El documento discute cómo el deporte y la educación física pueden ser educativos. Señala que deben promover el conocimiento práctico, la conducta moral y los valores educativos, y realizarse de manera que no cause daño a los participantes o tenga fines antisociales. También destaca que la educación física ayuda a la formación integral del ser humano al impulsar procesos cognitivos y afectivos superiores, y fomentar la participación, convivencia y disfrute de la actividad física de manera comunitaria