Para tomar una decisión para la empresa, se debe considerar las necesidades de la empresa y si la decisión ayudará a satisfacer esas necesidades, las prioridades de beneficiar a todos los empleados creando un buen ambiente laboral y comunicación, y los valores de responsabilidad, prudencia, justicia, confianza y seguridad, así como si la decisión refleja los gustos y preferencias de los involucrados.