El documento analiza el uso de tecnologías en la administración de medicamentos de alto riesgo. Señala que las nuevas tecnologías permiten desarrollar el rol de enfermería con técnicas actualizadas y facilitan la comunicación entre compañeros y la investigación. Sin embargo, un uso inadecuado puede generar aprendizajes incompletos y problemas de salud en el personal. También existen riesgos como exposición a radiación o defectos en redes que pueden retrasar el cuidado.