El documento describe una investigación sobre la obesidad y la grasa que involucró un metaanálisis de estudios genéticos a gran escala. Los investigadores descubrieron que cada persona tiene un grado diferente de susceptibilidad a la obesidad y encontraron dos nuevas variantes genéticas relacionadas con la regulación de la insulina y el apetito. El descubrimiento es importante para la humanidad porque ayudará a controlar la obesidad y puede conducir al desarrollo de nuevos tratamientos.