Las microfinanzas buscan aumentar el acceso de las personas de bajos recursos a servicios financieros para combatir la pobreza de manera efectiva. El microcrédito se define como préstamos menores a $20,000 destinados a pequeñas actividades productivas o comerciales, sin requerir estados financieros formales. Las microfinanzas mejoran el acceso a estos servicios y la capacidad de los clientes y organizaciones asociadas para fortalecer sus microempresas.