Mito como relato simbólico. In this article (in Spanish), I discuss there is no myth unless there is narrative and symbolism. Hay versión en youtube: http://www.youtube.com/watch?v=HTTMjjxnR7k
Este documento describe los orígenes y propósitos de la mitocrítica, una teoría creada por Gilbert Durand para analizar los elementos míticos en obras literarias. La mitocrítica se centra en identificar mitemas y estructuras míticas que operan de forma implícita o explícita. El documento también explica diferentes tipos de mitos como los simbólicos, literalizados y literarios, y cómo estos pueden reescribirse en nuevos textos manteniendo o transformando su esencia.
Dr. adolfo vásquez rocca lógica paraconsistente, mundos posibles y ficcione...Adolfo Vasquez Rocca
Konvergencias, Filosofía y Culturas en Diálogo.
ISSN 1669-9092
Número 8 Año III Enero 2005
portada
LÓGICA PARACONSISTENTE,
MUNDOS POSIBLES Y FICCIONES NARRATIVAS.
La ficción como campo de proyección de la experiencia.
Konvergencias, Filosofía y Culturas en Diálogo.
Número 8 Año III Enero 2005
ISSN 1669-9092
Este documento analiza el cuento "Potocki" de Eduardo Mignogna. El cuento se desarrolla en un pueblo rural sin especificar, con personajes como Gorrión Piedrabuena y Potocki. A través de un lenguaje poético y recursos narrativos híbridos, el cuento explora temas como el paso del tiempo, el olvido, y la condición humana. A pesar de su estilo aparentemente tradicional, el cuento incorpora elementos posmodernos y de literatura fantástica, dejando al lector
El documento discute la novela moderna y su papel en explorar la existencia humana. Argumenta que la novela acompaña al hombre desde la era moderna y descubre aspectos importantes de la vida a través de personajes como Don Quijote. También examina cómo novelistas como Cervantes, Balzac, Flaubert y Kundera han usado técnicas como la elipsis y la polifonía para tratar temas existenciales de una manera estética.
La historieta como narración paradójica: el caso de "La gallina degollada"PabloSebastian Becerra
Este documento analiza la historieta "La gallina degollada" de Trillo y Breccia, que se basa en el cuento homónimo de Horacio Quiroga. Argumenta que la historieta presenta una condición paradojal al representar el asesinato de dos maneras simultáneas: a través de la metonimia se enfatiza la irracionalidad bestial de los asesinos, mientras que la elipsis sugiere una racionalidad al implicar que los asesinos actuaron para recuperar la atención de su padre. Esto demuestra
El documento discute varios temas relacionados con la novela histórica y la representación de personajes en la literatura. Hace referencia a varias obras literarias y sus técnicas narrativas, como el uso de citas, la mezcla de ficción e historia, y la construcción de la trama. También analiza elementos como la subjetividad del autor, la identidad de los personajes y cómo éstos se ven afectados por su contexto histórico.
China es un frasco de fetos, de Gustavo Espinosa. Cartografía imposible de un...Mariana Pérez Balocchi
El documento resume una novela uruguaya titulada "China es un frasco de fetos" que presenta una antiutopía en la que los habitantes han perdido el habla. La trama se centra en un geómetra llamado "Él" que busca a su amada Tota. Aunque la obra critica el lenguaje, también incluye elementos utópicos como la búsqueda de perfección de "Él" y la representación de Tota. La sociedad descrita se ha derrumbado económicamente y el gobierno implementa un "Plan de Re
El documento describe los cambios en la literatura del siglo XX con respecto a siglos anteriores. Se privilegió una obra menos limitada con múltiples perspectivas y fusiones de géneros. Los personajes se ven influenciados por el psicoanálisis y presentan desdoblamiento de conciencia. El narrador pierde su visión omnisciente. Temas recurrentes incluyen la soledad y la búsqueda de identidad. Movimientos literarios como el surrealismo influyeron, al igual que técnicas narrativas como el monólogo interior
Este documento describe los orígenes y propósitos de la mitocrítica, una teoría creada por Gilbert Durand para analizar los elementos míticos en obras literarias. La mitocrítica se centra en identificar mitemas y estructuras míticas que operan de forma implícita o explícita. El documento también explica diferentes tipos de mitos como los simbólicos, literalizados y literarios, y cómo estos pueden reescribirse en nuevos textos manteniendo o transformando su esencia.
Dr. adolfo vásquez rocca lógica paraconsistente, mundos posibles y ficcione...Adolfo Vasquez Rocca
Konvergencias, Filosofía y Culturas en Diálogo.
ISSN 1669-9092
Número 8 Año III Enero 2005
portada
LÓGICA PARACONSISTENTE,
MUNDOS POSIBLES Y FICCIONES NARRATIVAS.
La ficción como campo de proyección de la experiencia.
Konvergencias, Filosofía y Culturas en Diálogo.
Número 8 Año III Enero 2005
ISSN 1669-9092
Este documento analiza el cuento "Potocki" de Eduardo Mignogna. El cuento se desarrolla en un pueblo rural sin especificar, con personajes como Gorrión Piedrabuena y Potocki. A través de un lenguaje poético y recursos narrativos híbridos, el cuento explora temas como el paso del tiempo, el olvido, y la condición humana. A pesar de su estilo aparentemente tradicional, el cuento incorpora elementos posmodernos y de literatura fantástica, dejando al lector
El documento discute la novela moderna y su papel en explorar la existencia humana. Argumenta que la novela acompaña al hombre desde la era moderna y descubre aspectos importantes de la vida a través de personajes como Don Quijote. También examina cómo novelistas como Cervantes, Balzac, Flaubert y Kundera han usado técnicas como la elipsis y la polifonía para tratar temas existenciales de una manera estética.
La historieta como narración paradójica: el caso de "La gallina degollada"PabloSebastian Becerra
Este documento analiza la historieta "La gallina degollada" de Trillo y Breccia, que se basa en el cuento homónimo de Horacio Quiroga. Argumenta que la historieta presenta una condición paradojal al representar el asesinato de dos maneras simultáneas: a través de la metonimia se enfatiza la irracionalidad bestial de los asesinos, mientras que la elipsis sugiere una racionalidad al implicar que los asesinos actuaron para recuperar la atención de su padre. Esto demuestra
El documento discute varios temas relacionados con la novela histórica y la representación de personajes en la literatura. Hace referencia a varias obras literarias y sus técnicas narrativas, como el uso de citas, la mezcla de ficción e historia, y la construcción de la trama. También analiza elementos como la subjetividad del autor, la identidad de los personajes y cómo éstos se ven afectados por su contexto histórico.
China es un frasco de fetos, de Gustavo Espinosa. Cartografía imposible de un...Mariana Pérez Balocchi
El documento resume una novela uruguaya titulada "China es un frasco de fetos" que presenta una antiutopía en la que los habitantes han perdido el habla. La trama se centra en un geómetra llamado "Él" que busca a su amada Tota. Aunque la obra critica el lenguaje, también incluye elementos utópicos como la búsqueda de perfección de "Él" y la representación de Tota. La sociedad descrita se ha derrumbado económicamente y el gobierno implementa un "Plan de Re
El documento describe los cambios en la literatura del siglo XX con respecto a siglos anteriores. Se privilegió una obra menos limitada con múltiples perspectivas y fusiones de géneros. Los personajes se ven influenciados por el psicoanálisis y presentan desdoblamiento de conciencia. El narrador pierde su visión omnisciente. Temas recurrentes incluyen la soledad y la búsqueda de identidad. Movimientos literarios como el surrealismo influyeron, al igual que técnicas narrativas como el monólogo interior
Este documento presenta una introducción al concepto de mito desde una perspectiva antropológica y comparativa. Explica que los mitos griegos nos han llegado de forma fragmentada y a través de diversos géneros literarios. Además, señala tres características fundamentales de los mitos: 1) dependen de la memoria colectiva y la transmisión oral, 2) no tienen un relato fijo sino múltiples versiones, y 3) revelan las creencias y pensamientos de una cultura dada. Finalmente, sugiere que el estudio
Este documento resume el método de análisis mitocrítico propuesto por Gilbert Durand para analizar narrativas como películas. Durand sugiere identificar elementos recurrentes como esquemas, arquetipos y "mitemas" que se repiten a través de obras individuales, colecciones de obras de un autor o época e incluso estructuras míticas fundamentales. Cuanto mayor sea el alcance del análisis, más completa será la comprensión de la dinámica subyacente del mito. El propósito es cualitativo más que cuant
Este documento presenta una discusión sobre la teoría narrativa y la narratología. Brevemente resume que la narratología estudia la forma y funcionamiento de los textos narrativos, aunque existen debates sobre si se enfoca más en el contenido o en la forma de transmisión. Luego, explora conceptos clave como la narración, el narrador, la historia narrada y estrategias narrativas para construir mundos ficcionales. Finalmente, propone algunas preguntas fundamentales sobre quién narra, qué es narrar y cómo se narra.
Este documento presenta una introducción al género del ensayo. Explica que el ensayo se encuentra entre lo literario y lo científico, siendo una reflexión personal sobre ideas. También analiza la relación entre el periodismo y la literatura, y cómo el periodismo ha influenciado el desarrollo de nuevos géneros literarios. A continuación, ofrece una definición detallada del ensayo, destacando sus características como género literario reflexivo que presenta ideas de manera personal y sugerente. Finalmente, resume las princip
Este documento discute el concepto de literatura y ficción. Argumenta que no hay una definición universal de literatura, y que lo literario depende del contexto histórico y estético. Explora cómo la inteligencia humana crea ficciones para explicar lo inexplicable, y cómo estas ficciones evolucionaron de mitos a religiones a obras literarias. También examina cómo distinguir entre discursos ficcionales y reales, concluyendo que lo importante es el efecto de sentido de verdad que produce un discurso.
Este documento presenta un resumen de los principales géneros literarios. Explica que la literatura se divide tradicionalmente en tres géneros: narrativo, lírico y dramático. Define cada género y sus subgéneros o formas más importantes, como la épica, la novela, el cuento, la poesía y el teatro. También señala que las obras literarias a menudo combinan diferentes géneros y que su clasificación depende del elemento dominante.
Ítalo Calvino reflexiona sobre la importancia de leer los clásicos. Argumenta que cada lectura de un clásico es única ya que el lector y el texto se transforman, y nuevos significados emergen. Los clásicos también cambian a través del tiempo y las diferentes perspectivas históricas. Una obra clásica recoge la historia del mundo y se ve marcada por lecturas previas, pero mantiene su fuerza a pesar de realidades adversas. Calvino alienta a los lectores a experimentar el viaje que los clásicos proponen sin intermedi
LÓGICA PARACONSISTENTE, MUNDOS POSIBLES Y FICCIONES NARRATIVAS; LA FICCIÓN CO...Adolfo Vasquez Rocca
RESUMEN – ABSTRACT
La Ficción como campo de Proyección de la Experiencia.
Cada vez con más frecuencia en la elaboración del conocimiento se acude a la literatura como fuente de metáforas y descripciones. La búsqueda de metáforas no es sólo una cuestión estética, se trataría más bien de una remodelación continua de nuestro imaginario; esto es: de dar un papel protagónico a la imaginación en la elaboración de nuevo conocimiento. Esta indagación apunta, precisamente, en esa dirección: buscar en nuestra literatura nuevas metáforas que nos permitan imaginar lo que hemos llamado la era de la virtualización.
Resulta muy sintomático que las metáforas más sugestivas del pensamiento contemporáneo provengan, en especial, de lo que genéricamente se ha llamado literatura fantástica.
Las metáforas parecen florecer cuando los modos de ser, actuar, pensar y fabular más o menos sedimentados se sienten conmovidos.
La metáfora se vuelve más auténtica y viva cuando se reconoce que prácticamente prescinde de la palabra: vuelve a la imagen predominante como forma de comunicación, información y fabulación. Nos interesa destacar, precisamente, la metáfora como el primer paso en un proceso heurístico para configurar un sentido.
Desde la perspectiva de las ciencias sociales al iniciar este tercer milenio, quizás haya llegado el momento de asumir en toda su radicalidad la paradoja según la cual no hay nada más realista que hacerse cargo de la literatura fantástica y sus metáforas.
Se advierte en lo fantástico un estatus gnoseológico y epistemológico. La metáfora como estructura de lo neo-fantástico se aleja de la definición aristotélica y se aproxima, en cambio, a la noción nietzscheana de la metáfora. En cada metáfora de lo fantástico está en juego una nueva postulación de la realidad, un terreno en el que las leyes de la lógica al uso se desdibujan e irrumpe ese otro universo presentido por Heisenberg. La metáfora, entonces, es un instrumento de conocimiento en un paradigma indicial, verdaderos tanteos en una zona oscura e ignota.
Adolfo Vásquez Rocca PH.D
El documento discute la intertextualidad y cómo cada texto está relacionado e influenciado por otros textos previos de manera explícita o implícita. Define varios tipos de relaciones transtextuales como la cita, alusión, hipertextualidad, paratextualidad, metatextualidad y architextualidad. Además, analiza las perspectivas de varios teóricos como Bajtín, Kristeva, Riffaterre y Genette sobre la naturaleza intertextual de los textos.
Este documento presenta una introducción a varias teorías y escuelas de la teoría literaria. Brevemente describe la nueva crítica, la hermenéutica, la estética de la recepción, el neohistoricismo y la poética cognitiva. Luego proporciona más detalles sobre conceptos como literatura, lenguaje literario y creación literaria. Finalmente, analiza cómo los escritores captan imágenes del mundo exterior a través de la observación y descripción para incorporarlas en sus obras literarias.
Este documento resume los principales cambios en la narrativa del siglo XX con respecto al siglo XIX. La narrativa del siglo XX se aleja del realismo ingenuo y adopta nuevas técnicas como el monólogo interior, la fragmentación de la historia y la falta de orden cronológico. Los temas también cambian y se enfocan más en lo ambiguo, irracional y misterioso de la realidad. Los personajes pierden importancia como protagonistas y se vuelven arquetipos para explorar la identidad y los conflictos sociales.
El documento describe los diferentes tipos de novela, incluyendo la novela como género literario, la novela pastoril, la novela picaresca, la novela gótica, la novela policíaca y la novela realista/naturalista. También habla sobre elementos clave de la novela como la acción, los personajes, el tiempo narrativo y la estructura típica de la novela.
La intertextualidad se define como las relaciones que puede mantener un texto literario con otros textos, ya sean contemporáneos o históricos. Existen diferentes tipos de intertextualidad como la intratextualidad, extratextualidad, interdiscursividad, metatextualidad, paratextualidad, architextualidad e hipertextualidad/hipotextualidad. Cada tipo se refiere a una relación particular entre textos.
En 3 oraciones o menos:
Isabel Rezmo reflexiona sobre la íntima relación entre poesía y filosofía. Argumenta que ambas se necesitan mutuamente y ninguna puede existir sin la otra. Concluye que tanto la poesía como la filosofía deben formar individuos capaces de desafiar los malos pensamientos del poder de manera astuta pero precisa.
El documento describe los principales géneros y subgéneros literarios. Se dividen los géneros en lírico, épico y dramático. Luego se explican numerosos subgéneros como la oda, elegía, épica, novela, cuento, fábula y otros. Finalmente, se profundiza en el género narrativo y el subgénero del cuento, describiendo su estructura.
Este documento analiza el poema "Caballero solo" de Pablo Neruda. Señala que el poema muestra una transformación en el sistema poético de Neruda donde los elementos sociales conviven con el sujeto individual. Describe cómo el poema presenta una tesis sobre el funcionamiento del deseo sexual y cómo este afecta al poeta. Finalmente, concluye que a través de imágenes del mundo social y natural, el poema propone que el deseo migra a través de diferentes estados hasta llegar a imágenes oníricas de la infancia y la naturaleza.
El documento resume las similitudes y diferencias entre el cuento y la novela. Ambos trabajan una situación central y tienen un final sugerente. Sin embargo, la novela se enfoca más en los personajes y sus acciones, mientras que el cuento se enfoca más en la acción en sí. Además, la novela suele ser más extensa y detallada, mientras que el cuento es más conciso y condensado.
El documento define los géneros literarios como modelos estructurales que sirven para clasificar obras con semejanzas en construcción, temática y discurso. Explica los tres géneros principales - lírico, narrativo y dramático - y algunas de sus formas como la épica, novela y cuento. También señala que las obras pueden combinar géneros y que su clasificación depende de su proximidad a lo narrativo, lírico o dramático.
El documento define los géneros literarios como modelos estructurales que sirven para clasificar obras con semejanzas en construcción, temática y discurso. Explica los tres géneros principales - lírico, narrativo y dramático - y algunas de sus formas como la épica, novela y cuento. También señala que las obras pueden combinar géneros y que su clasificación depende de su proximidad a lo narrativo, lírico o dramático.
Este documento presenta una introducción al concepto de mito desde una perspectiva antropológica y comparativa. Explica que los mitos griegos nos han llegado de forma fragmentada y a través de diversos géneros literarios. Además, señala tres características fundamentales de los mitos: 1) dependen de la memoria colectiva y la transmisión oral, 2) no tienen un relato fijo sino múltiples versiones, y 3) revelan las creencias y pensamientos de una cultura dada. Finalmente, sugiere que el estudio
Este documento resume el método de análisis mitocrítico propuesto por Gilbert Durand para analizar narrativas como películas. Durand sugiere identificar elementos recurrentes como esquemas, arquetipos y "mitemas" que se repiten a través de obras individuales, colecciones de obras de un autor o época e incluso estructuras míticas fundamentales. Cuanto mayor sea el alcance del análisis, más completa será la comprensión de la dinámica subyacente del mito. El propósito es cualitativo más que cuant
Este documento presenta una discusión sobre la teoría narrativa y la narratología. Brevemente resume que la narratología estudia la forma y funcionamiento de los textos narrativos, aunque existen debates sobre si se enfoca más en el contenido o en la forma de transmisión. Luego, explora conceptos clave como la narración, el narrador, la historia narrada y estrategias narrativas para construir mundos ficcionales. Finalmente, propone algunas preguntas fundamentales sobre quién narra, qué es narrar y cómo se narra.
Este documento presenta una introducción al género del ensayo. Explica que el ensayo se encuentra entre lo literario y lo científico, siendo una reflexión personal sobre ideas. También analiza la relación entre el periodismo y la literatura, y cómo el periodismo ha influenciado el desarrollo de nuevos géneros literarios. A continuación, ofrece una definición detallada del ensayo, destacando sus características como género literario reflexivo que presenta ideas de manera personal y sugerente. Finalmente, resume las princip
Este documento discute el concepto de literatura y ficción. Argumenta que no hay una definición universal de literatura, y que lo literario depende del contexto histórico y estético. Explora cómo la inteligencia humana crea ficciones para explicar lo inexplicable, y cómo estas ficciones evolucionaron de mitos a religiones a obras literarias. También examina cómo distinguir entre discursos ficcionales y reales, concluyendo que lo importante es el efecto de sentido de verdad que produce un discurso.
Este documento presenta un resumen de los principales géneros literarios. Explica que la literatura se divide tradicionalmente en tres géneros: narrativo, lírico y dramático. Define cada género y sus subgéneros o formas más importantes, como la épica, la novela, el cuento, la poesía y el teatro. También señala que las obras literarias a menudo combinan diferentes géneros y que su clasificación depende del elemento dominante.
Ítalo Calvino reflexiona sobre la importancia de leer los clásicos. Argumenta que cada lectura de un clásico es única ya que el lector y el texto se transforman, y nuevos significados emergen. Los clásicos también cambian a través del tiempo y las diferentes perspectivas históricas. Una obra clásica recoge la historia del mundo y se ve marcada por lecturas previas, pero mantiene su fuerza a pesar de realidades adversas. Calvino alienta a los lectores a experimentar el viaje que los clásicos proponen sin intermedi
LÓGICA PARACONSISTENTE, MUNDOS POSIBLES Y FICCIONES NARRATIVAS; LA FICCIÓN CO...Adolfo Vasquez Rocca
RESUMEN – ABSTRACT
La Ficción como campo de Proyección de la Experiencia.
Cada vez con más frecuencia en la elaboración del conocimiento se acude a la literatura como fuente de metáforas y descripciones. La búsqueda de metáforas no es sólo una cuestión estética, se trataría más bien de una remodelación continua de nuestro imaginario; esto es: de dar un papel protagónico a la imaginación en la elaboración de nuevo conocimiento. Esta indagación apunta, precisamente, en esa dirección: buscar en nuestra literatura nuevas metáforas que nos permitan imaginar lo que hemos llamado la era de la virtualización.
Resulta muy sintomático que las metáforas más sugestivas del pensamiento contemporáneo provengan, en especial, de lo que genéricamente se ha llamado literatura fantástica.
Las metáforas parecen florecer cuando los modos de ser, actuar, pensar y fabular más o menos sedimentados se sienten conmovidos.
La metáfora se vuelve más auténtica y viva cuando se reconoce que prácticamente prescinde de la palabra: vuelve a la imagen predominante como forma de comunicación, información y fabulación. Nos interesa destacar, precisamente, la metáfora como el primer paso en un proceso heurístico para configurar un sentido.
Desde la perspectiva de las ciencias sociales al iniciar este tercer milenio, quizás haya llegado el momento de asumir en toda su radicalidad la paradoja según la cual no hay nada más realista que hacerse cargo de la literatura fantástica y sus metáforas.
Se advierte en lo fantástico un estatus gnoseológico y epistemológico. La metáfora como estructura de lo neo-fantástico se aleja de la definición aristotélica y se aproxima, en cambio, a la noción nietzscheana de la metáfora. En cada metáfora de lo fantástico está en juego una nueva postulación de la realidad, un terreno en el que las leyes de la lógica al uso se desdibujan e irrumpe ese otro universo presentido por Heisenberg. La metáfora, entonces, es un instrumento de conocimiento en un paradigma indicial, verdaderos tanteos en una zona oscura e ignota.
Adolfo Vásquez Rocca PH.D
El documento discute la intertextualidad y cómo cada texto está relacionado e influenciado por otros textos previos de manera explícita o implícita. Define varios tipos de relaciones transtextuales como la cita, alusión, hipertextualidad, paratextualidad, metatextualidad y architextualidad. Además, analiza las perspectivas de varios teóricos como Bajtín, Kristeva, Riffaterre y Genette sobre la naturaleza intertextual de los textos.
Este documento presenta una introducción a varias teorías y escuelas de la teoría literaria. Brevemente describe la nueva crítica, la hermenéutica, la estética de la recepción, el neohistoricismo y la poética cognitiva. Luego proporciona más detalles sobre conceptos como literatura, lenguaje literario y creación literaria. Finalmente, analiza cómo los escritores captan imágenes del mundo exterior a través de la observación y descripción para incorporarlas en sus obras literarias.
Este documento resume los principales cambios en la narrativa del siglo XX con respecto al siglo XIX. La narrativa del siglo XX se aleja del realismo ingenuo y adopta nuevas técnicas como el monólogo interior, la fragmentación de la historia y la falta de orden cronológico. Los temas también cambian y se enfocan más en lo ambiguo, irracional y misterioso de la realidad. Los personajes pierden importancia como protagonistas y se vuelven arquetipos para explorar la identidad y los conflictos sociales.
El documento describe los diferentes tipos de novela, incluyendo la novela como género literario, la novela pastoril, la novela picaresca, la novela gótica, la novela policíaca y la novela realista/naturalista. También habla sobre elementos clave de la novela como la acción, los personajes, el tiempo narrativo y la estructura típica de la novela.
La intertextualidad se define como las relaciones que puede mantener un texto literario con otros textos, ya sean contemporáneos o históricos. Existen diferentes tipos de intertextualidad como la intratextualidad, extratextualidad, interdiscursividad, metatextualidad, paratextualidad, architextualidad e hipertextualidad/hipotextualidad. Cada tipo se refiere a una relación particular entre textos.
En 3 oraciones o menos:
Isabel Rezmo reflexiona sobre la íntima relación entre poesía y filosofía. Argumenta que ambas se necesitan mutuamente y ninguna puede existir sin la otra. Concluye que tanto la poesía como la filosofía deben formar individuos capaces de desafiar los malos pensamientos del poder de manera astuta pero precisa.
El documento describe los principales géneros y subgéneros literarios. Se dividen los géneros en lírico, épico y dramático. Luego se explican numerosos subgéneros como la oda, elegía, épica, novela, cuento, fábula y otros. Finalmente, se profundiza en el género narrativo y el subgénero del cuento, describiendo su estructura.
Este documento analiza el poema "Caballero solo" de Pablo Neruda. Señala que el poema muestra una transformación en el sistema poético de Neruda donde los elementos sociales conviven con el sujeto individual. Describe cómo el poema presenta una tesis sobre el funcionamiento del deseo sexual y cómo este afecta al poeta. Finalmente, concluye que a través de imágenes del mundo social y natural, el poema propone que el deseo migra a través de diferentes estados hasta llegar a imágenes oníricas de la infancia y la naturaleza.
El documento resume las similitudes y diferencias entre el cuento y la novela. Ambos trabajan una situación central y tienen un final sugerente. Sin embargo, la novela se enfoca más en los personajes y sus acciones, mientras que el cuento se enfoca más en la acción en sí. Además, la novela suele ser más extensa y detallada, mientras que el cuento es más conciso y condensado.
El documento define los géneros literarios como modelos estructurales que sirven para clasificar obras con semejanzas en construcción, temática y discurso. Explica los tres géneros principales - lírico, narrativo y dramático - y algunas de sus formas como la épica, novela y cuento. También señala que las obras pueden combinar géneros y que su clasificación depende de su proximidad a lo narrativo, lírico o dramático.
El documento define los géneros literarios como modelos estructurales que sirven para clasificar obras con semejanzas en construcción, temática y discurso. Explica los tres géneros principales - lírico, narrativo y dramático - y algunas de sus formas como la épica, novela y cuento. También señala que las obras pueden combinar géneros y que su clasificación depende de su proximidad a lo narrativo, lírico o dramático.
El documento provee una introducción al concepto de género literario y describe los tres géneros principales: narrativo, lírico y dramático. También discute las formas narrativas como la épica, novela y cuento, y las modalidades poéticas como la poesía verbal y con verso libre. Finalmente, ofrece definiciones de los elementos básicos del género dramático como el conflicto, personajes protagonistas y antagonistas.
Este documento define los principales géneros literarios - narrativo, lírico y dramático - y describe algunas de sus formas más importantes. Explica que las obras literarias a menudo combinan géneros. Dentro del género narrativo, destaca la épica, la novela y el cuento. En el género lírico, distingue entre poesía verbal y otras modalidades. Finalmente, ofrece una definición básica del género dramático centrándose en el diálogo y conflicto entre personajes
Este documento discute conceptos clave como mito, mitología y mitologema. Explica que la mitología griega pasó a la literatura en el siglo VIII a.C. con Homero y Hesíodo, marcando el inicio de una larga tradición literaria que se tomaba libertades creativas con los mitos. También destaca que en Grecia los guardianes de los mitos eran los poetas, dando gran margen para variantes míticas al estar los relatos por escrito.
Este documento resume las teorías de varios autores sobre los géneros literarios a lo largo de la historia. Explica que los géneros literarios incluyen la épica, la lírica y la dramática, y describe algunos subgéneros como la epopeya, novela, oda y comedia. También discute géneros no poéticos como la oratoria, historia y didáctica. El documento provee una visión general de la evolución del concepto de género literario desde la antigüedad hasta el sig
Este documento presenta una introducción a los diferentes tipos de textos literarios, incluyendo una clasificación de los géneros literarios como épico, lírico, dramático y didáctico. Luego proporciona ejemplos y características de varias formas literarias como el cuento, la novela, la leyenda, el mito, el poema y la canción. Finalmente, sugiere algunas actividades para que los estudiantes exploren más a fondo estos diferentes géneros y formas literarias.
El documento resume los principales géneros literarios. Define el concepto de género literario y explica que los tres grandes géneros son el narrativo, el lírico y el dramático. Describe algunas formas narrativas como la épica, la novela y el cuento. También habla brevemente sobre el género lírico y dramático, e incluye ejemplos de obras literarias para ilustrar cada género.
El documento resume los principales géneros literarios. Define el concepto de género literario y explica que los tres grandes géneros son el narrativo, el lírico y el dramático. Describe algunas formas narrativas como la épica, la novela y el cuento. Brevemente menciona el género lírico y dramático.
El documento presenta una introducción a los diferentes géneros literarios, incluyendo el narrativo, lírico y dramático. Explora las formas narrativas como la épica, novela y cuento, con ejemplos como la Ilíada y El ingenioso hidalgo Don Quijote. También describe la poesía y poesía visual, con menciones a Borges y Apollinaire. Finalmente, analiza la poesía en verso libre a través de un fragmento de Vallejo.
El documento presenta una introducción a los diferentes géneros literarios, incluyendo el narrativo, lírico y dramático. Explora las formas narrativas como la épica, novela y cuento, así como las modalidades poéticas como la poesía verbal y visual. Finalmente, ofrece ejemplos literarios de cada género, como extractos de obras de Homero, Cervantes, Cortázar y Vallejo.
El documento presenta una introducción a los principales géneros literarios, incluyendo el narrativo, lírico y dramático. Explora subgéneros como la épica, novela, cuento y poesía, analizando ejemplos clásicos como La Ilíada y obras contemporáneas. También discute la combinación de géneros en una obra y las diferencias entre poesía estructurada y verso libre.
El documento resume los principales géneros literarios. Define el concepto de género literario y explica que los tres grandes géneros son el narrativo, el lírico y el dramático. Describe algunas formas narrativas como la épica, la novela y el cuento. Brevemente menciona el género lírico y dramático.
Este cuento de Horacio Quiroga cuenta la historia de un hombre que yace agonizando junto a un árbol talado. El hombre sabe que morirá pronto y observa las moscas que revolotean a su alrededor, presintiendo su muerte. Al final, su mente delira y se siente capaz de volar como una mosca, escapando así de su fatal destino. El cuento explora temas como la conexión entre el hombre y la naturaleza, así como la imposibilidad de escapar de la muerte.
Este documento resume tres géneros poéticos: la poesía lírica, la poesía épica y la poesía dramática. La poesía lírica se caracteriza por la expresión de sentimientos profundos y reflexiones del autor. La poesía épica narra las hazañas de héroes durante la Edad Media utilizando hechos históricos. La poesía dramática representa una acción humana en la escena a través de diálogos y personajes que reflejan las ideas del autor dramático.
El documento resume las principales tendencias y corrientes de la narrativa del siglo XX. Se produjo una ruptura con la narrativa tradicional realista, aunque esta siguió cultivándose. Las vanguardias como el surrealismo y el expresionismo aportaron nuevas técnicas narrativas como el monólogo interior y la corriente de conciencia. Autores como Kafka, Joyce y Proust renovaban las formas narrativas y abordaban temas como el absurdo de la existencia, la identidad y la memoria.
Este documento proporciona una introducción a los géneros literarios. Define la literatura y explica las tres categorías principales de géneros literarios establecidas por Aristóteles: narrativa, dramática y lírica. Luego describe varios subgéneros dentro de cada categoría principal, incluidos el cuento, la novela, la tragedia, la comedia y la poesía lírica. El documento ofrece definiciones concisas de cada género y subgénero discutido.
Similar a José Manuel Losada: Mito como relato simbólico (20)
Mythical Narratives in Comparative European Literature / Le récit mythique dans la littérature européenne comparée, CompLit. Journal of European Literature, Arts and Society, Asun López-Varela y José Manuel Losada (dir.), 7 (2024), París, Classiques Garnier, 236 p. ISSN 2780-2523. ISBN 978-2-406-16969-7.
― https://dx.doi.org/10.48611/isbn.978-2-406-16970-3.p.0009
― https://classiques-garnier.com/complit-journal-of-european-literature-arts-and-society-en.html
“The Referential Function of Myth”, Mythical Narratives in Comparative European Literature, CompLit. Journal of European Literature, Arts and Society, París, Classiques Garnier, 7 (2024), pp. 21-39. ISSN 2780-2523. ISBN 978-2-406-16969-7.
― https://dx.doi.org/10.48611/isbn.978-2-406-16970-3.p.0023
― https://classiques-garnier.com/complit-journal-of-european-literature-arts-and-society-en.html
“Introduction” (Asun López-Varela y José Manuel Losada), Mythical Narratives in Comparative European Literature, en CompLit. Journal of European Literature, Arts and Society, París, Classiques Garnier, 7 (2024), pp. 13-19. ISSN 2780-2523. ISBN 978-2-406-16969-7.
― https://classiques-garnier.com/complit-journal-of-european-literature-arts-and-society-en.html
“Mito y mitocrítica cultural: un itinerario personal”, Mito: teorías de un concepto controvertido, Madrid, Sial Pigmalión, 2024, pp. 83-95. ISBN 978-84-19928-03-0.
The bibliography on modern reworkings of mythical narratives is immense: Greco-Latin myths in novels and adventure films, adaptations of Celtic, Norse, or Slavic myths in cinema, TV series and comics, the relationships between Eastern and Western myths… The list is endless and somehow overabundant compared to the smaller (though still huge) bibliography of theories of myth. The reason for this disproportion is due, in part, to the difficulty involved in abstracting general criteria. When critics seek to define myth, they must first strip it of spatial, temporal or circumstantial conditioning; only later will they be able to apply the label “myth” to this or that story.
Different key factors of our contemporary society (the phenomenon of globalisation, the dogmas of relativism, the logics of immanence) make the definition of myth even more difficult for the non-specialized public and for academic researchers alike. Indeed, academic reflection has not been immune to contemporary confusion about myth: in the wake of great psychoanalysts, sociologists or political experts, many researchers apply to their work certain conceptions of myth that identify it with individual sublimations, social deformations, or tendentious ideologies. For this reason, later on, the non-specialized public ―cheered on by the sensationalism of the press― likes to label any fallacy as “mythical”: apparently, the term “myth” cloaks the user of non-mythical discourses with a golden aura.
The volume has been coordinated by José Manuel Losada and Antonella Lipscomb. Both have traced an extensive trajectory in publishing books focused on myths: six volumes published in Italy, Germany, and the United Kingdom. Myth: Theories of a Controversial Concept comprises nine studies on myth written by university researchers from Portugal, Italy, Spain, and the United Kingdom: all of them shed light on a coherent definition of myth.
On the 28th of February 2024, the volume was awarded the 2023 International "Aristotle of Thought and Essay" Prize, bestowed by the Sial Pigmalión Editorial Group in the Boardroom of the Faculty of Philology at the Complutense University.
“La vejez inmortal. Consideraciones sobre el mitema de la inmortalidad”, Nerter, 38-39 (2023), pp. 42-48. ISSN 1575-8621.
https://mbrito.webs.ull.es/NERTER/BACK%20ISSUE-38-39.html
“L’enlèvement de Mlle de Montmorency-Boutteville et de la fille de Lope de Vega. Un événement de cour en France et un événement domestique en Espagne au XVIIe siècleˮ, Poésie de cour et de circonstance, théâtre historique. La mise en vers de l’événement dans les mondes hispanique et européen. XVIe-XVIIe siècles, Marie-Laure Acquier y Emmanuel Marigno (dirs.), París, L’Harmattan, 2014, pp. 267-276. ISBN: 978-2-343-02790-6.
Este documento analiza la relación entre mito y símbolo. Examina cómo el símbolo funciona como puente entre la trascendencia del significado y el mundo concreto de los signos mediante ejemplos literarios. También discute diferentes enfoques hermenéuticos del símbolo, incluyendo aquellos que lo reducen a un epifenómeno versus los que amplifican su poder integrador.
Este documento discute la relación entre mitos y clasificación social. Sostiene que los mitos reflejan la estratificación social del contexto donde surgieron. Analiza el mito de Don Juan y encuentra que: 1) El autor original pertenecía a una clase social elevada con autoridad para transmitir mitos, 2) Los personajes representan diferentes clases sociales, con Don Juan y el Comendador perteneciendo a la nobleza, y 3) A pesar de adaptarse a nuevos contextos, el mito mantiene elementos que reflejan su origen en la España del sig
“Hacia una mitocrítica de las emociones”, Myth and Emotions, José Manuel Losada & Antonella Lipscomb (eds.), Newcastle upon Tyne (Reino Unido), Cambridge Scholars Publishing, 2017, pp. 27-51. ISBN: 978-1-5275-0011-2.
“Fortunes et infortunes du précepte horatien utile dulci dans la littérature française: essai d’interprétation du Classicisme à la Modernité”, Çédille. Revista de Estudios Franceses (Santa Cruz de Tenerife), 15 (abril 2019), pp. 333-354. ISSN: 1699-4949.
Este documento presenta a José Manuel Losada y Antonella Lipscomb, editores de un volumen que examina la relación entre el mito y la creación audiovisual en la era digital. Losada es profesor de literatura francesa y crítica mitológica en la Universidad Complutense de Madrid, mientras que Lipscomb es conferenciante en la Universidad Antonio de Nebrija. El volumen explora cómo el mito se ha adaptado a nuevos formatos mediáticos y si ha conservado su esencia o mutado a nuevas formas en la era digital.
“Mito y antropogonía en la literatura hispanoamericana: Hombres de maíz, de Miguel Ángel Asturias”, Rassegna iberistica (Venezia), 43, 113, Giugno (2020), pp. 41-56. e-ISSN: 2037-6588. ISSN: 0392-4777.
“Cultural Myth Criticism and Today’s Challenges to Myth”, Explaining, Interpreting, and Theorizing Religion and Myth: Contributions in Honor of Robert A. Segal, Nickolas B. Roubekas and Thomas Ryba (eds.), Leiden, Koninklijke Brill NV, 2020, pp. 355-370. ISBN: 978-90-04-43502-5
“Révolution de l’image à l’avènement de la Modernité”, Literatura, crítica, libertad. Estudios en homenaje a Juan Bravo Castillo, Hans Christian Hagedorn, Silvia Molina Plaza y Margarita Rigal Aragón (coords.), Cuenca, Ediciones de la Universidad de Castilla-La Mancha, 2020, pp. 603-611. ISBN: 978-84-9044-403-0.
Este documento analiza la trascendencia de la ciencia ficción y su relación con el mito. Aunque la ciencia ficción y la fantasía comparten ciertas similitudes en su tratamiento de lo espacial y temporal, la ciencia ficción diverge del mito en su enfoque. Mientras la ciencia ficción busca explicaciones verosímiles para los acontecimientos extraordinarios, el mito propone un impacto entre mundos irreducibles, uno de los cuales es sagrado. No obstante, la ciencia ficción y el mito también comparten el afán por
“La littérature comparée et l’interculturel. L’exemple franco-espagnol”, Récits du Sud. Relatos del Norte, Jean-Marie Chassagne et al. (eds.), Burdeos, La Nef, 1992, pp. 73-86. ISBN: 2-85276-054-1.
“Péché et punition dans L’Abuseur de Séville”, Don Juan. Tirso, Molière, Pouchkine, Lenau. Analyses et synthèses sur un mythe littéraire, José Manuel Losada y Pierre Brunel (eds.), París, Klincksieck, 1993, pp. 7-22. ISBN: 2-252-02939-0.
ACERTIJO DESCIFRANDO CÓDIGO DEL CANDADO DE LA TORRE EIFFEL EN PARÍS. Por JAVI...JAVIER SOLIS NOYOLA
El Mtro. JAVIER SOLIS NOYOLA crea y desarrolla el “DESCIFRANDO CÓDIGO DEL CANDADO DE LA TORRE EIFFEL EN PARIS”. Esta actividad de aprendizaje propone el reto de descubrir el la secuencia números para abrir un candado, el cual destaca la percepción geométrica y conceptual. La intención de esta actividad de aprendizaje lúdico es, promover los pensamientos lógico (convergente) y creativo (divergente o lateral), mediante modelos mentales de: atención, memoria, imaginación, percepción (Geométrica y conceptual), perspicacia, inferencia y viso-espacialidad. Didácticamente, ésta actividad de aprendizaje es transversal, y que integra áreas del conocimiento: matemático, Lenguaje, artístico y las neurociencias. Acertijo dedicado a los Juegos Olímpicos de París 2024.
1. EL MITO COMO RELATO SIMBÓLICO
Prof. José Manuel Losada Goya
Universidad Complutense (Madrid)
jlosada@ucm.es
@jmlosadagoya
https://www.facebook.com/josemanuel.losadagoya
http://josemanuellosada.es
El título de este artículo asocia tres conceptos generalmente poco precisados. Nuestro
propósito es salir de esta indefinición con vistas a integrar los componentes simbólicos del mito
en un texto narrativo.
1. MITO Y RELATO
Vaya por delante nuestra definición de mito: relato oral, simbólico, dinámico y
aparentemente sencillo de un acontecimiento extraordinario con referente trascendente, personal
y material, que evidencia una clasificación social, carece en principio de testimonio histórico, se
compone de una serie de elementos constantes o invariantes semánticas culturales reducibles a
temas y presenta un carácter conflictivo (supone una prueba interior o exterior), funcional
(transmite valores y creencias comunes, provee de esquemas fácticos, ritos y acciones)
eufemístico y etiológico (expresa de algún modo una cosmogonía o una escatología, particular o
universal).
Sin ánimo de conceder a la etimología mayor atención que la necesaria, preciso es
recordar que µῦθος (mythos) vale tanto como palabra, discurso, razón, dicho, comunicación,
mensaje, es decir: relato. Parece ser que mythos proviene de la raíz my-, onomatopeya que
indicaría tanto la imitación o la emisión de sonidos como el acto de no emitirlos (de donde
procedería “mudo”, “mutismo”). De ahí el oxímoron: palabra silenciada.
Ahora bien, históricamente el mito nace y se desarrolla como relato: todo mito cuenta
algo.
1.1. Mito y narración
El mito es relato en el sentido de que presenta una estructura narrativa autónoma.
1. “Estructura”, porque sus elementos constitutivos aseguran su cohesión de tal manera
que si uno de ellos viene a faltar el conjunto queda sensiblemente modificado, se descompone o
se convierte en otro mito.
2. “Estructura narrativa”, porque no existe mito sin choque de fuerzas dramatúrgicas
(Souriau), ni tiempo. En todo mito un ser vivo (personal o personificado) actúa en una sucesión
temporal ordenada en narración. Aquí narración se ha de entender como acto de narrar. Lo que
no implica que el mito consista en el acto de narrar sino que en todo mito existe un enunciado
narrativo o historia.
3. “Estructura narrativa autónoma”, porque no depende de otras estructuras anteriores o
posteriores: el mito puede irrumpir desgajado del resto del discurso ― por ejemplo, en un
segundo nivel diegético: en la Odisea, el episodio de las Sirenas ―.
Hay, como dirían los formalistas, una faceta de inmanencia en la estructura del mito, es
decir, al margen de toda referencia a lo que no sea él. Inmanencia estructural que no puede
contraponerse a la trascendencia ontológica inherente al mito.
2. No sin paradoja, también hay un aspecto de movilidad en la estructura del mito. El relato
mítico no está momificado: es un tema con múltiples diferencias.
Un ejemplo, entre tantos, es el mito del laberinto de Creta. El relato cuenta la historia de
la maraña inextricable construida por Dédalo bajo las órdenes del rey Minos para encerrar al
Minotauro. Solo Teseo, tras matar al monstruo, consigue salir con vida gracias al hilo de
Ariadna. Numerosas son las versiones a lo largo de la historia, como las de la Biblioteca
mitológica y los Epítomes del Pseudo-Apolodoro. Sin ir tan lejos, L’Emploi du temps de Michel
Butor ofrece un ejemplo de la permanencia del mito de Teseo y de su inserción en un tejido
narrativo: dieciocho tapices del museo de Bleston escenifican, entre otros asuntos, la infancia de
Teseo, la muerte del Minotauro y el abandono de Ariadna en una puesta en abismo de cuanto
acaece y acaecerá al protagonista Jacques Revel.
1.2. Mito y teatro
Es obvio que esta estructura narrativa no es exclusiva del relato en verso y en prosa. Así,
el teatro es acción (δρᾶµα) compuesta “no mediante relato”, como recuerda Aristóteles
(Poética, 49b24-28). La función teatral es una acción mimética, y “la imitación de la acción es
el mito” (“ἔστιν δὲ τῆς µὲν πράξεως ὁ µῦθος ἡ µίµησιϛ”, 50a4). Pero al prestar solo
atención al carácter mimético de la función teatral, Aristóteles confunde mito y fábula.
En su Laberinto de Creta, Lope de Vega vuelve al mito. Dédalo descorre una cortina y
muestra en un lienzo la maqueta del laberinto donde será encerrado el Minotauro (jornada 1ª).
Más adelante, Teseo se adentra en la intrincada construcción mientras Fedra y Ariadna quedan
fuera angustiadas por la vida del héroe, hasta que este sale y relata su hazaña:
Até el hilo de oro, y entro
dando vueltas a mil calles
por infinitos rodeos;
cuando pensaba que estaba
del Laberinto en el centro,
estaba más lejos de él,
y cerca cuando más lejos.
Finalmente: yo llegué
a un sitio en cuadro pequeño,
donde estaba el Minotauro,
echado entre varios huesos,
[…]
alzo la maza animoso,
y de los golpes primeros,
con dos horrendos bramidos,
doy con el monstruo en el suelo (jornada 2ª).
La muerte del monstruo no es representada sobre las tablas, sino actualizada (los verbos
en presente) y puesta en evidencia por el protagonista-narrador en una narración que recurre a la
figura de la hipotiposis. Tal y como hubiera ocurrido en una novela o un poema heroico.
1.3. Mito y lírica
El mito del laberinto aparece en otros relatos de Homero, Eratóstenes, Pausanias,
Plutarco, Higinio, Ovidio…, a los que se suman múltiples dédalos de la literatura moderna tales
como los de Borges, Buzzatti o Kazantzakis. Otro tanto ocurre con la inmensa mayoría de los
mitos: recurren a la narración en forma de epopeya, prosa didáctica, historiografía, cuento o
novela.
El caso de la poesía lírica es distinto. No faltan poemas con referencias míticas, donde el
poeta recurre a un mito para contar su amor a su amada, pero escasean los poemas líricos cuyo
3. tema sea exclusivamente mítico. Los mitos no parecen ser el campo predilecto de esta poesía.
Esto requiere una explicación.
En toda poesía, mediante tropos de dicción y pensamiento, el poeta establece
asociaciones audaces entre realidades distantes. Como norma general, la lírica es el cauce
habitual por el que trascurre la expresión del sentimiento, del estado de ánimo, de la
subjetividad del poeta frente a los problemas universales y particulares. Toda metáfora viva crea
una relación semántica inesperada entre dos realidades, suscita una nueva epifanía que ilumina
con luz nueva el mundo consuetudinario, hasta el punto que tropos y figuras a veces ponen en
riesgo la comprensibilidad del texto (la perspicuitas de los antiguos), alteran la relación entre
significante y significado. Pero ni tropos ni figuras suponen un obstáculo insalvable para el
mito. De hecho, también el relato recurre a estos tropos y figuras, sin por ello renunciar a sus
propósitos.
Uno de sus propósitos es la explicación del mundo. Ahora bien, esta distingue
principalmente la lírica del relato mítico. Para una y para otro el mundo es contextualizado de
manera diferente. La función poética del lenguaje lírico pone como en suspenso la función
referencial directa y descriptiva que caracteriza al relato. En la lírica, lo primario es la función
emotiva, esto es, la actitud de la instancia poética hacia lo que se dice: no importa tanto lo dicho
como la manera de infundir emoción en lo dicho. El discurso lírico moviliza en el lenguaje
aspectos, cualidades y valores clausurados al mundo descriptivo del relato, el cual, por su parte,
recurre a la circunstancia de los personajes, a los medios que utilizan para lograr sus objetivos,
se detiene en sus iniciativas, en las consecuencias de sus actos, que se desarrollan
necesariamente en el tiempo. La referencia del relato es un mundo real o ficticio, pero siempre
relacionado con un facere. La referencia de la lírica es eminentemente el mundo de lo
emocional, de lo estético y lo axiológico, donde los sentidos o los principios fundamentales
requieren una suspensión del tiempo ― “Ô temps ! suspends ton vol, et vous, heures
propices ! / Suspendez votre cours”, Lamartine, Le Lac ― y, a veces, una inmovilización del
espacio (“Cerca del Tajo, en soledad amena”, Garcilaso, égloga 3ª).
Menos aún que la poesía lírica de corte clásico y tradicional, la moderna no ofrece un
campo abonado para el mito. La poesía clásica era una variación ornamental de la prosa, no un
lenguaje diferente: ambas se movían en el mismo rango, en la misma superficie; el universo era
idéntico para las dos. Bastaba que la prosa tuviera más decorado o menos libertad para que se
convirtiera en poesía.
Por el contrario, una parte de la poesía lírica (la poesía de corte simbolista y surrealista)
instituye una nueva serie de relaciones entre el hombre y el mundo: se hace referencia a una
naturaleza cerrada, clausurada, a la que solo el poeta y unos pocos lectores privilegiados tienen
acceso. Frente a la pretensión universalista del clasicismo, la lírica contemporánea desde el
simbolismo tiene una densidad individual, una dimensión emotiva solo compartibles gracias a
un desciframiento cada vez más elitista. En el mejor de los casos, o totalmente hermética para
quien no es alquimista (“Je réservais la traduction”, Rimbaud, “Alchimie du verbe”). Tanto es
así, que cabe preguntarse qué ha sido del mito.
Pues bien, cuanto precede no elimina el relato mítico de la poesía lírica de hoy; la modula
e impone sus condiciones. Pondremos un ejemplo: “Ariadna en Naxos” de Jorge Guillén (Y
otros poemas, 1973). Este poema, impregnado de lirismo y tamizado por la acendrada pureza
guilleniana, tiene un desarrollo narrativo e incluso acentos teatrales de poema dramático.
Comienza a contar el episodio desde el principio, cuando el barco se detiene en Naxos, a
diferencia de las fuentes clásicas, que comienzan in medias res: no centra su atención en el
lamento de Ariadna, en el momento emotivo de la escena. Pero tampoco la centra en el
argumento porque la pieza no es un relato y se da por conocido. El carácter lírico estriba en los
repetidos intentos del narrador (las construcciones interrogativas) por adentrarse en el psiquismo
de Ariadna. Es un lirismo coparticipativo: percepción de la lentitud de las horas por la heroína,
traducción de su acercamiento a la muerte, replanteamiento de su pasión por Teseo, etc. Luego,
hacia la mitad de la segunda parte, “el poema da un giro hacia el futuro” (Fernández Urtasun),
que el “infortunio” de Ariadna no le permite entrever. Pero para nosotros, lectores, “es una
historia antigua: la sabemos”.
4. La poesía lírica, al igual que la música (Dido and Aeneas, Purcell), se adueña de la
materia mitológica para embellecerla e investirla de emoción renovada en un nuevo diálogo con
el antiguo relato.
1.4. El relato mítico
El hecho de que todo mito parezca susceptible de reactualizarse y dar pie a un recorrido
imaginario que arrastra consigo arquetipos, temas y símbolos, plantea el problema de su
narratividad. El mito, ¿posee o no una consistencia nuclear? Se observa que, merced al relato,
todo mito apunta a una racionalización que trata de sistematizar cuanto en los arquetipos, los
temas y los símbolos arrastrados se encuentra disperso. Porque sin relato no hay mito.
Ciñéndonos al objeto de este estudio, traemos a colación las reflexiones de algunos
críticos sobre el mito en relación con el relato.
→ En primer lugar, una reflexión de Ricœur, que enlaza siempre el mito con la dimensión
religiosa y legendaria. Este autor comprende el mito como un símbolo desarrollado en forma de
relato y articulado en un tiempo y un espacio no asimilables a los de la historia y la geografía
según el método crítico. Por ejemplo, distingue el exilio en sí, símbolo de la alienación humana,
de la expulsión de Adán y Eva fuera del Paraíso, relato mítico de segundo grado que pone en
juego personajes, lugares, tiempo y episodios fabulosos. Según Ricœur, el episodio bíblico se ha
tomado analógicamente como ilustración de la alienación humana, la cual suscita una historia
fantástica, el exilio del Edén, que ― como historia ocurrida acrónicamente ― es un mito.
→ En segundo lugar, Lévi-Strauss afirma que el mito puede definirse a partir de un
sistema temporal permanente que combina las propiedades de los dos sistemas temporales a los
que se refieren la lengua (tiempo reversible) y el habla (tiempo irreversible). Esta doble
estructura del mito explica su pertenencia a un tercer nivel, también de naturaleza lingüística,
pero superior: el de la frase. Esta relata algo (una historia) cuyo sentido resulta de la interacción
entre los elementos que la conforman. Estos elementos son sus unidades constitutivas o
mitemas. Los mitemas (situados en un estado superior a las unidades constitutivas de la
estructura de la lengua ―fonemas, morfemas y sememas―) pueden ser reconocidos o aislados
en frases. Estos mitemas deben aparecer en cualquier versión o variante de un mito, mientras
que otros elementos secundarios, que no alteran la estructura del mito, tienen un carácter
contingente. Un ejemplo: el mito de Edipo está constituido por una relación de parentesco
extremada entre un hijo y su madre, una relación de parentesco antinómica de un hijo con su
padre, un enfrentamiento victorioso con un monstruo, una dificultad para andar normalmente (la
cojera). No está constituido, sin embargo, por unidades secundarias: el suicidio de la madre o la
ceguera autoinfligida. Así entendido, el mito no es reducible a una versión única, tenida por
auténtica y generadora.
→ En tercer lugar, diremos, a partir de estos postulados, que críticos estructuralistas
como Greimas analizan cómo operan las secuencias de enunciados articulados en relatos. Este
investigador se centra en la descripción del universo mitológico y en la definición de la
estructura del mito como relato. La primera es objeto de estudio de la mitología literaria, la
segunda, de un análisis estructural de los relatos míticos.
De estos acercamientos críticos, resulta, en lo que nos atañe, que el funcionamiento de un
texto mítico, cualquiera que sea su forma, permite desgajar una normativa sobre la aparición en
él del mito. Sin fijarlas como definitivas, Pierre Brunel establece tres leyes más o menos
recurrentes.
La emergencia es obvia: un nombre (“Circe”, por ejemplo), una característica (mujer
“tyrannique”) o un acontecimiento (la metamorfosis) reenvían el poema de Baudelaire Le
voyage al célebre episodio de la Odisea.
La flexibilidad sugiere la capacidad de adaptación del elemento mítico a tal o cual texto
literario: Baudelaire sustituye las armas seductoras de Circe (sus rizos, su voz y su brebaje,
canto X de la Odisea) por sus “perfumes peligrosos” (“dangereux parfums”), que en el poema
homérico aparecen referidos a las Sirenas en el canto IX.
5. La irradiación muestra que la presencia de un elemento mítico introducido en un texto
literario es esencialmente funcional. En ocasiones es fácil ponderar la cercanía o adecuación
entre título y contenido (caso de la novela corta Circe de Cortázar, cuyos narremas entroncan
con el original griego). Resulta más difícil, en otros casos, como en otro poema de Baudelaire,
Le serpent qui danse (“La serpiente que danza”), donde las palabras “ta chevelure profonde”
(“tu cabello profundo”) recuerdan los hermosos rizos de la maga (cuyos perfumes están aquí
calificados como “âcres”, “agrios”).
En breve: todo mito está estructurado en forma de relato, funciona como un relato más o
menos extenso, pero siempre cohesionado en lo que a su núcleo se refiere. Todo mito cristaliza
en cualquiera de los géneros literarios. El cometido de la mitocrítica consiste en analizar cada
mitema a través de su funcionamiento textual.
Referencias textuales
ARISTÓTELES, Poética, ed. Valentín García Yebra, Madrid, Gredos, “Biblioteca Románica
Hispánica”, 1974.
Michel BUTOR, L’Emploi du temps, París, Les Éditions de Minuit, “Double”, 1956.
LOPE DE VEGA, El laberinto de Creta, http://www.biblioteca.org.ar/libros/70814.pdf
Referencias críticas
Pierre BRUNEL, Mythocritique. Théorie et parcours, Paris, Presses Universitaires de France,
1992.
Rosa FERNÁNDEZ URTASUN, “El mito de Ariadna en la poesía española contemporánea”, Mito y
mundo contemporáneo, ed. José Manuel Losada Goya, Bari, Levante, “Kleos”, 2010, 397-411.
Algirdas Julien GREIMAS, “Éléments d’une grammaire narrative”, Du Sens. Essais sémiotiques,
París, Éditions du Seuil, 1970.
Claude LÉVI-STRAUSS, “La structure des mythes”, Anthropologie structurale I, París, Plon,
“Pocket”, 1958 y 1974.
Paul RICŒUR, “Avant-propos”, Temps et récit, París, Éditions du Seuil, “Points”, 1983-1985, 3
vol. Tomo I: L’intrigue et le récit historique.
2. MITO Y SÍMBOLO
Hasta aquí hemos desbrozado la relación entre mito y relato. Procedamos ahora al estudio
de la función simbólica del mito.
Gilbert Durand observa:
L’utilisation systématique du symbolisme mythique […], chez l’auteur du
Banquet et du Timée, suffit à nous convaincre que le grand problème platonicien était
bien celui de la reconduction des objets sensibles au monde des idées, celui de la
réminiscence qui, loin d’être une vulgaire mémoire, est au contraire une imagination
épiphanique (L’Imagination symbolique, p. 24).
La utilización sistemática del simbolismo mítico […], en el autor del Banquete y
del Timeo, basta para convencernos de que el gran problema platónico era el de la
reconducción de los objetos sensibles al mundo de las ideas, el de la reminiscencia que,
lejos de ser una vulgar memoria, es al contrario una imaginación epifánica.
¿La función simbólica sería medianera entre la trascendencia del significado y el mundo
de los signos concretos que, merced a ella, se convierten en símbolos? Para dar una respuesta,
pondremos a continuación un caso en que interaccionan mito y símbolo.
En la novela Nadja de Breton, el narrador nos cuenta el pasatiempo que la joven epónima
encuentra en la pintura. Un día pinta una flor que representa a los dos amantes, otro día diseña el
6. retrato de su amante con los pelos de punta… El dibujo que ahora nos concierne lleva fecha
― 18 de noviembre de 1926 ― y es bien preciso:
… comporte un portrait symbolique d’elle et de moi: la sirène, sous la forme de
laquelle elle se voyait toujours de dos et sous cet angle, tient à la main un rouleau de
papier ; le monstre aux yeux fulgurants surgit d’une sorte de vase à tête d’aigle, rempli
de plumes qui figurent les idées (Nadja, p. 95).
… comporta un retrato simbólico de ella y de mí: la sirena, bajo cuya forma ella
se veía siempre de espaldas y bajo ese ángulo, sostiene en la mano un rollo de papel; el
monstruo de ojos fulgurantes surge de una especie de tiesto con cabeza de águila, lleno
de plumas que representan las ideas.
La Sirena es un animal mitológico plenamente integrado en nuestra cultura. En el dibujo
en cuestión aparece de espaldas, con una larga cabellera y dos colas enroscadas.
Atributos tradicionales (con la duplicidad de la cola como variación). El relato es breve,
someramente descriptivo. El monstruo es también mitológico. Sus “ojos fulgurantes”
bastan para caracterizarlo, las precisiones de su aparición le confieren su esencia mítica.
“Sale de una especie de tiesto con cabeza de águila, lleno de plumas que representan las
ideas”: arbitraria y esperpéntica visión explicitada. Ambas figuras representan a los
amantes, según Breton son su “retrato simbólico”. Y, desde luego, el signo del trazado,
el dibujo, no reenvía a dos animales míticos, un monstruo y una Sirena, sino que
pretende significar, caracterizándolos míticamente, a los dos amantes. La significación
misma entre sentido primario y secundario es compleja, no se establece por simple
deducción y está fuertemente cargada de reminiscencias culturales y afectivas.
El símbolo es un concepto maleable y maleado. No es fácil definirlo. Pero se puede
estudiar de muy diversas maneras: bien como resultado de un proceso preconsciente, bien como
procedimiento técnico de la expresión poemática, bien como signo cuya relación con el
referente es convencional o no, y también como representación existencial del imaginario, es
decir, como representación de una experiencia psicológica con implicaciones ontológicas y
éticas. No conviene olvidar, fijándonos en estas últimas, su función didáctica, persuasiva,
parenética, patente en la explicitación y aplicación de su filosofía secreta (Pérez de Moya).
Así pues, por el ejemplo de Nadja, se comprueba cómo el símbolo recurre tanto a modos
de representación como a modos de significación. De la confrontación de ambos modos con el
símbolo podremos entender su naturaleza y relación con el mito.
Conviene tener en mente que esta relación entre mito y símbolo no es clara: el enigma del
símbolo exige una exégesis. Ahora bien, no hay exégesis sin contestación, y el desciframiento
de los enigmas que plantean los símbolos no es una ciencia en el sentido moderno de la palabra.
2.1. La imagen y el signo simbólico
2.1.1. La imagen
Entre los modos de representación se encuentran las imágenes plásticas y los sonidos.
Son propios de la mímesis, modos de designación imitativos. (Dejamos de lado los sonidos).
Hay varios estadios de transformación y comunicación por la imagen plástica o icono,
reproducción o figuración de un objeto. Para nosotros, su examen es lo de menos. Nos interesa
ante todo el tránsito de la imagen icónica a la imagen simbólica. Lo que lleva a considerar el
significado encerrado en toda imagen, o sea, su funcionalidad contextual.
2.1.2. El signo simbólico y su problemática
Entre los modos de significación se encuentran las palabras, los ideogramas y los signos
convenidos, que proceden de modalidades de designación, arbitrarias o no. Son propios de la
7. semiosis o producción de sentidos. (Estos signos son denominados símbolos por la lingüística
de Peirce. No son los que nos interesan).
Pero nos permitimos apuntar que sería un error pensar que una de las principales
diferencias del signo simbólico respecto al signo lingüístico radique en el criterio de la
artitrariedad: toda simbología remite a un código arbitrario y el orden de los signos se distingue
del orden de lo real (Dubois). A la ilusión especular de la imagen corresponde la ilusión
semiológica del signo, que consiste en confundir los signos con lo que designan.
El símbolo no es moneda de cambio para todos los gustos. Dado su carácter polisémico,
enigmático y emotivo, no extraña su incompatibilidad con determinados acercamientos
epistemológicos ni su cercanía con otros. Veámoslo de la mano de Durand (L’Imagination
symbolique).
• En primer lugar, una serie de escuelas desconfían del valor hermenéutico del
símbolo. Para Descartes, el mundo físico (res extensa) es solo figura y movimiento, es decir,
reducible a geometría y álgebra. Incluso este reduccionismo matemático es aplicable a la
sustancia pensante (res cogitans). Spinoza se ocupa de aplicarlo al Ser absoluto. La
imaginación, ámbito por antonomasia del símbolo, es rechazada ― junto con la sensación ―
por los cartesianos, para quienes el símbolo debe ceder el paso al signo y la simbología a la
semiología. En esta misma línea, los positivismos de los siglos XIX y XX anatematizan la
imaginación simbólica. A grandes rasgos, puede apreciarse este rechazo de la imagen a través
del estatuto asignado a la pintura o a la escultura hasta el siglo XX. Su papel cultural sufre en un
mundo que apenas le concede un valor ilustrativo y decorativo: el artista y su imaginación no
deben iluminar, evocar ni, mucho menos, sugerir.
En respuesta al racionalismo de las ciencias de la naturaleza, Freud resucita la creencia en
la eficacia del psiquismo humano. Sin embargo, se le puede achacar cierto reduccionismo.
Valga un ejemplo. Comúnmente se acepta que Minerva saliendo del cráneo de Júpiter simboliza
el origen divino de la sabiduría; para el psicoanalista, por el contrario, esta imagen representa el
nacimiento por la vulva. En última instancia, el pansexualismo lo explica todo.
La sociología y la antropología cuestionan este reduccionismo. Para explicar las
costumbres sociales, sobrecargadas de símbolos, ambas toman por modelo a la lingüística.
Dumézil busca las semejanzas lingüísticas que permitan inferir semejanzas sociológicas. Así, en
la antigua Roma coexisten tres capas sociales cuyo simbolismo religioso se corresponde con tres
dioses latinos: Júpiter, Marte y Quirino. Esta tripartición coincide con una explicación
funcional: Júpiter, su ritual y sus mitos, es el dios de los sacerdotes, Marte el de los caballeros
guerreros y Quirino el de los agricultores, artesanos y comerciantes.
Pero de un reduccionismo sexual expresado en términos de biografía individual (Freud),
hemos caído en un reduccionismo antropológico propuesto en términos de semántica (Dumézil).
La hermenéutica de Lévi-Strauss se basa sobre la infraestructura inconsciente de los
fenómenos calcada sobre la lingüística; su mitología estructural toma por objeto las unidades
significativas de la frase mítica, esto es, el mitema. Es conocido su estudio del mito de Edipo. El
análisis pormenorizado de las afinidades entre los mitemas que lo componen evidencia la
estructura y el sentido de este mito: se trata de un útil lógico encaminado a fines sociológicos,
en concreto, a la resolución de la contradicción existencial entre el origen llamado “autóctono”
del hombre y su filiación resultante de la unión de un hombre y una mujer. Estas explicaciones
también tienen sus detractores. Una parte de la crítica les reprocha que no deshagan el nudo
gordiano de la transcendencia del símbolo, reduciéndolo al signo.
• En segundo lugar, una serie de escuelas confían más en el valor hermenéutico
del símbolo. Una de las principales aportaciones de Jung ha sido la definición del arquetipo
como estructura organizadora de las imágenes. Según él, la función simbólica conjuga dos
elementos contrarios: la conciencia clara y el inconsciente colectivo. El símbolo adquiere en
Jung un carácter benéfico: es constitutivo de la personalidad mediante el proceso de
individuación. (Queda por recordar, a modo de reparo a Jung, cierta confusión entre la
8. conciencia simbólica creadora del arte o de la religión y la conciencia simbólica creadora de
simples fantasmas del delirio, el sueño y la aberración mental).
Bachelard orienta su investigación fenomenológica tanto hacia la producción poética
como hacia la ensoñación. Su cosmología de los cuatro elementos (agua, tierra, fuego, aire) no
se reduce al conceptualismo aristotélico, sino que procede por progresivas ampliaciones, desde
lo percibido por los sentidos (caliente, frío, seco, húmedo) hasta llegar al microcosmos humano
y a su morada (la piedra, las vigas, el hogar, el pozo, la bodega…). Además, confiere un papel
predominante a la infancia, arquetipo de la felicidad sencilla que nada tiene que ver con la
perversidad polimorfa propugnada por Freud. Una nota curiosa: Bachelard afirma que el
significante del arquetipo de la infancia es el olor. Pueden recordarse a este efecto el gusto de la
magdalena y el perfume de la infusión de té en la obra de Proust. Hay como una epifanía que
actúa simbólicamente como fuente de reminiscencia, en las flores secas, en el olor de los viejos
armarios.
Gilbert Durand instaura una teoría general del imaginario eminentemente integradora.
Según él, no existe conciencia racional por un lado y fenómeno psíquico por otro: el imaginario
constituye la totalidad del psiquismo. Durand distingue una serie de factores psicosociológicos
(fuerzas de cohesión o regímenes ― diurno, nocturno ―) y psicofisiológicos (tres esquemas de
acción ― distinguir, ligar, confundir ―, tres grupos de estructuras ― esquizomorfas o heroicas,
sintéticas o dramáticas, místicas o antifrásticas ―, tres reflejos dominantes ― postural,
digestivo, copulativo ―) que le permiten establecer una especie de mapa general de las
principales categorías simbólicas. Durand sostiene la existencia de un vasto sistema de patrones
antagónicos que permiten clasificar las civilizaciones en dos grandes grupos irreductibles:
culturas de la idea y culturas de la visión, apolíneas y dionisíacas (por utilizar la nomenclatura
de Nietzsche), discernibles en régimen diurno y en régimen nocturno. Todos los símbolos
pueden ser clasificados en grupos isotópicos polarizados según este mismo sistema de patrones
o de pertenencia.
Hay, por lo tanto, dos tipos de hermenéuticas: las que reducen el símbolo al epifenómeno,
al efecto, a la superestructura o al síntoma, y las que lo amplifican y se dejan llevar por su
fuerza integradora. Ricœur denomina a las primeras “arqueológicas” (se zambullen en el pasado
biográfico y sociológico) y a las segundas “escatológicas”. En las primeras, desmitificadoras, el
filósofo incluye a Freud, Lévi-Strauss, Nietzsche, Marx… En las segundas, remitificadoras, a
Heidegger, Eliade, Bachelard… Por supuesto, la lectura que ambas hermenéuticas hacen de los
mitos es diametralmente opuesta. Ricœur lo demuestra recurriendo al mito de Edipo. La postura
desmitificadora lo interpreta como el drama del incesto: movido por las pulsiones de su
infancia, Edipo mata a su padre y se casa con su madre. La postura remitificadora lo interpreta
como el drama de la verdad: movido por el descubrimiento de la verdad, Edipo busca al asesino
de su padre. A la esfinge que representaba el enigma freudiano del nacimiento se opone
Tiresias, el vate ciego que simboliza la verdad. La diferencia es notoria. Para Freud la ceguera
de Edipo era un síntoma de un autocastigo, de una autocastración, mientras que para Ricœur la
ceguera del héroe, le convierte en un nuevo Tiresias, permitiéndole acceder al conocimiento.
Ahora estamos en condiciones de retomar el hilo de las relaciones entre mito, relato y
símbolo.
Cuando decimos que el mito es un relato simbólico indicamos sencillamente que, al
incluir símbolos, vehicula un significado de tipo lógico-simbólico cargado de afectividad.
En todo mito la simbolización está articulada con el relato: abarca personajes, lugares,
tiempos, acciones y la dimensión sobrenatural, maravillosa, propia de todo referente
trascendente. Ella se verifica tanto en la sucesión como en la recurrencia de temas y nexos
lógicos que obran a favor de la coherencia de la que estamos hablando. Por un lado, la sucesión
se verifica en la diacronía del relato, por otro, el despliegue temático y la recurrencia de los
nexos es de orden paradigmático. Y tanto es así que confiere al relato una legibilidad de la que
carecían los temas considerados aisladamente. De ahí la importancia de contextualizar los temas
y no de aislarlos como mitemas.
9. Dicho de otra manera: todo mito lleva una carga simbólica susceptible de formar parte de
una nomenclatura, pero, a causa de que el símbolo significa más de lo que se encierra en su
signo ― a diferencia de otros signos unívocos como el arquetipo o la alegoría ―, se puede
poner en tela de juicio, por ejemplo ― que nos perdone la feliz memoria de Gilbert Durand ―,
el que la rueda no tenga más significación imaginaria que el signo arquetípico del ciclo.
Contextualizada, la serpiente, símbolo del ciclo, sin lugar a dudas, es polisémica y puede
simbolizar tanto la transformación temporal, como la fecundidad, la perennidad ancestral…
2.2. El ejemplo del ángel caído
Pondremos un ejemplo. A lo largo de la historia los escritores han adaptado temas y
textos a sus cosmovisiones. Surge así una serie de relatos sobre un ser espiritual que infringe las
reglas del ser soberano, es castigado por su desobediencia y pierde parte de sus atributos. Un
arquetipo (el ángel), unos temas (la caída, el castigo) se conjugan en relatos cuyo protagonista
simbólico (Lucifer) cobra una dimensión mítica en la literatura cristiana: el ángel caído.
Es mito eximio por reunir todas las condiciones exigidas: carácter pretextual,
cristalización textual mínima o sencilla, singularización espaciotemporal, significación de un
acontecimiento, dimensión trascendente, respuesta a una pregunta sobre el origen, presente o
futuro del hombre individual o colectivo.
Históricamente, este mito se enriquece con un nuevo tema (la ascensión) y conforma un
nuevo mito que entraña connotaciones simbólicas también nuevas en una época determinada de
la literatura y el arte. Se trata de un caso particular: el ángel caído romántico, símbolo de la
humanidad caída y redimida. El mito, sin dejar de serlo, se adecua como símbolo a una cultura
determinada.
Este carácter expansivo del mito angélico se desprende de su componente simbólica.
Como Camus ha expresado, “un símbolo desborda siempre a quien lo utiliza y le hace decir en
realidad más de lo que tiene conciencia de expresar” (Le Mythe de Sisyphe). Lo ejemplifica
Camus en su libro, lo ejemplifica Giraudoux en su teatro.
El proceso de simbolización de este ángel no ha sido inmediato ni espontáneo: requirió
una intelectualización de su imagen, primero en los autores románticos, después en sus lectores.
Supuso un movimiento conceptual que invirtió la caída en ascensión. Este proceso fue cultural,
puede ser que sea antropológico.
En efecto, si en los relatos de la antigüedad el ángel caído podía hacer referencia directa
al renegado por antonomasia, a medida que transcurren los siglos (sobre todo con Orígenes y
Plotino) el renegado asume de modo predominante una referencia metafórica al hombre y la
sociedad. Esta traslación, latente en algunos escritos de la teosofía de los siglos XVII y XVIII,
se torna patente en el siglo XIX, cuando las convulsiones sociales desestabilizan el Antiguo
Régimen y anuncian una nueva primavera de la humanidad. En la época romántica, las
promesas de progreso abundan. Son numerosos los pensadores y políticos que propagan
ideologías liberalizadoras de la humanidad angustiada ― la obsesión exitosa del mito de
Prometeo (encadenado y desencadenado) es una buena muestra de esta situación.
No extraña que el anuncio del progreso humano, especialmente de las clases deprimidas,
encuentre un eco fiel en las nuevas promesas de la remisión angélica: la rehabilitación del ángel
caído significa la rehabilitación del hombre caído.
Puede observarse aquí una concomitancia entre el plan salvífico divino y el plan salvífico
humano. Según la tradición judeocristiana, el hombre histórico está, por así decirlo, arraigado en
su prehistoria teológica revelada. El Génesis ya había anunciado tanto la caída del hombre como
su redención. Según la tradición romántica, la humanidad, a pesar de su degeneración en el
decurso histórico, está llamada a una ascensión futura y definitiva.
La prehistoria teológica se da como revelada, es decir, absolutamente indeducible del
análisis de la experiencia histórica del hombre. Sin embargo, existe una singular concordancia
entre la revelación y la experiencia en orden al fundamento constitutivo de la existencia
humana. En el pensamiento judeocristiano, hay una continuidad entre el estado originario (o de
10. naturaleza íntegra), el estado histórico (o de naturaleza caída) y el estado eterno (estado de
naturaleza gloriosa del que gozarán los justos al final de los tiempos).
Los poetas, impregnados de las ideas de progreso material y espiritual, no dudan en
recurrir a la poesía, al teatro o a la epopeya para expresar de modo metafórico su
convencimiento de la redención humanitaria, que habitualmente circunscriben al ámbito
puramente social. Ahora bien, tales desarrollos románticos ya no concuerdan ni con los textos ni
con la tradición de los que parten. La caída y la redención del ángel se distancian de su canon
escriturístico y de su reflexión tanto rabínica como eclesiástica: ningún texto sagrado, ninguna
escuela judía, ninguna definición cristiana expone la rehabilitación de los ángeles caídos. Aquí,
como en otros aspectos, el romanticismo es ecléctico, tiende a conciliar tendencias opuestas: los
textos sagrados con los apócrifos, la teología cristiana con los movimientos teosóficos y el
pensamiento oriental.
2.3. Conclusión
La imagen gráfica, la transcripción plástica, puede servir para duplicar ― lo hemos visto
en el ejemplo de Nadja ― la imagen mental transcrita por el discurso. Pero no añade nada. A
decir verdad, funciona como una ilusión especular, y traduce el deseo inquieto de que la imagen
sea copia fiel de los modelos. Por el contrario, la imagen simbólica rompe todos los lazos con
un modelo. Es imagen de un más allá.
A pesar, pues, de lo que afirma Breton, su retrato de los dos amantes no es nada
simbólico, es más bien alegórico. De ahí nuestra primera conclusión: distinguir entre imagen
viva e imagen muerta si se pretende discutir sobre el simbolismo mítico.
Ahora bien, ¿cómo distinguir entre imagen viva e imagen muerta? Será nuestra segunda
conclusión. A partir de dos criterios de funcionalidad: la contextualización de la imagen
simbólica dentro del relato y la consecuente dinamización que confiere a este su coherencia. A
resultas de este proceso, una mitocrítica fecunda la narratología.
Referencias textuales
André BRETON, Nadja, ed. Dominique Carlat y Alain Jaubert, París, Gallimard, “Folioplus
Classiques”, 2007.
Referencias críticas
Albert CAMUS, Le Mythe de Sisyphe. Essai sur l’absurde, París, Gallimard, “Folio Essais”, 1942.
Claude-Gilbert DUBOIS, “Symbole et mythe”, Questions de mythocritique. Dictionnaire, dir.
Danièle Chauvin, André Siganos et Philippe Walter, Paris, Imago, 2005, p. 331-348.
Gilbert, DURAND, Les Structures anthropologiques de l’imaginaire, París, Dunod, 1969 (1960).
― L’Imagination symbolique, París, PUF, “Quadrige”, 2008 (1964).
Claude LÉVI-STRAUSS, “La structure des mythes”, Anthropologie structurale I, París, Plon,
“Pocket”, 1958 y 1974 : 240-249.
Paul RICŒUR, Philosophie de la volonté: II. Finitude et culpabilité, pref. Jean Greisch, París,
Points, “Essais”, 2009 (1960).
― Le Conflit des interprétations. Essais d’herméneutique, París, Éditions du Seuil, 1969.
Tzvetan TODOROV, Théories du symbole, París, Éditions du Seuil, “Points”, 1977.