1. PREMIO CERVANTES
EL PREMIO CERVANTES
SE ENTREGA CADA AÑO
EN UN ACTO
INSTITUCIONAL EN LA
UNIVERSIDAD DE
ALCALÁ DE HENARES,
DONDE NACIÓ MIGUEL
DE CERVANTES EN
1547. MUERE EL 23 DE
ABRIL DE 1616 Y POR
ESTE MOTIVO SE
CELEBRA EN ESTA
FECHA EL DÍA DEL
LIBRO Y SE ENTREGA

2. PREMIO CERVANTES
JORGE GUILLÉN, 1976. ESPAÑA
ALEJO CARPENTIER, 1977.CUBA
DÁMASO ALONSO, 1978. ESPAÑA
JORGE LUIS BORGES Y GERARDO DIEGO, 1979. ARGENTINA Y
ESPAÑA
JUAN CARLOS ONETTI, 1980. URUGUAY
OCTAVIO PAZ, 1981. MÉXICO
LUIS ROSALES, 1982. ESPAÑA
RAFAEL ALBERTI, 1983. ESPAÑA
ERNESTO SÁBATO, 1984. ARGENTINA
GONZALO TORRENTE BALLESTER, 1985. ESPAÑA

3. PREMIO CERVANTES
ANTONIO BUERO VALLEJO, 1986, ESPAÑA
CARLOS FUENTES, 1987, MÉXICO
MARÍA ZAMBRANO, 1988, ESPAÑA
AUGUSTO ROA BASTOS, 1989, PARAGUAY
ADOLFO BIOY CASARES, 1990, ARGENTINA
FRANCISCO AYALA, 1991, ESPAÑA
DULCE MARÍA LOYNAZ, 1992, CUBA
MIGUEL DELIBES, ESPAÑA, 1993
MARIO VARGAS LLOSA, 1994, PERÚ
CAMILO JOSÉ CELA, 1995, ESPAÑA

4. PREMIO CERVANTES
JOSÉ GARCÍA NIETO, 1996, ESPAÑA
GUILLERMO CABRERA INFANTE, 1997, CUBA
JOSÉ HIERRO, 1998, ESPAÑA
JORGE EDWARDS, 1999, CHILE
FRANCISCO UMBRAL, 2000, ESPAÑA
ÁLVARO MUTIS, 2001, COLOMBIA
JOSÉ JIMÉNEZ LOZANO, 2002, ESPAÑA
GONZALO ROJAS, 2003, CHILE
RAFAEL SÁNCHEZ FERLOSIO, 2004, ESPAÑA
SERGIO PITOL, 2005, MÉXICO

5. PREMIO CERVANTES
ANTONIO GAMONEDA, 2006, ESPAÑA
JUAN GELMAN, 2007, ARGENTINA
JUAN MARSÉ, 2008, ESPAÑA
JOSÉ EMILIO PACHECO, 2009, MÉXICO
ANA MARÍA MATUTE, 2010, ESPAÑA
NICAMOR PARRA, 2011, CHILE
JOSÉ MANUEL CABALLERO BONALD, ESPAÑA, 2012

6. PREMIO CERVANTES
JOSÉ
MANUEL
CABALLERO
BONALD,
PREMIO
CERVANTES
2012

7. CABALLERO BONALD
Poeta, narrador y ensayista, es un autor perteneciente a la generación de los 50.
Nace en Jerez de la Frontera, el 11 de Noviembre de 1926.
Desde sus primeros títulos se aprecia en Caballero Bonald la aleación entre
testimonialismo social, contiguo en ciertos rasgos temáticos al realismo dialéctico, y
rememoración temporalista, que lo acerca a la poesía elegíaca de larga tradición,
aunque sin dejarse absorber por la habitual melancolía retrospectiva y sin renunciar a
la impronta crítica.
Con la evolución de su obra y la consolidación de su universo temático, algunos
motivos se mantienen, como la crítica a la opresión social, en tanto que otros, como la
rememoración del tiempo pasado -frecuentemente el de la infancia-, intensifican las
marcas que hicieron imposible la plenitud, o se dejan ganar por una desilusión barroca
fruto del contraste entre los ambiciosos proyectos y los decepcionantes resultados.
Concebida como un ejercicio crítico a partir de la memoria, su poesía recoge el recuelo
desengañado de la existencia: materia deleznable al fin, cuyo destino más elevado es
ser rescatada por la evocación y fosilizada por la escritura.

8. CABALLERO BONALD
POESÍA: NOVELA:
●
●
Las adivinaciones (1952)
● Dos días de septiembre (1962)
● Ágata ojo de gato (1974),
●
Memorias de poco tiempo
(1954) ● Toda la noche oyeron pasar pájaros
(1981)
●
Las horas muertas (1959)
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En la casa del padre (1988)
●
●
Pliegos de cordel (1963)
●
Campo de Agramante (1992)
●
● Descrédito del héroe (1977)
●
●
Diario de Argónida (1997)
●
● Entreguerras (2012),

9. CABALLERO BONALD
Y tú me dices Desde un lugar que aprendo
a recorrer cada mañana, vuelvo
que tienes los pechos vencidos de esperarme,
sobre mis pasos y te espero
que te duelen los ojos de tenerlos vacíos de mi cuerpo,
allí donde estoy solo.
que has perdido hasta el tacto de tus manos Matinal
de palpar esta ausencia por el aire, ofertorio del sueño, escribo el nombre
que olvidas el tamaño caliente de mi boca. de tu vida, te vas desentrañando
Y tú me lo dices que sabes entre las hoscas hojas traicionadas
que me hice sangre en las palabras de repetir tu en la noche. Eres la reclusión
donde me sacio, el acuciante
nombre,
azar en que te tengo
de golpear mis labios con la sed de tenerte, cada día, amor propiciatorio que reúne
de darle a mi memoria, registrándola a ciegas, lo perdido.
una nueva manera de rescatarte en besos Vivo allí donde estuve,
desde la ausencia en la que tú me gritas junto al mar delirante, libre
que me estás esperando. velocidad inmóvil orillada
de fuego, bosque lustral
Y tú me lo dices que estás tan hecha
de la alegría.
a este deshabitado ocio de mi carne ¿Qué me queda
que apenas sí tu sombra se delata, de aquel itinerario, habitaciones
que apenas sí eres cierta clandestinas, bautismales refugios
en esta oscuridad que la distancia pone de única verdad, qué me queda
entre tu cuerpo y el mío. detrás del sortilegio? Ser
feliz un instante y perderte, mientras
vuelvo sobre mis pasos cada día.

10. CABALLERO BONALD
Solícito el silencio se desliza por la mesa nocturna...
Solícito el silencio se desliza por la mesa nocturna, rebasa el irrisorio
contenido del vaso. No beberé ya más hasta tan tarde: otra vez soy el tiempo
que me queda. Detrás de la penumbra
yace un cuerpo desnudo y hay un chorro de música hedionda dilatando las
burbujas del vidrio. Tan distante como mi juventud, pernocta entre los muebles
el amorfo, el tenaz y oxidado material del deseo. Qué aviso más penúltimo
amagando en las puertas,
los grifos, las cortinas. Qué terror de repente de los timbres. La botella vacía se
parece a mi alma.
De "Laberinto de fortuna" 1984

11. CABALLERO BONALD
"Realmente es la novela mía en la que me "Cuando medio comprendí que podía oír los
siento más y mejor expresado [...] Aquí ruidos antes de que se produjesen, ni siquiera lo
canalicé lo que más me divierte hacer en consideré una rareza. No sé por qué pensé eso
literatura, que es la creación de un mundo entonces, pues tampoco había tenido ocasión de
propio, divergente de la realidad; un mundo en hacer ninguna clase de consulta en este sentido, y
el que sustituí una historia posible por sus mucho menos de prever hasta qué punto iba a
equivalencias mitológicas". afectarme tan poco frecuente especialidad. Todo
" Esa mezcla de lozanía y podredumbre, de empezó hace ya casi nueve años, un día en que tío
esplendor y desolación que es Doñana debía Leonardo me llevó a una tala de pinos negrales
aparecer en la novela a través de un lenguaje por los cerros de Alcaduz...“
cuyo barroquismo reflejara en cierto modo la
suntuosidad de la naturaleza". (Comienzo de Campo de Agramante)
(El autor sobre Ágata ojo de gato)