1. Hipoacusias
Disminución subjetiva de la audición por parte del
paciente (de
fi
nición clínica).
- Normoacusia: audición normal
- Anacusia: Falta completa de la audición unilateral
- Cofosis: anacusia bilateral
Evaluación del paciente
1. Interrogatorio:
2. Examen Físico
1. Examen ORL Básico
2. Acumetria
3. Métodos complementarios funcionales:
1. Estudios audiológicos subjetivos y/u
objetivos
4. Métodos Complementarios Generales
1. Dx por imágenes
2. Laboratorios
3. Etc.
Examen físico:
- Región preauircular
- Región auricular
- Región retroauricular
- Otoscopia ( maniobra de tracción de pabellón
auricular)-> Alinear estrutura cartilaginosa con la
osea
- Niños/ RN: Tracción hacia abajo
- Ancianos: Tracción hacia arriba
- Adultos: Tracción hacia atrás/posterior y
ligeramente hacia arriba
Acumetría:
1. Diapasón
- Prueba de Weber (compara vias óseas entre
ambos oídos)
- Prueba de Rinne ( compara vias óseas/ via aérea,
del mismo oido).
Anamnesis:
- Unilateral o bilateral
- Comienzo, Duración, Evolución
- Sintomas concomitantes locales.
- Otalgia ( dolor de oído referido), Otodinea,
Supuración
- Síntomas asociados de función auditiva
- Síntomas de Alteraciones del Equilibrio
- Síntomas asociados al oído.
- Acúfenos, tinnitus, zumbido.
- Autofonia (retumbe de la propia)
- Diploacusia (dos sonidos/frecuencias - en una
frecuencia o audición en eco/reverberancia)
- Algiacusia (dolor ante estimulo acustico)
- Fallo discriminativo (distorsión)
- S. de oído tapado y s. de oído lleno (presencia)
En la evaluación de un paciente con hipoacusia es
muy importante el examen físico completo (observar
manos, pies, facies, ojos, alteraciones motrices o
retrasos madurativos, etc.) para poder evaluar un
potencial síndrome. También es importante indagar
sobre antecedentes familiares de hipoacusia o
síndromes asociados a hipoacusia. Debe
interrogarse sobre el embarazo, ¿fue un embarazo
controlado?, ¿cuántas semanas duró?, etc. En
cuanto al parto, es fundamental conocer si éste fue
natural o por cesárea (saber la causa de ésta), si
hubo sufrimiento fetal, el Apgar, si requirió
internación o tratamiento antibiótico por algún
motivo, y si hubo hiperbilirrubinemia o algún otro
trastorno periparto.
Hipoacusias neurosensoriales o
perceptivas x Hipoacusias
Conductivas
:
2. Hipoacusias neurosensoriales:
Son aquellas pérdidas auditivas producidas por
alteraciones del órgano de Corti o en las distintas
estructuras que constituyen la vía acústica hasta la
corteza temporal. Se estima que su incidencia
bilateral moderada a profunda es de 0,5 a uno cada
1.000 nacidos vivos.
Aumenta a uno cada 200 niños nacidos vivos con
factores de riesgo (hipoxia, prematurez, etc.). El
50% de las hipoacusias neurosensoriales son de
origen hereditario y de ellas el 70% se presenta
como único síntoma, mientras que el 30% restante
forma parte de algún síndrome. El 60 a 70% de las
hipoacusias neurosensoriales es hereditaria se
transmite de forma autosómica recesiva 20% se
dan de modo autosómico dominante y un 2% es
ligado al cromosoma x.
HIPOACUSIAS DE CAUSA GENÉTICA NO
SINDRÓMICAS: Son cuadros en los cuales la
mutación de un gen especí
fi
co desencadena la
hipoacusia. Son detectadas mediante una
evaluación genética. Por lo general son hipoacusias
congénitas o rápidamente progresivas.
HIPOACUSIAS GENÉTICAS ASOCIADAS A
SÍNDROMES: Existen más de 400 síndromes que
mani
fi
estan hipoacusia, ya sea conductiva,
neurosensorial o mixta, y a su vez ésta puede ser
congénita o rápidamente progresiva. Por esta razón
los niños con malformaciones o síndromes deben
ser evaluados audiológicamente de manera
periódica.
1.Transtornos Metabólicos
2. Asociados a trastornos tegumentarios y
pigmentarios
3. 3. Asociados a transtornos oculares
4. Asociados a transtornos craneofaciales y
esqueléticos
5. Asociados a transtornos cardíacos
6. Asociados a trastornos del sistema nervioso
central
7. Asociados a alteraciones cromosómicas
8. Hipoacusias asociadas a malformaciones del
oído interno.
9. Hipoacusia debido a factores del parto.
HIPOACUSIAS ADQUIRIDAS DE CAUSA
INFECCIOSA INTRAUTERINA (TORCHS): La
hipoacusia puede ser congénita o progresiva, y a su
vez puede ser de leve a profunda. Un factor
importante en la severidad de esta entidad es el
trimestre en el cual se produce la infección materna,
siendo siempre más agresivas las infecciones que
suceden en el primer trimestre del embarazo.
(Toxoplasmosis, Rubéola, Citomegalovírus, Herpes
Simple I y II, Sí
fi
lis, HIV, Parotiditis, Herpes Zoster.
TRAUMA ACÚSTICO (TRAUMATISMO SONORO
O SORDERA POR EL RUIDO): Los sonidos
intensos, de más de 90 dB, pueden producir
hipoacusias perceptivas por lesión y muerte de las
células ciliadas del órgano de Corti. En la génesis
del trauma acústico intervienen tres factores
íntimamente vinculados:
• La intensidad sonora
• La duración de la exposición a la fuente sonora
• La labilidad individual de la cóclea a la agresión
PRESBIACUSIA
Es la forma más común y progresiva de
despoblación neuronal en el órgano de Corti. Si bien
su inicio es variable suele observarse desde los 60
años, y siendo de carácter progresivo,
especialmente en tonos agudos, bilateral y
simétrica.
Es de carácter multifactorial, con una predisposición
genética y factores ambientales que favorecen la
pérdida auditiva.
OTOTOXICIDAD VESTIBULAR Y AUDITIVA
Se de
fi
ne como ototoxicidad a la capacidad que
tienen ciertos componentes terapéuticos y
sustancias químicas de uso local o sistémico de
causar daño funcional o degeneración celular de las
estructuras que conforman el oído interno.
Antibióticos:
- Aminoglucósidos:
- Estreptomicina: Predominantemente
vestibulotóxica
- Kanamicina, neomicina y amikacina:
Predominantemente cocleotóxicas
- Tobramicina y gentamicina: vestibulotóxicas y
cocleotóxicas
- Macrólidos.
- Eritromicina: Toxicidad al inicio, pero de
persistir la exposición al antibiótico se con-
vierte en permanente.
- Antineoplásicos.
- Cisplatino y carhoplatino: Son dos de los
agentes quimioterápicos más usa- das en la
práctica clínica. El primero es cocleotóxico y
causa tinnitus e hipoacusia en
aproximadamente el 7% de los pacientes.
- Diuréticos.
- Ácido etacrínico y furosemida, son los
diuréticos del asa a los que se les atribuyen
propiedades ototóxicas.
- Antiin
fl
amatorios.
- Antiin
fl
amatorios no esteroideos: salicilatos,
utilizados en altas dosis, pro- ducen hipoacusia
neurosensorial bilateral simétrica de hasta 40
dB, que se acompaña de ligeras alteraciones
de la discriminación
Prueba de Rinne
Preparación: Se utiliza un diapasón, que es
golpeado ligeramente para hacerlo vibrar.
1. Conducción ósea: El pie del diapasón vibrante se
coloca en el proceso mastoideo del paciente (el
hueso detrás de la oreja).
2. Conducción aérea: Después de que la persona
indica que ya no puede oír el sonido, el diapasón se
mueve rápidamente frente al oído externo.
3. Comparación: Se compara la duración del sonido
oído por conducción ósea (cuando el diapasón está
en el hueso) versus la conducción aérea (cuando el
diapasón está en el aire cerca del canal auditivo).
Interpretación: Normalmente, la conducción aérea
es más e
fi
ciente y el sonido se escucha por más
tiempo por esta vía. Si la conducción aérea es más
corta que la ósea, puede indicar una pérdida
auditiva conductiva en ese oído.
Prueba de Weber
Preparación: Al igual que en Rinne, se golpea un
diapasón para hacerlo vibrar.
Ubicación: El pie del diapasón se coloca en el
centro de la frente del paciente, en el vértice del
cráneo o en los dientes frontales.
Percepción del sonido: Se le pide al paciente que
indique en cuál oído escucha el sonido más fuerte o
si lo escucha igual en ambos lados.
Interpretación:
- Si el sonido se escucha más fuerte en un oído,
esto puede indicar una pérdida auditiva
conductiva en ese oído (el oído enfermo "oye"
mejor el sonido conducido por los huesos) o una
pérdida auditiva neurosensorial en el oído
opuesto.
- Si se escucha igual en ambos oídos, esto sugiere
una audición normal o una pérdida auditiva
neurosensorial simétrica.
4. Valores de Hipoacusia
Las pérdidas auditivas conductivas se pueden
clasi
fi
car en diferentes niveles según su gravedad.
La clasi
fi
cación más común se basa en los niveles
de pérdida auditiva según la Organización Mundial
de la Salud (OMS) y la Academia Americana de
Audiología (AAA). Estos niveles se expresan en
decibelios (dB) y se dividen en:
- Pérdida auditiva leve: Entre 26 y 40 dB.
- Pérdida auditiva moderada: Entre 41 y 55 dB.
- Pérdida auditiva moderadamente severa: Entre 56
y 70 dB.
- Pérdida auditiva severa: Entre 71 y 90 dB.
- Pérdida auditiva profunda: Más de 90 dB.
Estos niveles se utilizan para describir la gravedad
de la pérdida auditiva conductiva en función de la
di
fi
cultad que experimenta la persona para
escuchar sonidos a diferentes frecuencias.