Este poema es una de las coplas escritas por Jorge Manrique para alabar a su padre después de su muerte. En pocas palabras elogia las muchas virtudes de su padre como ser amable con amigos y familiares, fuerte contra enemigos, sabio, gracioso y justo. También utiliza una metáfora comparando a su padre con un león para representar su fortaleza ante personas problemáticas.