
 
Tapada para entregar
Tapada para entregarTapada para entregar
Tapada para entregar
Renato Gamonet
 
Los inconformes vol 1 itg
Los inconformes vol 1  itgLos inconformes vol 1  itg
Tema 4 feudalismo
Tema 4 feudalismoTema 4 feudalismo
Tema 4 feudalismo
Fernando de los Ángeles
 
Resumen anual de contenidos Octavo Básico
Resumen anual de contenidos Octavo BásicoResumen anual de contenidos Octavo Básico
Resumen anual de contenidos Octavo Básico
Silvia c?dova
 
Historia de la literatura
Historia de la literaturaHistoria de la literatura
Historia de la literaturaOlga Aguirre
 
Historia_literatura_lenguaje 110820195501-phpapp02
Historia_literatura_lenguaje 110820195501-phpapp02Historia_literatura_lenguaje 110820195501-phpapp02
Historia_literatura_lenguaje 110820195501-phpapp02Hanna Zamorano
 
Contexto Histórico Edad Media
Contexto Histórico Edad MediaContexto Histórico Edad Media
Contexto Histórico Edad Media
Education-MEC-DGA
 

La actualidad más candente (20)

Visiones historiograficas del absolutismo
Visiones historiograficas del absolutismoVisiones historiograficas del absolutismo
Visiones historiograficas del absolutismo
 
02 fund-econm
02 fund-econm02 fund-econm
02 fund-econm
 
Descripcion del contexto historico mio cid
Descripcion del contexto historico mio cidDescripcion del contexto historico mio cid
Descripcion del contexto historico mio cid
 
Historia del Reino de Valencia. Cultura
Historia del Reino de Valencia. CulturaHistoria del Reino de Valencia. Cultura
Historia del Reino de Valencia. Cultura
 
Baja edad_media_ sociales
 Baja edad_media_ sociales Baja edad_media_ sociales
Baja edad_media_ sociales
 
La sociedad española del renacimiento
La sociedad española del renacimientoLa sociedad española del renacimiento
La sociedad española del renacimiento
 
Literatur aedad media
Literatur aedad mediaLiteratur aedad media
Literatur aedad media
 
Literatura española medieval
Literatura española medievalLiteratura española medieval
Literatura española medieval
 
Tema 3 historia social de la edad moderna. GRADO HISTORIA DEL ARTE. UNED
Tema 3 historia social de la edad moderna. GRADO HISTORIA DEL ARTE. UNEDTema 3 historia social de la edad moderna. GRADO HISTORIA DEL ARTE. UNED
Tema 3 historia social de la edad moderna. GRADO HISTORIA DEL ARTE. UNED
 
La España del siglo XVII
La España del siglo XVIILa España del siglo XVII
La España del siglo XVII
 
Recordando Hª antigua y medieval
Recordando Hª antigua y medievalRecordando Hª antigua y medieval
Recordando Hª antigua y medieval
 
04. la sierra sur
04. la sierra sur04. la sierra sur
04. la sierra sur
 
Tapada para entregar
Tapada para entregarTapada para entregar
Tapada para entregar
 
Los inconformes vol 1 itg
Los inconformes vol 1  itgLos inconformes vol 1  itg
Los inconformes vol 1 itg
 
Tema 4 feudalismo
Tema 4 feudalismoTema 4 feudalismo
Tema 4 feudalismo
 
El siglo XV
El siglo XVEl siglo XV
El siglo XV
 
Resumen anual de contenidos Octavo Básico
Resumen anual de contenidos Octavo BásicoResumen anual de contenidos Octavo Básico
Resumen anual de contenidos Octavo Básico
 
Historia de la literatura
Historia de la literaturaHistoria de la literatura
Historia de la literatura
 
Historia_literatura_lenguaje 110820195501-phpapp02
Historia_literatura_lenguaje 110820195501-phpapp02Historia_literatura_lenguaje 110820195501-phpapp02
Historia_literatura_lenguaje 110820195501-phpapp02
 
Contexto Histórico Edad Media
Contexto Histórico Edad MediaContexto Histórico Edad Media
Contexto Histórico Edad Media
 

Similar a Los municipios castellanos en el siglo XVIII

Historia de españa
Historia de españaHistoria de españa
Historia de españa
Luis Ramirez
 
Historia septiembre 2010
Historia septiembre 2010Historia septiembre 2010
Historia septiembre 2010estudiaenlaubu
 
Historia septiembre 2010
Historia septiembre 2010Historia septiembre 2010
Historia septiembre 2010Oscar Herrera
 
Hsca Circo Criollo
Hsca Circo CriolloHsca Circo Criollo
Hsca Circo CriolloHAV
 
Historia de España (2º bachillerato)
Historia de España (2º bachillerato)Historia de España (2º bachillerato)
Historia de España (2º bachillerato)
Javier Pérez
 
¿Cómo era la vida cotidiana de la ciudad de Santa Marta (Colombia) de 1590 a ...
¿Cómo era la vida cotidiana de la ciudad de Santa Marta (Colombia) de 1590 a ...¿Cómo era la vida cotidiana de la ciudad de Santa Marta (Colombia) de 1590 a ...
¿Cómo era la vida cotidiana de la ciudad de Santa Marta (Colombia) de 1590 a ...
Kelly (Kellaxia) Zuluaga
 
Torrejon de ardoz
Torrejon de ardoz Torrejon de ardoz
Torrejon de ardoz
martamagan42
 
Torrejon de Ardoz
Torrejon de ArdozTorrejon de Ardoz
Torrejon de Ardoz
ramiropuig
 
Torrejon de Ardoz
Torrejon de ArdozTorrejon de Ardoz
Torrejon de Ardoz
MAITESANZGARCIA
 
Torrejon de ardozz
Torrejon de ardozzTorrejon de ardozz
Torrejon de ardozz
leandrofdlc2015
 
Hsca Circo Criollo
Hsca Circo CriolloHsca Circo Criollo
Hsca Circo CriolloHAV
 
Sectores populares tucuman
Sectores populares tucumanSectores populares tucuman
Sectores populares tucuman
Analía López Iglesias
 
Tema 7 las crisis del siglo xvii
Tema 7 las crisis del siglo xviiTema 7 las crisis del siglo xvii
Tema 7 las crisis del siglo xvii
Maria Jose Fernandez
 
La colonia en chile
La colonia en chileLa colonia en chile
La colonia en chile
María Verónica Cortez Díaz
 
La colonia en chile
La colonia en chileLa colonia en chile
La colonia en chile
Gissela Carocca
 
ETAPA COLONIAL DE CHILE
ETAPA COLONIAL DE CHILEETAPA COLONIAL DE CHILE
ETAPA COLONIAL DE CHILE
Julio Julio
 
Estefania3
Estefania3Estefania3
Estefania3pazcar3
 

Similar a Los municipios castellanos en el siglo XVIII (20)

Historia de españa
Historia de españaHistoria de españa
Historia de españa
 
Historia septiembre 2010
Historia septiembre 2010Historia septiembre 2010
Historia septiembre 2010
 
Historia septiembre 2010
Historia septiembre 2010Historia septiembre 2010
Historia septiembre 2010
 
Hsca Circo Criollo
Hsca Circo CriolloHsca Circo Criollo
Hsca Circo Criollo
 
Historia de España (2º bachillerato)
Historia de España (2º bachillerato)Historia de España (2º bachillerato)
Historia de España (2º bachillerato)
 
¿Cómo era la vida cotidiana de la ciudad de Santa Marta (Colombia) de 1590 a ...
¿Cómo era la vida cotidiana de la ciudad de Santa Marta (Colombia) de 1590 a ...¿Cómo era la vida cotidiana de la ciudad de Santa Marta (Colombia) de 1590 a ...
¿Cómo era la vida cotidiana de la ciudad de Santa Marta (Colombia) de 1590 a ...
 
Torrejon de ardoz
Torrejon de ardoz Torrejon de ardoz
Torrejon de ardoz
 
Torrejon de Ardoz
Torrejon de ArdozTorrejon de Ardoz
Torrejon de Ardoz
 
Torrejon de Ardoz
Torrejon de ArdozTorrejon de Ardoz
Torrejon de Ardoz
 
Torrejon de ardozz
Torrejon de ardozzTorrejon de ardozz
Torrejon de ardozz
 
Tdpeagrc 5º
Tdpeagrc   5ºTdpeagrc   5º
Tdpeagrc 5º
 
Hsca Circo Criollo
Hsca Circo CriolloHsca Circo Criollo
Hsca Circo Criollo
 
Sectores populares tucuman
Sectores populares tucumanSectores populares tucuman
Sectores populares tucuman
 
Tema 7 las crisis del siglo xvii
Tema 7 las crisis del siglo xviiTema 7 las crisis del siglo xvii
Tema 7 las crisis del siglo xvii
 
La colonia en chile
La colonia en chileLa colonia en chile
La colonia en chile
 
La colonia en chile
La colonia en chileLa colonia en chile
La colonia en chile
 
ETAPA COLONIAL DE CHILE
ETAPA COLONIAL DE CHILEETAPA COLONIAL DE CHILE
ETAPA COLONIAL DE CHILE
 
Dialnet entre larazony-elcorazon-3714169
Dialnet entre larazony-elcorazon-3714169Dialnet entre larazony-elcorazon-3714169
Dialnet entre larazony-elcorazon-3714169
 
Negros,mulatos cgna
Negros,mulatos cgnaNegros,mulatos cgna
Negros,mulatos cgna
 
Estefania3
Estefania3Estefania3
Estefania3
 

Más de Aitor Pagalday

Presentación Tesis Doctoral
Presentación Tesis DoctoralPresentación Tesis Doctoral
Presentación Tesis Doctoral
Aitor Pagalday
 
5. analisis de casos erakundeen legedia
5.  analisis de casos erakundeen legedia5.  analisis de casos erakundeen legedia
5. analisis de casos erakundeen legediaAitor Pagalday
 
4. errespontsabilitate zibil eta penala
4.  errespontsabilitate  zibil eta penala4.  errespontsabilitate  zibil eta penala
4. errespontsabilitate zibil eta penalaAitor Pagalday
 
Educación emocional el mundo 2012[1]
Educación emocional   el mundo 2012[1]Educación emocional   el mundo 2012[1]
Educación emocional el mundo 2012[1]Aitor Pagalday
 
Comunicación congreso Granada 2011
Comunicación congreso Granada 2011Comunicación congreso Granada 2011
Comunicación congreso Granada 2011Aitor Pagalday
 
Artículo de la comunicación
Artículo de la comunicaciónArtículo de la comunicación
Artículo de la comunicaciónAitor Pagalday
 
El desarrollo de las competencias aprender a aprender mediante los PCD
El desarrollo de las competencias aprender a aprender mediante los PCDEl desarrollo de las competencias aprender a aprender mediante los PCD
El desarrollo de las competencias aprender a aprender mediante los PCDAitor Pagalday
 
La historia de los hombres (Josep Fontana)
La historia de los hombres (Josep Fontana)La historia de los hombres (Josep Fontana)
La historia de los hombres (Josep Fontana)Aitor Pagalday
 
Comentario de los datos de la producción cerealista en el arzobispado de Tole...
Comentario de los datos de la producción cerealista en el arzobispado de Tole...Comentario de los datos de la producción cerealista en el arzobispado de Tole...
Comentario de los datos de la producción cerealista en el arzobispado de Tole...Aitor Pagalday
 
Revista de educación ambiental El paisaje y su didactica a traves de los prin...
Revista de educación ambiental El paisaje y su didactica a traves de los prin...Revista de educación ambiental El paisaje y su didactica a traves de los prin...
Revista de educación ambiental El paisaje y su didactica a traves de los prin...Aitor Pagalday
 
Lurralde artículo del trabajo de investigación Los PCD en la didactica de lo...
Lurralde artículo del trabajo de investigación Los PCD en la didactica  de lo...Lurralde artículo del trabajo de investigación Los PCD en la didactica  de lo...
Lurralde artículo del trabajo de investigación Los PCD en la didactica de lo...Aitor Pagalday
 
Los gremios en la España del Antiguo Régimen
Los gremios en la España del Antiguo RégimenLos gremios en la España del Antiguo Régimen
Los gremios en la España del Antiguo RégimenAitor Pagalday
 
Iber artículo del trabajo de investigación Los Principios Científico Didáctic...
Iber artículo del trabajo de investigación Los Principios Científico Didáctic...Iber artículo del trabajo de investigación Los Principios Científico Didáctic...
Iber artículo del trabajo de investigación Los Principios Científico Didáctic...Aitor Pagalday
 
Datos de la producción cerealista en el arzobispado de Toledo en el siglo XVII
Datos de la producción cerealista en el arzobispado de Toledo en el siglo XVIIDatos de la producción cerealista en el arzobispado de Toledo en el siglo XVII
Datos de la producción cerealista en el arzobispado de Toledo en el siglo XVIIAitor Pagalday
 
Monográfico sobre Pierre Villar
Monográfico sobre Pierre VillarMonográfico sobre Pierre Villar
Monográfico sobre Pierre VillarAitor Pagalday
 
Presentation PCD in the Landscape teaching
Presentation PCD in the Landscape teachingPresentation PCD in the Landscape teaching
Presentation PCD in the Landscape teaching
Aitor Pagalday
 
Metodologietan formakuntza HUHEZI Hezkuntza Masterra
Metodologietan formakuntza HUHEZI Hezkuntza MasterraMetodologietan formakuntza HUHEZI Hezkuntza Masterra
Metodologietan formakuntza HUHEZI Hezkuntza Masterra
Aitor Pagalday
 

Más de Aitor Pagalday (20)

Presentación Tesis Doctoral
Presentación Tesis DoctoralPresentación Tesis Doctoral
Presentación Tesis Doctoral
 
5. analisis de casos erakundeen legedia
5.  analisis de casos erakundeen legedia5.  analisis de casos erakundeen legedia
5. analisis de casos erakundeen legedia
 
4. errespontsabilitate zibil eta penala
4.  errespontsabilitate  zibil eta penala4.  errespontsabilitate  zibil eta penala
4. errespontsabilitate zibil eta penala
 
Educación emocional el mundo 2012[1]
Educación emocional   el mundo 2012[1]Educación emocional   el mundo 2012[1]
Educación emocional el mundo 2012[1]
 
Comunicación congreso Granada 2011
Comunicación congreso Granada 2011Comunicación congreso Granada 2011
Comunicación congreso Granada 2011
 
Artículo de la comunicación
Artículo de la comunicaciónArtículo de la comunicación
Artículo de la comunicación
 
Presentación
PresentaciónPresentación
Presentación
 
El desarrollo de las competencias aprender a aprender mediante los PCD
El desarrollo de las competencias aprender a aprender mediante los PCDEl desarrollo de las competencias aprender a aprender mediante los PCD
El desarrollo de las competencias aprender a aprender mediante los PCD
 
La historia de los hombres (Josep Fontana)
La historia de los hombres (Josep Fontana)La historia de los hombres (Josep Fontana)
La historia de los hombres (Josep Fontana)
 
Comentario de los datos de la producción cerealista en el arzobispado de Tole...
Comentario de los datos de la producción cerealista en el arzobispado de Tole...Comentario de los datos de la producción cerealista en el arzobispado de Tole...
Comentario de los datos de la producción cerealista en el arzobispado de Tole...
 
Revista de educación ambiental El paisaje y su didactica a traves de los prin...
Revista de educación ambiental El paisaje y su didactica a traves de los prin...Revista de educación ambiental El paisaje y su didactica a traves de los prin...
Revista de educación ambiental El paisaje y su didactica a traves de los prin...
 
Lurralde artículo del trabajo de investigación Los PCD en la didactica de lo...
Lurralde artículo del trabajo de investigación Los PCD en la didactica  de lo...Lurralde artículo del trabajo de investigación Los PCD en la didactica  de lo...
Lurralde artículo del trabajo de investigación Los PCD en la didactica de lo...
 
Los gremios en la España del Antiguo Régimen
Los gremios en la España del Antiguo RégimenLos gremios en la España del Antiguo Régimen
Los gremios en la España del Antiguo Régimen
 
Iber artículo del trabajo de investigación Los Principios Científico Didáctic...
Iber artículo del trabajo de investigación Los Principios Científico Didáctic...Iber artículo del trabajo de investigación Los Principios Científico Didáctic...
Iber artículo del trabajo de investigación Los Principios Científico Didáctic...
 
Fichero bibliografico
Fichero bibliograficoFichero bibliografico
Fichero bibliografico
 
Guerra de Granada
Guerra de GranadaGuerra de Granada
Guerra de Granada
 
Datos de la producción cerealista en el arzobispado de Toledo en el siglo XVII
Datos de la producción cerealista en el arzobispado de Toledo en el siglo XVIIDatos de la producción cerealista en el arzobispado de Toledo en el siglo XVII
Datos de la producción cerealista en el arzobispado de Toledo en el siglo XVII
 
Monográfico sobre Pierre Villar
Monográfico sobre Pierre VillarMonográfico sobre Pierre Villar
Monográfico sobre Pierre Villar
 
Presentation PCD in the Landscape teaching
Presentation PCD in the Landscape teachingPresentation PCD in the Landscape teaching
Presentation PCD in the Landscape teaching
 
Metodologietan formakuntza HUHEZI Hezkuntza Masterra
Metodologietan formakuntza HUHEZI Hezkuntza MasterraMetodologietan formakuntza HUHEZI Hezkuntza Masterra
Metodologietan formakuntza HUHEZI Hezkuntza Masterra
 

Último

1º GRADO CONCLUSIONES DESCRIPTIVAS PRIMARIA.docx
1º GRADO CONCLUSIONES DESCRIPTIVAS  PRIMARIA.docx1º GRADO CONCLUSIONES DESCRIPTIVAS  PRIMARIA.docx
1º GRADO CONCLUSIONES DESCRIPTIVAS PRIMARIA.docx
FelixCamachoGuzman
 
Automatización de proceso de producción de la empresa Gloria SA (1).pptx
Automatización de proceso de producción de la empresa Gloria SA (1).pptxAutomatización de proceso de producción de la empresa Gloria SA (1).pptx
Automatización de proceso de producción de la empresa Gloria SA (1).pptx
GallardoJahse
 
CONCLUSIONES-DESCRIPTIVAS NIVEL PRIMARIA
CONCLUSIONES-DESCRIPTIVAS NIVEL PRIMARIACONCLUSIONES-DESCRIPTIVAS NIVEL PRIMARIA
CONCLUSIONES-DESCRIPTIVAS NIVEL PRIMARIA
BetzabePecheSalcedo1
 
evalaución de reforzamiento de cuarto de secundaria de la competencia lee
evalaución de reforzamiento de cuarto de secundaria de la competencia leeevalaución de reforzamiento de cuarto de secundaria de la competencia lee
evalaución de reforzamiento de cuarto de secundaria de la competencia lee
MaribelGaitanRamosRa
 
3° UNIDAD 3 CUIDAMOS EL AMBIENTE RECICLANDO EN FAMILIA 933623393 PROF YESSENI...
3° UNIDAD 3 CUIDAMOS EL AMBIENTE RECICLANDO EN FAMILIA 933623393 PROF YESSENI...3° UNIDAD 3 CUIDAMOS EL AMBIENTE RECICLANDO EN FAMILIA 933623393 PROF YESSENI...
3° UNIDAD 3 CUIDAMOS EL AMBIENTE RECICLANDO EN FAMILIA 933623393 PROF YESSENI...
rosannatasaycoyactay
 
CAPACIDADES SOCIOMOTRICES LENGUAJE, INTROYECCIÓN, INTROSPECCION
CAPACIDADES SOCIOMOTRICES LENGUAJE, INTROYECCIÓN, INTROSPECCIONCAPACIDADES SOCIOMOTRICES LENGUAJE, INTROYECCIÓN, INTROSPECCION
CAPACIDADES SOCIOMOTRICES LENGUAJE, INTROYECCIÓN, INTROSPECCION
MasielPMP
 
INFORME MINEDU DEL PRIMER SIMULACRO 2024.pdf
INFORME MINEDU DEL PRIMER SIMULACRO 2024.pdfINFORME MINEDU DEL PRIMER SIMULACRO 2024.pdf
INFORME MINEDU DEL PRIMER SIMULACRO 2024.pdf
Alejandrogarciapanta
 
CALENDARIZACION DEL MES DE JUNIO - JULIO 24
CALENDARIZACION DEL MES DE JUNIO - JULIO 24CALENDARIZACION DEL MES DE JUNIO - JULIO 24
CALENDARIZACION DEL MES DE JUNIO - JULIO 24
auxsoporte
 
True Mother's Speech at THE PENTECOST SERVICE..pdf
True Mother's Speech at THE PENTECOST SERVICE..pdfTrue Mother's Speech at THE PENTECOST SERVICE..pdf
True Mother's Speech at THE PENTECOST SERVICE..pdf
Mercedes Gonzalez
 
CUENTO EL TIGRILLO DESOBEDIENTE PARA INICIAL
CUENTO EL TIGRILLO DESOBEDIENTE PARA INICIALCUENTO EL TIGRILLO DESOBEDIENTE PARA INICIAL
CUENTO EL TIGRILLO DESOBEDIENTE PARA INICIAL
DivinoNioJess885
 
PRÁCTICAS PEDAGOGÍA.pdf_Educación Y Sociedad_AnaFernández
PRÁCTICAS PEDAGOGÍA.pdf_Educación Y Sociedad_AnaFernándezPRÁCTICAS PEDAGOGÍA.pdf_Educación Y Sociedad_AnaFernández
PRÁCTICAS PEDAGOGÍA.pdf_Educación Y Sociedad_AnaFernández
Ruben53283
 
Friedrich Nietzsche. Presentación de 2 de Bachillerato.
Friedrich Nietzsche. Presentación de 2 de Bachillerato.Friedrich Nietzsche. Presentación de 2 de Bachillerato.
Friedrich Nietzsche. Presentación de 2 de Bachillerato.
pablomarin116
 
Educar por Competencias GS2 Ccesa007.pdf
Educar por Competencias GS2 Ccesa007.pdfEducar por Competencias GS2 Ccesa007.pdf
Educar por Competencias GS2 Ccesa007.pdf
Demetrio Ccesa Rayme
 
El fundamento del gobierno de Dios. El amor
El fundamento del gobierno de Dios. El amorEl fundamento del gobierno de Dios. El amor
El fundamento del gobierno de Dios. El amor
Alejandrino Halire Ccahuana
 
Texto_de_Aprendizaje-1ro_secundaria-2024.pdf
Texto_de_Aprendizaje-1ro_secundaria-2024.pdfTexto_de_Aprendizaje-1ro_secundaria-2024.pdf
Texto_de_Aprendizaje-1ro_secundaria-2024.pdf
ClaudiaAlcondeViadez
 
Testimonio Paco Z PATRONATO_Valencia_24.pdf
Testimonio Paco Z PATRONATO_Valencia_24.pdfTestimonio Paco Z PATRONATO_Valencia_24.pdf
Testimonio Paco Z PATRONATO_Valencia_24.pdf
Txema Gs
 
Junio 2024 Fotocopiables Ediba actividades
Junio 2024 Fotocopiables Ediba actividadesJunio 2024 Fotocopiables Ediba actividades
Junio 2024 Fotocopiables Ediba actividades
cintiat3400
 
El Liberalismo económico en la sociedad y en el mundo
El Liberalismo económico en la sociedad y en el mundoEl Liberalismo económico en la sociedad y en el mundo
El Liberalismo económico en la sociedad y en el mundo
SandraBenitez52
 
Asistencia Tecnica Cultura Escolar Inclusiva Ccesa007.pdf
Asistencia Tecnica Cultura Escolar Inclusiva Ccesa007.pdfAsistencia Tecnica Cultura Escolar Inclusiva Ccesa007.pdf
Asistencia Tecnica Cultura Escolar Inclusiva Ccesa007.pdf
Demetrio Ccesa Rayme
 
Fase 3; Estudio de la Geometría Analítica
Fase 3; Estudio de la Geometría AnalíticaFase 3; Estudio de la Geometría Analítica
Fase 3; Estudio de la Geometría Analítica
YasneidyGonzalez
 

Último (20)

1º GRADO CONCLUSIONES DESCRIPTIVAS PRIMARIA.docx
1º GRADO CONCLUSIONES DESCRIPTIVAS  PRIMARIA.docx1º GRADO CONCLUSIONES DESCRIPTIVAS  PRIMARIA.docx
1º GRADO CONCLUSIONES DESCRIPTIVAS PRIMARIA.docx
 
Automatización de proceso de producción de la empresa Gloria SA (1).pptx
Automatización de proceso de producción de la empresa Gloria SA (1).pptxAutomatización de proceso de producción de la empresa Gloria SA (1).pptx
Automatización de proceso de producción de la empresa Gloria SA (1).pptx
 
CONCLUSIONES-DESCRIPTIVAS NIVEL PRIMARIA
CONCLUSIONES-DESCRIPTIVAS NIVEL PRIMARIACONCLUSIONES-DESCRIPTIVAS NIVEL PRIMARIA
CONCLUSIONES-DESCRIPTIVAS NIVEL PRIMARIA
 
evalaución de reforzamiento de cuarto de secundaria de la competencia lee
evalaución de reforzamiento de cuarto de secundaria de la competencia leeevalaución de reforzamiento de cuarto de secundaria de la competencia lee
evalaución de reforzamiento de cuarto de secundaria de la competencia lee
 
3° UNIDAD 3 CUIDAMOS EL AMBIENTE RECICLANDO EN FAMILIA 933623393 PROF YESSENI...
3° UNIDAD 3 CUIDAMOS EL AMBIENTE RECICLANDO EN FAMILIA 933623393 PROF YESSENI...3° UNIDAD 3 CUIDAMOS EL AMBIENTE RECICLANDO EN FAMILIA 933623393 PROF YESSENI...
3° UNIDAD 3 CUIDAMOS EL AMBIENTE RECICLANDO EN FAMILIA 933623393 PROF YESSENI...
 
CAPACIDADES SOCIOMOTRICES LENGUAJE, INTROYECCIÓN, INTROSPECCION
CAPACIDADES SOCIOMOTRICES LENGUAJE, INTROYECCIÓN, INTROSPECCIONCAPACIDADES SOCIOMOTRICES LENGUAJE, INTROYECCIÓN, INTROSPECCION
CAPACIDADES SOCIOMOTRICES LENGUAJE, INTROYECCIÓN, INTROSPECCION
 
INFORME MINEDU DEL PRIMER SIMULACRO 2024.pdf
INFORME MINEDU DEL PRIMER SIMULACRO 2024.pdfINFORME MINEDU DEL PRIMER SIMULACRO 2024.pdf
INFORME MINEDU DEL PRIMER SIMULACRO 2024.pdf
 
CALENDARIZACION DEL MES DE JUNIO - JULIO 24
CALENDARIZACION DEL MES DE JUNIO - JULIO 24CALENDARIZACION DEL MES DE JUNIO - JULIO 24
CALENDARIZACION DEL MES DE JUNIO - JULIO 24
 
True Mother's Speech at THE PENTECOST SERVICE..pdf
True Mother's Speech at THE PENTECOST SERVICE..pdfTrue Mother's Speech at THE PENTECOST SERVICE..pdf
True Mother's Speech at THE PENTECOST SERVICE..pdf
 
CUENTO EL TIGRILLO DESOBEDIENTE PARA INICIAL
CUENTO EL TIGRILLO DESOBEDIENTE PARA INICIALCUENTO EL TIGRILLO DESOBEDIENTE PARA INICIAL
CUENTO EL TIGRILLO DESOBEDIENTE PARA INICIAL
 
PRÁCTICAS PEDAGOGÍA.pdf_Educación Y Sociedad_AnaFernández
PRÁCTICAS PEDAGOGÍA.pdf_Educación Y Sociedad_AnaFernándezPRÁCTICAS PEDAGOGÍA.pdf_Educación Y Sociedad_AnaFernández
PRÁCTICAS PEDAGOGÍA.pdf_Educación Y Sociedad_AnaFernández
 
Friedrich Nietzsche. Presentación de 2 de Bachillerato.
Friedrich Nietzsche. Presentación de 2 de Bachillerato.Friedrich Nietzsche. Presentación de 2 de Bachillerato.
Friedrich Nietzsche. Presentación de 2 de Bachillerato.
 
Educar por Competencias GS2 Ccesa007.pdf
Educar por Competencias GS2 Ccesa007.pdfEducar por Competencias GS2 Ccesa007.pdf
Educar por Competencias GS2 Ccesa007.pdf
 
El fundamento del gobierno de Dios. El amor
El fundamento del gobierno de Dios. El amorEl fundamento del gobierno de Dios. El amor
El fundamento del gobierno de Dios. El amor
 
Texto_de_Aprendizaje-1ro_secundaria-2024.pdf
Texto_de_Aprendizaje-1ro_secundaria-2024.pdfTexto_de_Aprendizaje-1ro_secundaria-2024.pdf
Texto_de_Aprendizaje-1ro_secundaria-2024.pdf
 
Testimonio Paco Z PATRONATO_Valencia_24.pdf
Testimonio Paco Z PATRONATO_Valencia_24.pdfTestimonio Paco Z PATRONATO_Valencia_24.pdf
Testimonio Paco Z PATRONATO_Valencia_24.pdf
 
Junio 2024 Fotocopiables Ediba actividades
Junio 2024 Fotocopiables Ediba actividadesJunio 2024 Fotocopiables Ediba actividades
Junio 2024 Fotocopiables Ediba actividades
 
El Liberalismo económico en la sociedad y en el mundo
El Liberalismo económico en la sociedad y en el mundoEl Liberalismo económico en la sociedad y en el mundo
El Liberalismo económico en la sociedad y en el mundo
 
Asistencia Tecnica Cultura Escolar Inclusiva Ccesa007.pdf
Asistencia Tecnica Cultura Escolar Inclusiva Ccesa007.pdfAsistencia Tecnica Cultura Escolar Inclusiva Ccesa007.pdf
Asistencia Tecnica Cultura Escolar Inclusiva Ccesa007.pdf
 
Fase 3; Estudio de la Geometría Analítica
Fase 3; Estudio de la Geometría AnalíticaFase 3; Estudio de la Geometría Analítica
Fase 3; Estudio de la Geometría Analítica
 

Los municipios castellanos en el siglo XVIII

  • 1. Los municipios castellanos en el siglo XVIII UNIVERSIDAD NACIONAL DE EDUCACIÖN A DISTANCIA (MADRID) DEPARTAMENTO DE HISTORIA MEDIAEVAL, MODERNA Y CC. Y TT. HISTORIOGRÁFICAS CURSO DOCTORADO LOS MUNICIPIOS CASTELLANOS EN EL SIGLO XVIII Trabajo Monográfico presentado por Don Aitor Pagalday Muñoz. Y dirigido por la profesora Doctora Laura Santolaya Heredero. La profesora El autor Eskoriatza, a 30 de Abril de 2005 2
  • 2. Los municipios castellanos en el siglo XVIII INTRODUCCIÓN ..................................................................................................... 4 1. TÉRMINO Y COMPONENTE HUMANO ................................................ 5 1.1. Estado seglar y eclesiástico............................................................................ 6 1.1.1. Estado seglar............................................................................................... 6 1.1.2. Estado eclesiástico...................................................................................... 7 1.2. Población activa ............................................................................................. 8 2. LA RIQUEZA .................................................................................................. 10 2.1. Riqueza inmobiliaria ................................................................................... 10 2.1.1. Las tierras ................................................................................................. 10 2.1.2 Las casas ................................................................................................... 11 2.2. Riqueza mobiliaria....................................................................................... 11 3. LAS INSTITUCIONES ................................................................................... 13 3.1. Los gremios................................................................................................... 13 3.2. Hospitales y beneficencia............................................................................. 14 3.3. Los colegios ................................................................................................... 15 4. EL GOBIERNO MUNICIPAL....................................................................... 16 4.1. Composición del mismo............................................................................... 16 4.2. Competencias................................................................................................ 17 4.2.1. Autoridades derivadas del poder regio .................................................. 17 4.2.2. Los cabildos .............................................................................................. 18 4.2.3. Resto de oficios ......................................................................................... 19 CONCLUSIÓN ........................................................................................................ 20 BIBLIOGRAFIA...................................................................................................... 21 FUENTES DOCUMENTALES.............................................................................. 23 3
  • 3. Los municipios castellanos en el siglo XVIII INTRODUCCIÓN “... que acaece que quando los dichos fieles han de nombrar y escoxer a los dichos offiçiales que los dichos bandos y la mayor parte de la comunidad de bos el dicho conçejo que bos armades...” Es así como, este escrito del archivo municipal de Eskoriatza (Guizpúzcoa), nos da información al respecto de cómo se efectuaba el proceso de nombramiento de los miembros del gobierno municipal. Este trabajo, no pretende ser una exhaustiva investigación sobre los municipios castellanos durante el siglo XVIII, por un lado por la premura de tiempo y por otro por la amplitud del tema a investigar (temporal y espacialmente). Por ello, realizaremos una breve síntesis de cómo estaban estructurados las localidades castellanas durante el citado siglo. El trabajo se compone de cuatro grandes partes. En la primera de ellas nos centramos en los aspectos sociales y demográficos de los municipios. En la segunda de ellas, son los aspectos económicos los que se tratan, tomando las riquezas inmobiliarias y mobiliarias como base. En la tercera parte, las instituciones más importantes son las que centran nuestra atención. Y en la cuarta y última parte, es el gobierno municipal y su funcionamiento donde nos centramos. Para realizar esta síntesis, nos basaremos en dos tipos de fuente de información. Por un lado consultaremos las fuentes y la información que nos ofrezca el catastro de la ensenada y por otro lado, consultaremos la bibliografía ya existente sobre nuestro tema de estudio. 4
  • 4. Los municipios castellanos en el siglo XVIII 1. TÉRMINO Y COMPONENTE HUMANO Para comenzar con el estudio sobre los municipios castellanos durante el siglo XVIII, sería conveniente señalar el carácter socio jurídico desigual que solían tener algunos municipios y otros durante toda la Edad Moderna como herencia del Medievo. Así las cosas, podemos señalar que estos, podían dividirse entre municipios de realengo y de señorío. Entre los primeros, solía ser el Rey la autoridad máxima y entre los segundos, era un noble (señor), quien gobernaba en nombre del monarca. De todos modos, a lo largo del siglo XVIII, los municipios de señorío fueron desapareciendo en favor de los de realengos. Por otro lado hay que señalar que los municipios solían catalogarse de diferente manera. Podían estar agrupados en ciudades, villas o aldeas. A lo largo de la Edad Moderna, fueron las dos primeras condiciones jurídicas las que más rápidamente se fueron multiplicando. La razón principal de esto, lo explica muy bien Jose Angel Achón Insausti en su estudio sobre la villa de Mondragón, al señalar que la condición jurídica que otorgaba el título de villa, suponía que la autoridad hasta entonces dominante sobre ese municipio dejaba de tener vigencia pasando así al dominio real. Hay que señalar que en la mayoría de las ocasiones, los municipios se alegraban de su nueva condición de villa o ciudad porque su primera y más inmediata consecuencia solía ser el descenso de la presión fiscal sobre sus vecinos. En lo que al componente humano se refiere, tanto seglar como eclesiástico de los municipios castellanos durante el siglo XVIII, sería conveniente hacer una distinción entre los municipios cercanos a la costa y los del interior. De todos modos, hay que señalar que a nivel global, podría decirse que el siglo XVIII, fue un siglo de incremento poblacional. Sin embargo, hubo municipios del interior de Castilla, donde este incremento no fue tal, hablando en algunos casos incluso de descenso más que de incremento poblacional. Una clara muestra de ello tenemos el estudio realizado por Vicente Pérez Moreda y David Sven Reher1, donde se hace hincapié en mostrar mediante diferentes tablas poblacionales como las regiones del interior peninsular, principalmente las ubicadas en ambas mesetas Como Castilla, León y Extremadura, arrojan un saldo poblacional negativo. En lo que a las regiones periféricas hace referencia, según se desprende de este mismo estudio, queda bien a las claras que son principalmente Asturias, Murcia, Cataluña y Galicia las que mayor incremente poblacional registraron a lo largo del siglo XVIII. Para explicar el porqué de esta situación, hay que remontarse al siglo anterior, al siglo XVII concretamente. En la España del interior, la depresión demográfica del siglo XVII, duró más de lo normal y sus efectos negativos perduraron durante los dos primeros tercios del siglo XVIII. Sin embargo la mortalidad catastrófica por 1 Pérez Moreda, Vicente y Sven Reher, David: Demografía histórica de España. Madrid, 1988. 5
  • 5. Los municipios castellanos en el siglo XVIII epidemias, pestes, etc. no fue sino un factor mas que influyó en el estancamiento demográfico. El elemento que mejor explica esta coyuntura, es que ambas mesetas fueron presas, durante el reinado de los Austrias menores, de una crisis moral y material, mucho peor que cualquier otra crisis epidémica. Por todo esto que estamos comentando, podemos señalar que el siglo XVIII fue la trágica prolongación del terrible siglo XVII que agotó el interior peninsular. Otra de las razones que explica el estancamiento demográfico, del que venimos comentando, es la situación de la actividad económica. La falta de calidad y el distanciamiento entre los precios hispanos y los europeos, arruinaron la producción artesana y manufacturera de Castilla del siglo XVIII. Este declive, tuvo como inmediata consecuencia, que la economía de ciudades castellanas como Salamanca, Cuenca, Burgos, Toledo y algunas otras, cayera en picado a partir del reinado de Felipe II. A esta quiebra industrial, artesanal y manufacturera, le siguió la comercial y al final, también la de los servicios, por lo que los ingresos del fisco se vieron comprometidos muy seriamente. Como consecuencia de ello, se buscó en la agricultura, de productividad sostenida, la tabla de salvación del sistema socioeconómico. No pasaron muchos años hasta que la presión fiscal y señorial sobre los trabajadores de la tierra, resultaron ser insoportables, a lo cual se le unió una excesiva inversión especulativa, como lo fueron los prestamos a usuarios de tipo hipotecario. Por ello, cabe deducir que la situación de los agricultores, también empeoró en muy pocos años de manera muy considerable. Podemos señalar por lo tanto, que el declive rural, partió de la “ruina de las actividades secundarias del mundo urbano”. Las dos mesetas se despoblaron debido a que los campesinos se vieron obligados a emigrar: los destinos fueron varios entre los que se destacaron América, las posesiones europeas y la periferia peninsular. 1.1. Estado seglar y eclesiástico 1.1.1. Estado seglar A la hora de cuantificar el número de habitantes con los que contaban los municipios castellanos durante el siglo XVIII, hay que señalar que las fuentes mas fiables son los censos municipales. Sin embargo, los censos de esta época no resultan muy fiables, debido sobretodo a la mentalidad tradicional de la época, por la cual trataban de ocultar la realidad a las autoridades por miedo a las actuaciones o intervenciones fiscales. Otro pero que se les pone tradicionalmente al uso de los censos como fuente de información, es la dificultad que presentan para poder hacer análisis comparativos entre ellos. La razón principal que explica esta crítica, es la falta de un mismo criterio para todos los censos. Así por ejemplo, a la hora de componer agrupaciones sociales, 6
  • 6. Los municipios castellanos en el siglo XVIII a los historiadores se nos presentan múltiples dificultades para poder hacer un análisis fiable. A pesar de todo ello, si que podemos hacer una clasificación de los principales grupos sociales de los que solía componerse un municipio en esta época: • Cargos y oficinas reales. • Comerciantes. • Médicos. • Dependientes seglares de la Iglesia. • Oficios y artesanos. • Labradores. • Jornales. • Viudas. • Pobres. Esta clasificación puede resultarnos útil, para la realización de estudios demográficos sobre ciudades de cierto tamaño y población. Tal y como se ha señalado con anterioridad, la población castellana durante el siglo XVIII, a pesar de la pequeña recuperación que hubo, era considerablemente baja para la amplia extensión que ocupaba el reino castellano. Una de las razones que explica esta situación, es la baja natalidad de la época. La media de hijos por matrimonio era relativamente baja, exactamente de tan solo 1,26 hijos por matrimonio. Una de las causas de este índice tan bajo, era la edad media de los matrimonios. Resultaba común que las parejas contrajeran matrimonio entre los 35 y los 40 años, por lo que les quedaba muy poco tiempo de edad fértil. A este respecto, hay que señalar que este bajo promedio de hijos por matrimonio no estaba directamente relacionado con el nivel de renta per capita de las familias. Así por ejemplo, las familias con unos niveles de renta más bajos, oscilaban entre los 1,1 hijos por matrimonio de las familias de labradores y los 1,2 hijos de las familias dependientes de la Iglesia y jornaleros. Por otro lado, las familias con niveles de renta más altos, tan solo llegaban a los 1,7 hijos por matrimonio. De todos estos datos, podemos deducir, que cuando se habla durante la Edad Moderna de la gran extensión de las familias, no se hablaba contabilizando tan solo a los miembros de las familias nucleares, sino que también se contabilizaban, abuelos, tíos, cuñados, suegros, sobrinos y nietos. 1.1.2. Estado eclesiástico A la hora de hablar del estado eclesiástico en los municipios castellanos, hay que señalar antes de nada, que existían notables diferencias entre unos municipios y otros según el carácter más o menos eclesiástico de estos. Así por ejemplo la proporción del estado eclesiástico con relación a la población total en un municipio que no lo era, cambiaba significativamente en función del carácter mas o menos religioso del mismo. 7
  • 7. Los municipios castellanos en el siglo XVIII Por otro lado, en lo que al estado eclesiástico propiamente dicho hace referencia, este se dividía en dos grupos, por un lado el estado eclesiástico secular y por el otro el estado eclesiástico regular. Habitualmente, el número de componentes del estado eclesiástico regular, solía ser mayor que el del estado eclesiástico secular. Y en cuanto a la distinción por sexos hace referencia, en el clero secular, la comunidad femenina solía ser más numerosa que la masculina, mientras que ocurría lo contrario en el clero regular. A pesar de todo esto, la composición exacta y con cifras exactas del censo eclesiástico es complicada de cuantificar e investigar. La principal causa de esta complicación, radica en que muchos vecinos de los municipios solían estar censados tanto en el censo regular como en el censo secular, por lo que se daba una duplicado de nombres. Por ello y para no incurrir en este error, se debería hacer una meticulosa y exhaustiva investigación de nombres tanto masculinos como femeninos de ambos censos. 1.2. Población activa Denominamos población activa, a aquella parte de la población que se encontraba ocupada en una actividad laboral remunerada. Por ello, no es tarea sencilla cuantificar de forma precisa la población activa real de los municipios castellanos durante el siglo XVIII. Dentro de este grupo, entrarían desde labradores y tenderos, hasta artesanos junto con sus aprendices y los trabajadores de la administración. Sin embargo, resulta obvio que en esta relación de empleos u oficios, no está incluida, otra fuerza de trabajo, que aunque de forma oficial no aparecía registrada, si que realizaban una inestimable labor en el quehacer diario de las familias. Hablamos de las mujeres, de los niños y de los adolescentes que no trabajaban como aprendices de un oficio. En las zonas rurales, la mayor parte de la población activa, se dedicaba a las labores de labranza de la tierra. En un segundo lugar, podríamos situar a aquellos trabajadores que se dedicaban a la artesanía y en tercer y último lugar en cuanto a número hace referencia, situaríamos a los trabajadores de la administración. En las zonas urbanas por el contrario, eran los oficios artesanos los que cobraban un mayor protagonismo en detrimento de los labradores, mientras que los trabajadores de la administración quedaban en término medio entre los dos grupos de trabajadores anteriores. A la hora de hacer una clasificación de la población activa de las ciudades dedicada a los oficios, es conveniente hacerla tomando como indicador el grado de necesidad que resultaba el trabajo que ellos desarrollaban para el resto de la población. Así las cosas, podríamos clasificar la población activa de un municipio castellano en tres grandes grupos. En un primer grupo, se encontrarían aquellos trabajadores cuyo trabajo resultaba de primera necesidad para los ciudadanos. Por ello, denominaremos a estos 8
  • 8. Los municipios castellanos en el siglo XVIII oficios como primarios. Entre estos, podríamos destacar los oficios de herrero, albañil, carpintero, etc. En un segundo grupo, se encontrarían los que denominaremos oficios secundarios o de segundas necesidades. Estos oficios, consistían básicamente en el perfeccionamiento de la labor que hacían los trabajadores de los oficios primarios. Este segundo gran grupo, podríamos subdividirlo en diferentes ámbitos de actuación: Los relacionados con la viviendo, como lo eran el cantero o el yesero; los relacionados con la vestimenta, como el tintorero o el peinador; y los relacionados con la producción del menaje para la casa, como el alfarero, tinajero, etc. En un tercer grupo se encontraban los oficios que dependían de la situación económica del resto de personas. Así por ejemplo si la situación era económicamente buena, y la gente gozaba de excedente para poder tener otra fuente de ingreso, los trabajadores que incluimos en este grupo se veían rápidamente beneficiados de esa buena coyuntura económica. Entre estos oficios destacamos los de pastelero, confitero, relojero, cordonero, etc. Más adelante se analizara con mayor detenimiento el tema de los oficios, gremios, etc. y todo los que esto suponía para un municipio de la época. 9
  • 9. Los municipios castellanos en el siglo XVIII 2. LA RIQUEZA 2.1. Riqueza inmobiliaria La riqueza inmobiliaria con la que solían contar los municipios castellanos durante el siglo XVIII, se centraba principalmente en los campos, las tierras y las casas. 2.1.1. Las tierras Si comenzamos por analizar la tierra como riqueza inmobiliaria, hay que señalar que su valor era clave debido a que los sectores productivos existentes en los municipios estaban configurados y condicionados en gran medida por ella. Sin embargo, resulta complicado metodológicamente, calcular la riqueza real que creaba la tierra para un municipio, para ello, habría que delimitar y situar la distribución de las propiedades terrestres y sus rentas. La propiedad de la tierra de los municipios, solía estar dividida en dos grandes grupos. Por un lado las tierras pertenecientes al clero y por otro lado, las tierras pertenecientes al estado seglar. Las tierras del clero, a su vez se dividían entre las del clero secular y las del clero regular. En lo que a las propiedades del clero secular hace referencia, hay que señalar que se componían por las tierras cuya función era la de servir de mantenimiento a las personas que componían la institución por un lado, y por el otro, por las tierras destinadas al mantenimiento material. Las propiedades del clero regular por su parte, solía servir para la manutención tanto material como humana de la institución. En cuanto a la titularidad de las tierras, las del clero secular, podían ser indistintamente tanto individual como colectiva, no ocurría lo mismo con la del clero regular debido a que la titularidad mayoritaria, solía ser la colectiva. Las propiedades del estado seglar, estaba dividida en cuatro grandes grupos: Titulados, dones2, labradores y los bienes de los pueblos. En lo que a la titularidad de la propiedad se refiere, se dividía en dos grupos. Los titulares individuales por un lado, los cuales podían disponer libremente de la utilización de los bienes; y los titulares colectivos, que solían identificarse tanto con el colectivo propiamente dicho (era este el que disponía de ella), como con un individuo que era designado por el dicho colectivo. 2 Se denominaba como dones, a aquellas personas que sin formar una clase social identificada dentro del municipio, poseían un rango social distinto del pueblo llano en cada localidad. Este rango superior, se identificaba con la voz “don”, que precedía al nombre del dicho individuo. A nivel general podríamos decir que se trataba de un colectivo situado entre la nobleza urbana y el pueblo llano. Dentro de este grupo se encontraban colectivos tan heterogéneos como hidalgos rurales, algunos hijos segundones de familias nobles, profesionales liberales y labradores y comerciantes enriquecidos. 10
  • 10. Los municipios castellanos en el siglo XVIII 2.1.2 Las casas Como ocurría con la mayoría de las propiedades, las casas también estaban divididas entre las pertenecientes al estado seglar y las del estado eclesiástico. Al igual que con la propiedad de la tierra del estado seglar, las casas estaban repartidas entre las pertenecientes a los titulados, las de los dones y las de los no- dones. Los titulados, habitualmente solían ser los dueños de las casas más grandes de los municipios, pero en pocas ocasiones residían ellas. La razón de esta ausencia era básicamente su preferencia por residir más cerca de la Corte. Las casas pertenecientes a los dones por su parte, solían ser mayoría en los municipios, mientras que en un término medio quedaban, en cuanto al número de propiedades totales hacía referencia, los propietarios que ni eran titulados ni tampoco dones. Al igual que ocurre hoy en día, ser propietario de una casa o vivienda, brindaba la posibilidad a dichas personas disponer de una fuente de ingresos más. Los alquileres de las viviendas, solían oscilar en función de tres variables. Por un lado, el municipio en el que se encontraban; Por otro lado, la localización que poseían estas viviendas dentro del propio municipio; y por último, las características de la casa o vivienda. Así por ejemplo, tal y como señala Laura Santolaya en su estudio realizado sobre la ciudad de Toledo durante el siglo XVIII, la cuantía del alquiler de una vivienda solía rondar el 10% del valor de la vivienda3. Había situaciones, con el objetivo de abaratar el alquiler por ejemplo, en el que no se alquilaba una casa o vivienda al completo, sino que tan solo se alquilaba una habitación o una parte concreta de la casa. Las casas cuya propiedad era de los diferentes colectivos del estado eclesiástico, solía variar en numero total en función del cariz más o menos religioso del municipio. De este modo se explica, que en los municipios donde se encontraba la sede episcopal, solían tener una cariz mucho más religioso que los que no eran sede, lo cual se traducía en el número de viviendas más elevado pertenecientes al estado eclesiástico. 2.2. Riqueza mobiliaria Como eje de la propiedad mobiliaria, se encontraban las “rentas”. Denominamos renta, a la utilidad o beneficio que rendía una cosa, o de lo que ella se cobraba. Durante la época moderna en Castilla existían tres tipos de rentas principales: 3 SANTOLAYA, L.: Una ciudad del Antiguo Régimen: Toledo en el siglo XVIII (personas, propiedad y administración). Cuadernos de la UNED: Madrid, 1991. 11
  • 11. Los municipios castellanos en el siglo XVIII Censos, juros y tributos. Los tributos eran los “pagos de una pensión anual por un capital recibido en dinero, pero que estaba fijado sobre un determinado bien inmueble para asegurar su cobro; en este sentido, eran las tierras o las casas las que solían estar grabadas4. Los censos y los juros eran dos tipos de renta básicamente idénticas. Su diferencia radicaba en que mientras los censos se daban como consecuencia de los contratos efectuados entre particulares, los juros eran un tipo de renta en el que los contratos se efectuaban entre la Corona y los particulares. Por ello a los juros también se les denominaba censos reservativos, los cuales eran un “compromiso perpetuo para el que recibía la cantidad total, por el que se obligaba a pagar al oferente un dinero anual”5. Además de los censos reservativos o juros, también había censos consignativos, en los cuales el pago anual se encontraba ligado a un porcentaje sobre un capital. Con el tiempo, tal y como señala Santolaya comentando una cita de Donezar, la continua necesidad de dinero de la Corona castellana, llevo a esta a pedir dinero a particulares teniéndoles que pagar como reconocimiento por haber prestado este servicio, una cantidad anual. Estos pagos anuales, a pesar de que en un principio fuera vitalicio, con el tiempo se convirtieron en hereditarios. Sin embargo, los particulares para asegurarse el cobro de estos reconocimientos6, por ejemplo en el caso en el que en algún momento desde la tesorería real se dijese que no había dinero, situaban el “pago sobre la renta de un determinado sitio7. Además de estos tres tipo de rentas, existían otras que no eran tan frecuentes: Prestamos, derechos, arriendos de oficio, etc. 4 Op. Cit. Pag 172. 5 Op. Cit. Pag 172. 6 El juro, como censo reservativo que no era un interés sobre el capital, cesaba cuando el estado quería. 7 Op. Cit. Pag 172. 12
  • 12. Los municipios castellanos en el siglo XVIII 3. LAS INSTITUCIONES La sociedad castellana durante el siglo XVIII, con el objetivo de mejorar su funcionamiento, se estructuraba en base a unas instituciones. Estas, gestionaban los ámbitos más importantes de la sociedad de la época. Salvo la política, todas las demás, la economía, la sanidad y la educación. 3.1. Los gremios Los gremios eran asociaciones de personas con el mismo oficio o profesión. Sus orígenes se remontan a la Edad Media y solían estar compuestos por aprendices, oficiales y maestros. Los gremios se agrupaban en dos grandes bloques, por un lado los gremios comerciales y por el otro los gremios artesanales. Su principal diferencia era la distinta concepción que tenían de la realidad económica. Los gremios artesanales, trataban de buscar la mayor especialización de sus componentes mediante pruebas. Los gremios comerciales por su parte, defendían que la mejor técnica para el desarrollo, era la observación de la técnica comercial del propietario del negocio8. Otra de las diferencias que existía entre ambos tipos de gremio, era que mientras los gremios artesanales estaban necesitados de seguridad y por lo tanto podríamos considerarlos como conservadores, los comerciales, apostaban por arriesgar su dinero con el objetivo de obtener mayores beneficios. Otra de las cosas reseñables, era que mientras los asociados de los gremios artesanales no percibían a los otros asociados como competidores, los miembros de los gremios comerciales si lo hacían y como consecuencia de ello, trataban de actuar de forma independiente, en la medida de lo posible, para la obtención de la mayor cuantía de beneficio posible. Con todo ello, podemos señalar que los gremios perduraron en el tiempo durante tantos años, porque también repercutían positivamente en la sociedad como en el estado en general. Uno de los beneficios, y quizás el más importante, era que garantizaban la estabilidad social. Esto se explica porque la religiosidad de la institución, su sistema asistencial y la conservación moral de sus componentes, cortaban cualquier tipo de reivindicación de libertad9. Otro de los beneficios, era directamente para el estado. Con los gremios, el estado además de conseguir diversos datos estadísticos para políticas económicas y sociales posteriores, conseguía poseer una vía para que las reclamaciones de los trabajadores estuviesen perfectamente canalizadas. Es decir, que mediante los 8 VILLAS, S.: Los gremios malagueños, 1700-1746. Malaga, 1983. 9 CAPELLA, M. y MATILLA TASCÓN, A.: Los cinco gremios mayores de Madrid. Cámara de Comercio: Madrid, 1957. 13
  • 13. Los municipios castellanos en el siglo XVIII gremios, el estado conseguía disponer de una herramienta que actuaba como policía del sistema económico. Como tercer beneficio principal, y unido al anteriormente mencionado del sistema económico, los gremios actuaban como garantía del citado sistema. Aseguraban unos productos y servicios de calidad y con costos estables pero también podían ayudar materialmente a los habitantes en casos de extrema necesidad como catástrofes, hambrunas, epidemias, etc.10. Durante el siglo XVIII y con la aparición del movimiento ilustrado, la situación de estas asociaciones de trabajadores del mismo oficio, sufrió algunos cambios considerables. Para algunos investigadores, los gremios eran unos estímulos para la producción11, por el contrario para otros, resultaban ser un excesivo control de la libertad de producción12. Los ilustrados, principalmente a partir de mediados del siglo XVIII, veían a la institución gremial como un agente de control de la producción. La postura ilustrada, podemos considerarla como antigremial en toda regla. Veían a los gremios como herramientas o útiles tradicionales para consolidar las oligarquías hereditarias. Basaban su opinión en que los dirigentes gremiales trataban de limitar las libertades, tanto de producción como de toma de decisión, con el objetivo de imposibilitar el ascenso de nuevas personas a los puestos dirigentes y de poder. Los conflictos entre los ilustrados y los tradicionales, entorno a los gremios, no se hicieron esperar y mientras los primeros trataban de introducir nuevas normas para la organización de los gremios, los segundos trataban de mantener las estructuras tal cual estaban. 3.2. Hospitales y beneficencia Los hospitales en los municipios castellanos durante la Edad Moderna, eran instituciones eclesiásticas, debido a que eran los dirigentes eclesiásticos quienes debían dar los permisos correspondientes para la creación de un hospital, como respuesta a las peticiones realizadas por los interesados. En general, podríamos señalar que los hospitales tenían como objetivo principal, mirar por la piedad y la caridad del pueblo. Por ello, el concepto de beneficencia y el de hospital, estaban estrechamente ligados. A grandes rasgos, los hospitales además de servir para la cura de enfermos, servía también como asilo a desvalidos, albergue para pobres, de hospedaje para los peregrinos sin grandes medios económicos, etc. 10 MOLAS RIBALTA, P.: Los gremios barceloneses del siglo XVIII. Madrid, 1970. 11 Op. Cit. 12 DÍEZ, J. L. : Los gremios en la España imperial. Aldecoa S.A.: Madrid. 14
  • 14. Los municipios castellanos en el siglo XVIII Algunos hospitales, los más pequeños casi siempre, solían especializarse en una labor concreta, debido a que no contaban con medios suficientes para poder responder a todas las necesidades de piedad y caridad que solían tener los habitantes de los pueblos y los peregrinos. En lo que a la gestión de los hospitales hace referencia, hay que señalar que los fundadores del hospital nombraban un “equipo directivo” que se encargaba del gobierno del hospital y que debían de dar cuenta periódicamente a sus superiores sobre los pormenores de su gestión. Las rentas que se obtenían de los bienes del hospital, debían servir para pagar los salarios de los trabajadores que desempeñaban su labor en él y el resto para los gastos hospitalarios. Resulta curioso comprobar como en muchas cartas fundacionales de hospitales, se prohibía expresamente la posibilidad de sacar ningún objeto de culto del hospital con el fin de alquilarlo o venderlo. 3.3. Los colegios Cuando nos referimos a los colegios, hacemos referencia a todos aquellos centros dedicados a la enseñanza o docencia. Durante la Época Moderna, la ecuación estaba dividida, al igual que también lo esta hoy en día, dividida en diferentes etapas. Por un lado se encontraban los colegios de educación básica, conocidos como colegios de primeras letras y gramática. Por otro lado se encontraban los colegios de humanidades y por último y como tercer nivel, los colegios universitarios. Durante el siglo XVIII, la educación al no ser obligatoria, nos hacemos una pequeña idea de quienes podían disfrutar de recibir docencia colegial. La procedencia de los grupos estudiantiles, mayoritariamente eran hijos de familias acomodadas o estudiantes becados. Había también un importante tercer grupo de estudiantes denominados, fámulos, que realizaban pequeños trabajos a la vez que estudiaban para mejorar su situación económica. Los centros educativos, se localizaban principalmente en las urbes castellanas, básicamente porque era en las ciudades donde se encontraban la mayoría de clientes potenciales de estos centros. 15
  • 15. Los municipios castellanos en el siglo XVIII 4. EL GOBIERNO MUNICIPAL Existe disparidad de opiniones entre diferentes historiadores al respecto de la aparición de los primeros Ayuntamientos. Mientras que para algunos, los primeros ayuntamientos se crearon durante el siglo XIII mediante la figura del Regimiento de regidores y procuradores por designación real13, para otros como es el caso de Jose Luis Orella14, la aparición del concejo cerrado15 data de la segunda mitad del siglo XIV, convocándose desde entonces la asamblea una vez al año para la elección de los cargos concejiles y procuradores a Juntas. Con la aparición de los concejos cerrados o ayuntamientos16 cerrados, y por lo tanto para la reunión restringida de la “más sana parte”, no se precisaban ya grandes espacios al aire libre o toda una iglesia. Bastaba una habitación par poder deliberar en ella. Tanto es así, que las Cortes de Toledo de 1480 sancionan la obligación de acondicionar en el plazo de dos años “ casa de ayuntamiento e cabildo en que se ayunten”, a fin de que la vida municipal se desarrollara conforme a la realidad que los Reyes Católicos deseaban para sus municipios. El texto dice así17: “Porque paresce cosa desaguisada e de mala gobernación que las ciudades e villas de nuestra corona real no tengan cada una de ellas su casa pública de ayuntamiento e cabildeen que se ayuntar, las justicias e regidores a entender en las cosas complideras a la república que han de governar. Mandamos a la justicia e regidores de las ciudades e villas e lugares de nuestra corona real que no tienen casa pública de cabildo e ayuntamiento para se ayuntar, que dentro de dos años primeros siguientes, contados desde el día en que estas nuestras leyes fueren pregonadas e publicada, fagan cada una ciudad e villa su casa de ayuntamiento e cabildo en que se ayunten so pena de que en la ciudad e villa que no se finiere dentro del dicho término, que dende en adelante los tales oficiales hayan perdido e pierdan los oficios de justicias o regimientos que tienen”. 4.1. Composición del mismo Los gobiernos municipales durante la Edad Moderna, eran un órgano de gobierno realmente importante. Como consecuencia de ello, durante el siglo XVIII la institución que en este momento nos compite, resultó ser un órgano decisorio en la sociedad castellana de la época. 13 AGUIRRE SORONDO, A.: La casa consistorial de Bergara. Diputación Foral de Gipuzkoa, Donosita, 1995. 14 ORELLA UNZUE, J.L.: Derecho e instituciones de los territorios históricos. En: “Euskal Herria. Historia y Sociedad”. Caja Laboral Popular. 1985. pag. 321. 15 Previamente al concejo cerrado, existía el concejo abierto, en el cual los habitantes de una villa se reunían periódicamente en un lugar por todos conocido (habitualmente solían ser los soportales de las iglesias) para escoger a sus representante y o para la toma de decisiones de índole comunitaria. 16 El término ayuntamiento, nos da pie a pensar que proviene de la acción de juntarse, “ajuntarse”, varias personas. 17 ARIZAGA BOLUMBURU, B.: Urbanística Medieval (Guipúzcoa). Kriselu, Diputación Foral de Gipuzkoa. Donosita, 1990. pag. 18. 16
  • 16. Los municipios castellanos en el siglo XVIII A nivel general, podríamos dividir la composición del Ayuntamiento de los municipios castellanos18durante el siglo XVIII, en tres grandes bloques: las autoridades derivadas del poder real; las autoridades derivadas propiamente de los cabildos; y el resto de oficios que existía en los ayuntamientos. Entre las autoridades derivadas del poder regio, se encontraban el corregidor, el alcalde mayor, el alcalde de alzadas, el alguacil mayor y el alférez mayor. Entre los cabildos, se encontraban el de regidores y el de jurados. Por último, el resto de los cargos existentes en los Ayuntamientos eran, los alcaldes ordinarios, los alcaldes, los alguaciles, los contadores, el fiscal de la justicia real, los escribanos, los notarios y los procuradores. 4.2. Competencias 4.2.1. Autoridades derivadas del poder regio Las autoridades derivadas del poder real, estaban encabezadas por el corregidor. Este cargo, podríamos señalarlo como el representante del rey en el municipio y era considerada como la autoridad máxima en el municipio. El corregidor era elegido y nombrado por el rey mediante el Consejo de Castilla en un primer momento y por la Cámara de Castilla con posterioridad. Por lo general, los corregidores no estaban muy bien valorados en los Ayuntamientos, debido a que, además de que solían ser, prácticamente siempre, las arcas municipales las que debían mantener su salario y sus gastos, las oligarquías municipales no podían hacer y deshacer a sus anchas. Entre las competencias de los corregidores, se encontraban por un lado, la de ejercer jurisdicción civil y criminal en primera y segunda instancia en todas las causas que superaran los 600 maravedis; Y por otro lado, ordenar la actividad concejil, presidiendo el Ayuntamiento, controlando los propios, etc. Sin embargo, no eran todo derechos, también tenía una serie de deberes con los que cumplir. Así las cosas, debía presentarse en el ayuntamiento y jurar su cargo; Debía hacer ayuntamiento entre las casas pertenecientes al Ayuntamiento; tenía que controlar los precios de las principales vías de abastecimiento de la ciudad; tenía que gestionar la mayoría de los servicios municipales; debía vigilar los caminos y los campos municipales; tenía que hacer que se cumplieran una serie de ordenanzas municipales y también los decidido en el Concilio de Trento. La última de las funciones que tenía que desempeñar el corregidor, era la de nombrar una serie de cargos u oficios como el de alcalde mayor, alcalde alzadas, alguacil mayor y alférez mayor. La principal función del alcalde mayor era la de sustituir al corregidor en las reuniones del concejo. 18 Se trataría de municipios con un número de habitantes considerable, donde los cargos municipales serían variados y estarían claramente identificados. 17
  • 17. Los municipios castellanos en el siglo XVIII En cuanto al alcalde de alzadas hace referencia, hay que decir que tenía que estar al corriente de todos los pleitos civiles o criminales en los que tenía que tomar parte el corregidor o en su defecto el alcalde mayor. Con respecto al alguacil mayor, hay que señalar que solían existir dos alguaciles mayores. Uno de ellos se limitaba a los asuntos que estrictamente acaecían en el Ayuntamiento, y el otro actuaba en los asuntos de índole municipal, limitándose a tener voz y voto en los asuntos referentes al Ayuntamiento. Por último se encontraba, tal y como hemos señalado previamente, la figura del alférez mayor. Se trataba de un cargo creado por el rey de Castilla en 1567, como cargo honorífico y para ser vendido, puesto que al parecer no tenía ninguna función específica en la vida concejil. Sin embargo, esta inexistencia de una función clara, hacia que frecuentemente se entrometiera en tareas de otros cargos, por lo que eran frecuentes las controversias entre los diferentes trabajadores. 4.2.2. Los cabildos Tal y como hemos señalado previamente el cabildo estaba dividido en dos: El cabildo de regidores y el de jurados. Por lo general, los miembros de los cabildos, solían repartirse los cargos administrativos y gobernativos del municipio. En ocasiones incluso, solían compartir un mismo cargo un regidor y un jurado. Entre las funciones que compartían los miembros de ambos cabildos, estaban: Por un lado la de designar los procuradores a Cortes. Por otro lado, el de ser jueces de apelaciones. En un tercer lugar el de desempeñar la labor de veedores y visitadores19. Por último, la labor de contadores de la unidad20. El cabildo de regidores, podríamos considerarlo como el eje central del Ayuntamiento. A pesar de que podría considerarse a este grupo como el órgano de representación de los ciudadanos del municipio, en realidad era otro órgano municipal más controlado por el poder real21 y que utilizaba el monarca para que toda aquella votación que le interesara ganar, se decantara de su lado. Los componentes del cabildo de regidores, debían ser hidalgos o por lo menos cristianos viejos que no hubiesen desempeñado ningún oficio vil ni mecánico. Hay que señalar que no todos los regidores del cabildo tenían la misma importancia. Así por ejemplo, los regidores nobles solían preceder en el asiento y en el voto a los regidores pertenecientes al estado llano. Cuando coincidían dos regidores de la misma condición, era la antigüedad de cada uno de ellos la que marcaba el orden. 19 Se encargaba de visitar las plazas y tiendas, y de vigilar las medidas y los pesos. 20 Debían elegirse por votación y nunca por más de cuatro años: Se encargaban, junto al mayordomo, de llevar la contaduría general del municipio; De controlar las ventas de la ciudad; DE intervenir y dar validez mediante su firma a los tributos y traspasos que se daban. 21 Sus miembros eran nombrados por la Cámara de Castilla. 18
  • 18. Los municipios castellanos en el siglo XVIII El cabildo de regidores solía encargarse de la hacienda municipal, de los nombramientos, de las comisiones de gobierno, del abastecimiento público, de la administración de la justicia, de las obras que eran necesarias llevar a cabo en el municipio, etc. Con el tiempo, los cargos de regidores, como consecuencia de su puesta en venta, se fueron patrimonializando. Con ello, una persona al haber incorporado este cargo a su patrimonio personal, y tras haberlo ejercido durante toda su vida, era heredado por su descendiente. Esto trajo como consecuencia que este oficio que comenzó como abierto, con el tiempo terminara cerrándose, creándose en los Ayuntamientos, cabildos de regidores cerrados. El cabildo de jurados, tenía como función principal la de defender los intereses comunes de los ciudadanos del municipio en el Ayuntamiento, haciendo especial hincapié en los intereses económicos. Por lo general, no solían disponer de voto alguno en los asuntos que se trataban en el gobierno municipal, pero si que podían opinar al respecto y mostrarse desfavorables en caso de que creyeran que lo que se decidía no fuese positivo para el pueblo. En lo que a su sueldo hace referencia, hay que señalar que no cobraban de forma individual, sino colectiva. Este dinero provenía de las multas que ponían mientras desempeñaban sus oficios y de la asignación anual que les otorgaba el Ayuntamiento. 4.2.3. Resto de oficios El tercero de los tres grandes grupos de oficios estaba encabezado por los alcaldes ordinarios. Estos alcaldes, solían ser nombrados de forma anual por el corregidor y debían ser cuatro miembros. Otro de los oficios era el de alcaide, el cual solía tener como función principal la de vigilar las puertas de la ciudad. El oficio de alguacil, podía ser comprado y por lo tanto al igual que otros, se podía heredar una vez había sido incorporado al patrimonio personal de algún individuo. Al respecto de los escribanos, hay que señalar, que este era un oficio exclusivo del Ayuntamiento y que por lo tanto no podía ser patrimonializado. Los notarios se encargaban de dar constancia legal de lo ocurrido. Por ultimo, el oficio de procuradores de la ciudad que constantemente solían ser comprados y vendidos, representaban a los interesados ante los tribunales y a los municipios en las cortes que se celebraban periódicamente. 19
  • 19. Los municipios castellanos en el siglo XVIII CONCLUSIÓN El siglo XVIII, comenzando como comenzó, con un cambio de dinastía, nos puede dar pie a entender también los cambios que se produjeron a nivel municipal. A nivel social, la situación demográfica del siglo anterior siguió incidiendo de forma decisiva en el devenir del siglo XVIII. Con ello, se explica la grave situación socioeconómica de muchos municipio, pudiendo incluso considerarla como crisis crónica que no permitía el despegue económico de las familias ni de los municipios durante todo este tiempo. Por ello, y a pesar de las riquezas con las que contaban los municipios, estas no estaban equitativamente repartidas por lo que la situación resultaba difícilmente soportable para la inmensa mayoría de la población. En cuanto a las principales instituciones hace referencia, hay que señalar la gran importancia que tenían los hospitales en la vida diaria de las urbes. Además de servir como hospitales, servían también como hospicios para indigentes, pobres, peregrinos, por lo que las calles parecían mas “civilizadas” de lo que en realidad lo eran. Los gremios por su parte, se encontraban en un progresiva decadencia, por la presión que ejercía la incipiente ilustración sobre ellos. Por último, el gobierno municipal destacaba por la gran cantidad de cargos y oficios existentes en el ayuntamiento, y como consecuencia de ello en muchos casos se pisaban los unos a los otros con los consecuentes conflictos competenciales internos. Otro de las consecuencias de este excesivo numero de cargos, era el económico. Debido a que resultaba muy costoso el excesivo aparato burocrático de los Ayuntamientos de la época. 20
  • 20. Los municipios castellanos en el siglo XVIII BIBLIOGRAFIA ACHÓN INSAUSTI, J. A.: A voz de concejo (linaje y corporación urbana en la constitución de la Provincia de Gipuzkoa). Donosita, 1995. AGUIRRE SORONDO, A.: La casa consistorial de Bergara. Diputación Foral de Gipuzkoa, Donosita, 1995. ALBI, F.: El corregidor en el municipio español bajo la monarquía absoluta. Madrid, 1943. ARIZAGA BOLUMBURU, B.: Urbanística Medieval (Guipúzcoa). Kriselu, Diputación Foral de Gipuzkoa. Donosita, 1990. pag. 18. BILBAO, L. Mª.: Protoindustrialización y cambio social en el País Vasco (1500- 1830)., con la influencia de la Guerra Carlista, en Letras de Deusto, vol. 14, nº 29, mayo-agosto 1984, p. 41-60. •Haciendas Forales y Hacienda de la Monarquía. El caso Vasco, siglos XIV-XVIII, en V.V.A.A.: Historia de la Hacienda en España (siglos XVI-XX): Homenaje a Don Felipe Ruiz Martín. Hacienda Pública Española. Monografías, nº 1, 1991, p. 43-58. CLAVERO, B.: Mayorazgo. Propiedad feudal en Castilla (1369-1836). Madrid, 1974. DOMINGUEZ ORTIZ, A.: Sociedad y Estado en el siglo XVIII español. Barcelona, 1984. • Las clases privilegiadas en el antiguo Régimen. Madrid, 1979. GONZALEZ ALONSO, B.: El corregidor castellano (1348-1808). Madrid, 1970. GURRUCHAGA, l.: La hidalguía y los Fueros de Guipúzcoa, en Euskalerriaren Alde. XXI, 1931, marzo, nº327, p. 87-101. FERNÁNDEZ DE PINEDO, E.: Crecimiento económico y transformaciones sociales en el País Vasco. (1100-1850). Madrid, 1974. MOLAS RIBALTA, P.: Los gremios barceloneses en el siglo XVIII. Barcelona, 1978. ORELLA UNZUE, J.L.: Derecho e instituciones de los territorios históricos. En: “Euskal Herria. Historia y Sociedad”. Caja Laboral Popular. 1985. pag. 321. SANTOLAYA HEREDERO, L.: Una ciudad del Antiguo Régimen: Toledo en el siglo XVIII. (Personas, Propiedades Administración). Madrid, 1991. • Hemos consultado el Catastro de Ensenada de forma indirecta consultando diferentes paginas WEB donde aparece información obtenida del catastro: 21
  • 21. Los municipios castellanos en el siglo XVIII http://enlaermita.tripod.com/ensenada.htm http://inicia.es/de/gonz3/ensenada.htm http://perso.wanadoo.es/amolobo01/esmat04.htm http://villadealcocer.com/ensenada/ensenada.htm 22
  • 22. Los municipios castellanos en el siglo XVIII FUENTES DOCUMENTALES Archivo Municipal de Eskoriatza • Carpeta “siglos XIV-XV”. • Carpeta “siglos XVI-XVII”. 23
  • 23. Los municipios castellanos en el siglo XVIII 24