La Consejería de Sanidad de Madrid cerrará 1.911 camas hospitalarias este verano, un 23% más que el año pasado, a pesar de que la lista de espera quirúrgica ha alcanzado un récord de 75.184 pacientes. El cierre de camas se justifica por la baja demanda durante las vacaciones y para realizar obras de mejora, pero los sindicatos advierten que podría colapsar las Urgencias y sobrecargar al personal.