El petróleo se originó hace millones de años a partir de los restos de organismos marinos y acuáticos que se depositaron en el fondo de mares y ríos. Estos depósitos con el tiempo se convirtieron en rocas sedimentarias que, debido a la presión y el calor, transformaron la materia orgánica en petróleo y gas natural. El petróleo es un líquido compuesto principalmente de carbono e hidrógeno que se encuentra de forma natural en el subsuelo.