Los bebés prematuros nacen antes de las 37 semanas de embarazo y requieren atención médica especial, a menudo en una unidad de cuidados intensivos neonatales. Los prematuros enfrentan mayores riesgos de salud como hiperbilirrubinemia, apnea, anemia, síndrome de dificultad respiratoria neonatal, infecciones, conducto arterioso persistente y retinopatía del prematuro.