El documento describe la investigación como un proceso sistemático y riguroso para construir conocimientos sobre una problemática, mientras que la formación docente es un proceso para configurar sujetos docentes a través de prácticas de enseñanza y aprendizaje. Aunque la investigación y la formación docente comparten el objetivo de construir conocimientos, siguen lógicas diferentes dada la naturaleza distinta de sus procesos y objetos de estudio.